1. Instituto Politécnico Nacional
Unidad Profesional Interdisciplinaria de
Ingeniería y Ciencias Sociales y Administrativas
ACTIVIDAD OBLIGATORIA 3- REFLEXIONES SOBRE
CIBERCULTURA
ALUMNO:
Bautista Pérez Aime Viridiana
PROFESOR:
Claudia Marina Vicario Solórzano
UNIDAD DE APRENDIZAJE:
Alfabetización Digital
SECUENCIA:
3CM50
BOLETA:
CORREO:

2. 2012600137
petiteaime22@hotmail.com
Fecha: 27/septiembre/2013
Introducción
Actualmente la sociedad está inmersa dentro de muchos cambios en los
diferentes ámbitos de la vida (trabajo, ocio, educación, información,
consumo, etc.), debido a los avances de nuevas Tecnologías de
Información y Conocimiento las cuales han transformado e impulsado el
desarrollo económico, político y cultural de muchos países, sin embargo,
no todos los gobiernos de las naciones están trabajando en materia de
Tecnología, Comunicación e Información, siendo el caso de México el cual
aún siendo miembro de la Unión Internacional de Comunicaciones, ha
establecido pocas normas alrededor del acceso, uso y conocimiento de las
TIC´s dentro del país, situación de la cual se hablara dentro de este
ensayo, con el fin de analizar y proveer un panorama de acuerdo a los
siguientes puntos:
Escenario que guarda la Cibercultura en México
Los marcos de política pública asociados con el tema en el país
Situación actual de México en la Cibercultura.
Palabras Clave:
Información
Conocimiento
Sociedad
TIC
Agenda Digital Nacional
Telecomunicación

3. Gobierno
Desarrollo
Desarrollo
México es una nación con un potencial enorme, muestra de ello es el
hecho de que sea la economía número “20, dentro de una muestra de 128
países, en el Índice de Complejidad Económica, publicado por el Centro de
Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard” (Secretaría de
Economía, 2011), el cual mide los conocimientos y capacidades
productivas acumuladas es un país que le permiten producir bienes con
un alto grado de sofisticación. Así mismo “México es el país de
Latinoamérica y el Caribe mejor posicionado en el Índice; el siguiente país
de la región con mejor posición es Panamá (30). Adicionalmente, México se
encuentra por encima de todos los países BRIC: Brasil (52), Rusia (46),
India (51) y China (29)”, (2011, ¶3).
Lo anterior podría referirnos a una autentica nación en vías de desarrollo,
empero, a pesar de lo que dicha publicación nos pudiera indicar la
realidad en la que está inmerso el país es poco alentadora, pues “México
ocupa el lugar 48 de 65 en la evaluación de conocimiento de la OCDE”
(CNN México, 2010), de acuerdo a un estudio realizado en 2010, lo cual
muestra fehacientemente el bajo nivel de adquisición de conocimiento en el
país, que a su vez se refleja en una insuficiente capacidad de producir
bienes con un mayor valor agregado y en consecuencia, lograr una mayor
prosperidad.
Teniendo en cuenta estas contradicciones, debemos aclarar que si bien
México se encuentra en un aparente estancamiento, es por el hecho de
haber alcanzado ciertos logros como lo son: exportar una gran variedad de
productos en relación al resto del mundo y un aumento considerable en el
grado de especialización y conocimientos que se requieren para la
elaboración de dichos productos, ya que pocos países son capaces de
producir algunos de estos, sin embargo, esto no lo exime de fallar en
sectores primordiales, como lo son, proveer un adecuado nivel de

4. educación desde los niveles básicos, lo que repercute directamente en las
dificultades que presenta la mayor parte de la población para
incursionarse en una creciente sociedad global cuyas bases son la
innovación tecnológica y social continua que avanza a un ritmo
vertiginoso.
Dada esta coyuntura han comenzado a surgir innumerable cantidad de
teorías y términos que buscan analizar y describir esta emergente e
imparable nueva realidad, ejemplo de ello es el término “Cibercultura” de
Lévy (2007), que describe “en general, al conjunto de los sistemas
culturales surgidos en conjunción con dichas tecnologías digitales (p.7)”.
En este sentido se pueden utilizar, asimismo, los términos Cultura Digital
o Cultura de la Sociedad Digital (utilizando la expresión sociedad digital
como traducción de e-society) para designar la cultura propia de las
sociedades en las que las tecnologías digitales configuran decisivamente
las formas dominantes tanto de información, comunicación y
conocimiento, como de investigación, producción, organización y
administración.
Al analizar lo anterior pueden surgir muchos cuestionamientos sobre cuál
es la posición que asume México en este nuevo contexto que parece
extenderse por todo el mundo y que está generando con ello una nueva
división entre naciones tecnológicamente desarrolladas y las que no lo
están. Si bien, dicha situación se puede explicar desde el punto de vista
económico pues a mayor capacidad de adquisición mejor nivel de
educación, cultura, acceso a la información y a los nuevos artefactos
tecnológicos, también se debe tomar en cuenta que la mayoría de los
países desarrollados ponen poco énfasis en el desarrollo de programas e
iniciativas que busquen contribuir al fortalecimiento de la investigación
tecnológica, lo que sumado al primer rasgo equivale a un atraso que crece
a pasos agigantados y que inevitablemente margina a muchos países de
los beneficios que las herramientas tecnológicas pueden proveer en la vida
de las personas. Desafortunadamente México se encuentra dentro de este
grupo, como lo indica el Informe de Desarrollo Humano 2013, llevado a
cabo por Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, “que sitúa al
país en el número 61 de 187 naciones, con una inversión del 0.4% del PIB
en investigación y desarrollo, pero que paralelamente lo mantiene en el
grupo de los países con un desarrollo humano alto” (UNDP, 2013).

5. Ante estos datos podemos aseverar que México es una nación de enormes
contrastes, que podemos rastrear en la desigualdad que vive su población,
la cual en gran mayoría se encuentra marginada con respecto al acceso de
las emergentes herramientas tecnológicas, debido a la falta de inversión en
dicho sector, problema que de resolverse ayudaría en gran medida a
reducir costos y con ello disminuir la brecha que impide a la población
relacionarse de una forma más fluida con tales tecnologías, que utilizadas
de manera correcta serían una fuente inagotable de información,
comunicación y conocimiento que permitiría a la población entrar en una
nueva etapa no sólo a nivel social sino económico y político a partir de los
novedosos métodos de investigación, producción, organización y
administración que estas herramientas podrían brindar.
Una vez establecidos los parámetros bajo los cuales se rige actualmente
México, resulta necesario realizar acciones que lleven al país a alcanzar un
grado de desarrollo óptimo con miras en posicionarlo a nivel mundial
dentro de los más altos estándares sociales, económicos y políticos. No
obstante, dicha tarea requiere del trabajo conjunto de la sociedad y el
gobierno. Sin embargo, el desempeño de este último en específico ha
presentado enormes carencias que se han visto magnificadas en la nula
respuesta de las necesidades que el país presenta, y en el caso que nos
atañe se ha visto a un más inoperante dado el nulo avance que presenta
México en el ámbito tecnológico. Para muestra basta mencionar que
México era el único país de la OCDE, que hasta 2011, no contaba con
una Agenda Digital Nacional (ADN) que ayudara a vincular los objetivos,
políticas y acciones de todos los miembros de la sociedad, desde estados,
municipios e individuos y organizaciones, en favor de un progreso
tecnológico.
Siguiendo esta misma línea “El esfuerzo coordinado que la Agenda
Nacional promueve , se realiza bajo el principio de que las TIC son un
factor indispensable, pero no suficiente, para la generación de
competitividad” (CANIETI, 2011). Lo anterior nos remite al hecho de que
sin una planeación adecuada entre las diferentes entidades de gobierno y
organizaciones no gubernamentales, no se podrán obtener resultados
visibles ni a corto ni a largo plazo. Es por ello que la ADN toma en cuenta
5 áreas interdependientes pero fundamentales, para lograr sus metas, las
cuales son:

6. a) Desarrollo de individuos y organizaciones, que involucra el
aprovechamiento tecnológico para el desarrollo del individuo, la
mejora de su entorno digital y sus derechos humanos.
b) El desarrollo de la industria TIC, con la respectiva oferta de software
y servicio.
c) Acceso y protección de usuarios de la tecnología, de modo que
puedan aprovechar las ventajas digitales.
d) Creación de un gobierno electrónico, que se refiere al
aprovechamiento de los recursos digitales para el fortalecimiento de
las políticas públicas.
e) Impulsar las Telecomunicaciones dentro de los sectores productivos.
Dichos puntos aunque bien fundamentados no pueden ser funcionales a
menos que se cuente, como ya se mencionó, con el apoyo incondicional del
gobierno el cual a su vez debe buscar adecuar sus políticas para que
trabajen de manera conjunta con las áreas anteriores, sin dejar de lado la
situación real en la que se encuentra inmerso México. El hecho anterior no
es sólo teórico, pues es claro que “existe una estrecha relación entre la
competitividad de una nación y la capacidad TIC de los países” (CANIETI,
2011, p.11), debido a que al final de cuentas, los índices internacionales
de competitividad y uso de TIC son los puntos que reflejan el grave rezago
que México presenta, evidenciando con ello que las brechas de bienestar y
adopción de las TIC deben ser disminuidas pues inhiben el avance de
México.
Una de las medidas más plausibles que el gobierno ha llevado a cabo para
corregir las deficiencias en este ámbito, tuvo lugar el 11 de Abril de 2011,
en el Museo Interactivo de Economía (MIDE) lugar donde se entregó la
Agenda Digital Nacional al Secretario de Comunicaciones y Transportes,
quien recibió el documento, y destacó la importancia de éste y algunas
acciones que el Gobierno planeaba poner en marcha. El documento ADN
fue elaborado durante más de un año por cámaras de la industria de las
TIC, el Poder Legislativo, asociaciones de educación, academia y sociedad
civil. La Agenda Digital Nacional contenía 112 recomendaciones sobre
cómo ampliar el uso de las Tecnologías de la Información y las
Comunicaciones entre los mexicanos con el fin de aprovechar su potencial
en favor de la nación.
En la medida que se lleven a cabo dichas reformas se conseguiría un
cambio, no sólo de forma sino de fondo, el cual sin lugar a dudas
contribuiría a lograr una economía y una sociedad más competitivas que
darán como resultado la generación de un mayor bienestar en los
individuos a través de una sociedad mejor educada e informada, con
mejores servicios en sectores clave como lo es: salud, seguridad y
educación, en resumen aspectos que sirvan de catalizadores para una

7. transición hacia una autentica y sólida sociedad de la información y el
conocimiento.
Sin duda alguna, las acciones políticas realizadas por el gobierno
mexicano, no han logrado satisfacer las necesidades en cuanto avances en
las TIC´s. Otro punto a tomar en cuenta es la carencia de instituciones y
centros en México que estén dedicados a la investigación científicos y
tecnológicos, como lo es el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en
Ciencias y Humanidades (CEIICH) perteneciente a la UNAM, el cual cuenta
con un Laboratorio de Comunicaciones Complejas cuya misión es
“contribuir a la generación de conocimiento científico sobre cibercultura,
tecnologías digitales y de la comunicación mediada por computadoras para
el logro de una sociedad más libre, productiva, justa, solidaria y
autodeterminante” (CEIICH, 2013). Sin embargo, el poco valor que el
gobierno le otorga al sector cultural, como factor preponderante de
desarrollo a nivel mundial, contribuye también a la falta de iniciativa y
apoyo a los sectores de investigación.
Conclusión
De acuerdo a la información recabada podemos decir que, México es una
país el cual apenas está experimentando los enormes beneficios que la
tecnología puede proveer a una nación en su máxima expresión, esto
debido a múltiples factores como lo es la falta de leyes en el ámbito de las
Telecomunicaciones, así como la poca promoción de herramientas como lo
son la ADN, que facilitarían enormemente el desarrollo de las TIC´s. Ante
dichas circunstancias el resultado es una sociedad carente de
oportunidades de acceso a las nuevas tecnologías en materia de
información y conocimiento, restringiendo con ello la participación de la
población, caso contrario con lo que ocurre en países tales como Estados
Unidos y Japón, donde la mayor parte de los habitantes tiene acceso a
herramientas tecnológicas, lo cual les permite acceder a una mayor
cantidad de conocimiento generado a través del uso y adaptación que
presentan en relación con la tecnología, pues tienen en claro que en la
actualidad, el desarrollo y crecimiento de un país ya no depende al 100%
de los avances tecnológicos y científicos que puedan obtener, sino de cómo
la población en general se familiarice con dichos avances los cuales en
gran medida han creado una nueva cultura alrededor de los mismos,
estimulando con ello la siguiente etapa en la evolución social.

8. Referencias
CANIETI. Agenda Digital Nacional, [en línea]. México 2011,
[fecha de consulta: 13 septiembre 2013]. ADN Resumen Ejecutivo.
Disponible en:
http://www.canieti.org/Libraries/Downloads/ADNejecutivo_04112011.sflb.ashx
CEIICH. Labcomplex, [en línea]. México, [fecha de consulta:
12 septiembre 2013]. Misión. Disponible en:
http://labcomplex.ceiich.unam.mx/labcomplex02/categoria.php?id=5
CNN México. México ocupa el lugar 48 en la evaluación del
conocimiento de la OCDE [en línea]. México. Nacional, Diciembre
2010, [fecha de consulta: 14 septiembre 2013]. Comunicado.
Disponible en: http://mexico.cnn.com/nacional/2010/12/07/mexico-en-el-lugar-48-de-
65-en-evaluacion-de-conocimientos-internacional
Lévy, P. (2007), Cibercultura. La Cultura de la Sociedad
Digital, Barcelona, Anthropos.
Secretaria de Economía. Comunicado de Prensa Núm. 246/11
[en línea]. México. Dirección General de Comunicación Social,

9. Octubre 2011, [fecha de consulta: 14 septiembre 2013].
Comunicados. Disponible en:
http://www.economia.gob.mx/eventos-noticias/sala-de-
prensa/comunicados/6684-boletin246
UNDP. Informe sobre el Desarrollo Humano 2013, [en línea].
México 2013, [fecha de consulta: 12 septiembre 2013], Anexo
Estadístico. Disponible en:
http://hdr.undp.org/en/media/HDR2013_ES_Statistics.pdf