Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024
¿La educación como bien común 1.pdf
1. El principio de la educación como un bien público bajo presión
Los individuos y las comunidades progresivamente se empoderan
gracias a la consolidación de la democracia en muchos países y a
la ampliación del acceso al conocimiento
Creciente participación privada en la educación
En todo el mundo se intensifica la tendencia a la privatización
de la educación en todos sus niveles. En el decenio pasado, ha
aumentado la tasa de matrículas en instituciones educativas
privadas, sobre todo en lo que respecta a la educación
primaria en países con bajos ingresos, y a la postsecundaria
no terciaria en las economías más desarrolladas de Asia
Central
Esfumación de las fronteras entre lo público y lo privado
En el discurso internacional sobre la educación, se suele
aludir a ella como un bien público. El Relator Especial de las
Naciones Unidas sobre el Derecho a la Educación ha puesto de
relieve la importancia de preservar el interés social por la
educación, fomentando a la vez el concepto de educación
como bien público.
Consecuencias de la privatización en el derecho a la educación
La privatización de la educación puede tener un efecto positivo
para algunos grupos sociales, en forma de una mayor
disponibilidad de oportunidades de aprendizaje, más opciones
para los padres y una gama más amplia de programas de
estudios
La educación y el conocimiento como bienes comunes
mundiales
Los límites de la teoría del bien público
La teoría del bien público cuenta con una larga tradición y
tiene su origen en la economía de mercado138. En el
decenio de 1950, se definieron los bienes públicos como
aquellos ‘que todos disfrutan en común en el entendimiento
de que el consumo que hace cada individuo de ese bien no
da lugar a mermas del consumo de ese mismo bien por
cualquier otro individuo
La noción de bien común va más allá del concepto
instrumental de bien público, según el cual el bienestar
humano está enmarcado por una teoría socioeconómica
individualista.
Proteger los principios fundamentales
Conviene subrayar que el discurso de la educación
internacional actual entraña posibilidades de socavar los
principios fundamentales que han venido rigiendo la política y
las prácticas, nacionales e internacionales, de la educación.
Reforzar la función del estado en la regulación de los bienes
comunes
En el contexto actual de mundialización económica y
liberalización del mercado, el estado debe mantener su función
de garantizar el acceso y regular los bienes comunes, sobre
todo en educación.
Reconocer la educación y el conocimiento como bienes
comunes mundiales
La educación es el proceso deliberado de adquisición del
conocimiento y del desarrollo de las competencias para
aplicarlo en las situaciones correspondientes.
Reforzar el papel de la sociedad civil y otros asociados
En el contexto vigente, es primordial fomentar un papel más
relevante y más explícito de la sociedad civil en la educación.
Hay que contrarrestar la tendencia actual a convertir la
educación pública en una mercancía mediante el
establecimiento de alianzas más sólidas con asociaciones
comunitarias y organizaciones no lucrativas.
Reforzar la función de las organizaciones
intergubernamentales en la regulación de los bienes comunes
mundiales
A la comunidad internacional incumbe la responsabilidad de la
gobernanza de los bienes comunes mundiales
Consideraciones sobre el rumbo futuro
Este debate, inspirado por una preocupación fundamental por
un desarrollo humano y social sostenible, pone de relieve las
tendencias, tensiones y contradicciones que se observan en la
transformación social mundial, así como los nuevos horizontes
que abre al conocimiento.
La UNESCO, como organización de las Naciones Unidas
especializada en educación, así como en las esferas afines de
la ciencia, la cultura y la comunicación, debería reforzar su
función de ‘laboratorio de ideas’ para supervisar las tendencias
mundiales del desarrollo y sus consecuencias para el
aprendizaje
Aunque los cuatro pilares de la educación –conocer, hacer, ser
y vivir juntos– tienen incluso más validez en la actualidad, se
ven amenazados tanto por la mundialización como por la
reaparición de políticas de identidad nacional. ¿Cómo se
pueden fortalecer y renovar?
Es necesario recontextualizar los principios fundamentales de
la gobernanza de la educación, en particular el derecho a la
educación y el principio de la educación como un bien público.
¿La educación como bien común?