1. Mauricio Cabezas Salazar
LIGERA COMO EL VIENTO
Su rostro se perdió en mi cabeza,
Cual si fuera un ángel de cera
Admiraba de ella la belleza
Aunque no fue más que mi compañera
En un recreo a finales de enero
Recibí en un sobre su carta
Donde decía “te quiero, y espero
que lo sepas antes de que parta”
Cuanta tristeza surgió esa mañana
Todo fue gris en ese instante
Fije mi esperanza en la ventana
El horizonte se volvió distante
Los papeles tenían su fragancia
No sé si se había perdido la razón
Estaba trastornado por la distancia
Eso afectaba mi corazón
El tiempo cura todo en la vida
Los recuerdos se van en un río
donde poco a poco se olvida
todo lo arrastra su poderío
El tiempo es un tren yéndose lejos
La luna es del paisaje un adorno
El primer amor es un reflejo de espejos
Frágil sin retorno.