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Maitena
        y su versión de



“   la mujer moderna”
                     Música: bamboleo
Son las 6 de la mañana
                  mañana,
el despertador no p
      p             para de sonar
y no tengo fuerzas
ni para tirarlo contra la pared.

Estoy acabada.
Estoy acabada
No querría tener que ir
al trabajo hoy.
        j    y
Quiero quedarme en casa,
                       casa
           cocinando,
escuchando música, cantando, etc.
  Si tuviera un perro, lo pasearía
        por los alrededores
                alrededores.
  Todo menos salir de la cama
                         cama,
          meter primera
                p
 y poner el cerebro a funcionar.
Me gustaría saber
        q
        quién fue la bruja,
              f         j
 la precursora de las feministas
    p
      que tuvo la infeliz idea
         de i i di
         d reivindicar
       los derechos de la mujer
       los derechos de la mujer
y por qué hizo eso con nosotras que
  por qué
     nacimos después de ella.
                   p
¡Estaba todo tan bien en el tiempo de nuestras abuelas!

 Ellas pasaban todo el día cosiendo o bordando
mientras oían la radio intercambiando recetas con
                 radio,
 sus amigas, enseñándose mutuamente secretos
    de condimentos trucos remedios caseros
        condimentos, trucos,           caseros,
  leyendo buenos libros de las bibliotecas de sus
           maridos,
           maridos decorando la casa
                                  casa,
        podando árboles, plantando flores,
       recogiendo legumbres de las huertas
             y educando a sus hijos.
La vida era un gran curso
  de artesanos medicina alternativa
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              y cocina.
Hasta que vino una fulanita cualquiera a la
   que no l gustaba el corpiño
           le     t b l           iñ
     y contaminó a varias otras
      inconsecuentes rebeldes
        con ideas raras sobre
     “Vamos a conquistar nuestro espacio".
                 q                 p
¡Qué espacio ni qué nada!
       ¡Qué espacio ni qué nada!
   Ya teníamos la casa entera,
          todo el barrio,
    el mundo a nuestros pies
                          pies.
 Teníamos el dominio completo
       sobre los hombres;
   ellos dependían de nosotras
    para comer, vestirse y para
hacerse ver delante de sus amigos
                           amigos.
¿Qué rayos d d h
 Q é       de derechos quiso brindarnos?
                         i bi d        ?

Ahora ellos están confundidos,
no saben qué papel
desempeñan en la sociedad,
      p                    ,
huyen de nosotras
   y
como
el di bl d l cruz.
 l diablo de la
Ese chiste, esa gracia,
   bó llenándonos d d b .
acabó ll á d       de deberes
  Y lo peor de todo, acabó
        lanzándonos
     dentro del calabozo
      de la soltería aguda.
            soltería aguda
Antiguamente, los casamientos
A ti        t l         i t
     duraban para siempre
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   ¿Por qué, díganme por qué,
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un sexo que tenía todo lo mejor,
         q                     j
 que sólo necesitaba ser frágil
   y dejarse g iar por la vida,
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                             ,

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E t b cantado,
eso
no podía
terminar bien.
No
   N aguanto más ser obligada
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    al ritual diario de estar flaca
como una escoba pero con tetas y
     culo erguidos, para lo cual
tengo que matarme en el gimnasio
   además de morir de hambre,
 ponerme hidratantes, antiarrugas
         y d á armas para
           demás
  no caer vencida por la vejez…
Maquillarme i
   M      ill      impecablemente
                           bl      t
     cada mañana desde la frente
al escote, tener el pelo inmaculado
y no atrasarme con el tinte (porque
  las canas son peor que la lepra)
                                lepra),
   elegir bien la ropa, los zapatos
       g             p ,       p
    y los accesorios, no sea que
         no esté presentable
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     para esa reunión de trabajo
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No soporto más tener que decidir
        qué p
        q perfume combina con mi humor,
             ni tener que salir corriendo
   para luego quedarme embotellada en el tráfico
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     y tener que resolver la mitad de las cosas
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                                   q        p
Estamos pagando el precio
Et        g d l i                                   por
      estar siempre en forma
                         forma,
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                            impecable,
    lleno de masters, doctorados y
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¡Para ganar (en el mejor de los casos) lo mismo que ellos!
¡Para ganar (en el mejor de los casos) lo mismo que ellos!
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 N        j       h    j
seguir haciendo punto de cruz sentadas
en la silla mecedora mientras el marido
se mataba por traer el dinero a casa?
       t b      t    l di           ?

¿Saben qué queremos las mujeres?

¡¡¡Decir basta!!!
¡¡¡Decir basta!!!
Quiero que alguien
 me abra la puerta para que
pueda pasar, que corra la silla
   cuando me voy a sentar,
    que me mande flores,
     cartitas con poesías,
        tit            í
    que me dé serenatas
        en la ventana.
Si nosotras ya sabíamos
                 bí
que teníamos un cerebro
y que lo podíamos usar…




¿¿¿Para quééééé
   Para quééééé
había que demostrárselo a ellos???
¡Ay, Dios mío!, ya son las 6:30
  y aún no me he levantado...
     ú         h l       d

¡Estoy abdicando de mi puesto
             de
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         j
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  • 1. Maitena y su versión de “ la mujer moderna” Música: bamboleo
  • 2. Son las 6 de la mañana mañana, el despertador no p p para de sonar y no tengo fuerzas ni para tirarlo contra la pared. Estoy acabada. Estoy acabada No querría tener que ir al trabajo hoy. j y
  • 3. Quiero quedarme en casa, casa cocinando, escuchando música, cantando, etc. Si tuviera un perro, lo pasearía por los alrededores alrededores. Todo menos salir de la cama cama, meter primera p y poner el cerebro a funcionar.
  • 4. Me gustaría saber q quién fue la bruja, f j la precursora de las feministas p que tuvo la infeliz idea de i i di d reivindicar los derechos de la mujer los derechos de la mujer y por qué hizo eso con nosotras que por qué nacimos después de ella. p
  • 5. ¡Estaba todo tan bien en el tiempo de nuestras abuelas! Ellas pasaban todo el día cosiendo o bordando mientras oían la radio intercambiando recetas con radio, sus amigas, enseñándose mutuamente secretos de condimentos trucos remedios caseros condimentos, trucos, caseros, leyendo buenos libros de las bibliotecas de sus maridos, maridos decorando la casa casa, podando árboles, plantando flores, recogiendo legumbres de las huertas y educando a sus hijos.
  • 6. La vida era un gran curso de artesanos medicina alternativa artesanos, y cocina. Hasta que vino una fulanita cualquiera a la que no l gustaba el corpiño le t b l iñ y contaminó a varias otras inconsecuentes rebeldes con ideas raras sobre “Vamos a conquistar nuestro espacio". q p
  • 7. ¡Qué espacio ni qué nada! ¡Qué espacio ni qué nada! Ya teníamos la casa entera, todo el barrio, el mundo a nuestros pies pies. Teníamos el dominio completo sobre los hombres; ellos dependían de nosotras para comer, vestirse y para hacerse ver delante de sus amigos amigos.
  • 8. ¿Qué rayos d d h Q é de derechos quiso brindarnos? i bi d ? Ahora ellos están confundidos, no saben qué papel desempeñan en la sociedad, p , huyen de nosotras y como el di bl d l cruz. l diablo de la
  • 9. Ese chiste, esa gracia, bó llenándonos d d b . acabó ll á d de deberes Y lo peor de todo, acabó lanzándonos dentro del calabozo de la soltería aguda. soltería aguda
  • 10. Antiguamente, los casamientos A ti t l i t duraban para siempre siempre. ¿Por qué, díganme por qué, Por qué un sexo que tenía todo lo mejor, q j que sólo necesitaba ser frágil y dejarse g iar por la vida, guiar ida comenzó a competir con los machos?
  • 11. Miren el tamaño del bíceps de ellos y miren el tamaño del nuestro, , Estaba t d E t b cantado, eso no podía terminar bien.
  • 12. No N aguanto más ser obligada t á bli d al ritual diario de estar flaca como una escoba pero con tetas y culo erguidos, para lo cual tengo que matarme en el gimnasio además de morir de hambre, ponerme hidratantes, antiarrugas y d á armas para demás no caer vencida por la vejez…
  • 13. Maquillarme i M ill impecablemente bl t cada mañana desde la frente al escote, tener el pelo inmaculado y no atrasarme con el tinte (porque las canas son peor que la lepra) lepra), elegir bien la ropa, los zapatos g p , p y los accesorios, no sea que no esté presentable té t bl para esa reunión de trabajo trabajo.
  • 14. No soporto más tener que decidir qué p q perfume combina con mi humor, ni tener que salir corriendo para luego quedarme embotellada en el tráfico g y tener que resolver la mitad de las cosas por el celular, correr el riesgo de ser asaltada, de morir embestida, instalarme todo el día frente al PC trabajando como una esclava (moderna, claro), con un teléfono en el oído y resolviendo problemas uno detrás de otro, para salir con los ojos rojos (por el monitor, claro, porque p para llorar de amor no me queda tiempo). q p
  • 15. Estamos pagando el precio Et g d l i por estar siempre en forma forma, sin estrías, depiladas, sonrientes, perfumadas, uñas perfectas, sin hablar del currículum impecable impecable, lleno de masters, doctorados y especialidades. Nos volvimos "súper mujeres"... ¡Para ganar (en el mejor de los casos) lo mismo que ellos! ¡Para ganar (en el mejor de los casos) lo mismo que ellos!
  • 16. ¿No era mejor, mucho mejor, N j h j seguir haciendo punto de cruz sentadas en la silla mecedora mientras el marido se mataba por traer el dinero a casa? t b t l di ? ¿Saben qué queremos las mujeres? ¡¡¡Decir basta!!! ¡¡¡Decir basta!!!
  • 17. Quiero que alguien me abra la puerta para que pueda pasar, que corra la silla cuando me voy a sentar, que me mande flores, cartitas con poesías, tit í que me dé serenatas en la ventana.
  • 18. Si nosotras ya sabíamos bí que teníamos un cerebro y que lo podíamos usar… ¿¿¿Para quééééé Para quééééé había que demostrárselo a ellos???
  • 19. ¡Ay, Dios mío!, ya son las 6:30 y aún no me he levantado... ú h l d ¡Estoy abdicando de mi puesto de “mujer moderna”! j