Gerardo Méndez presentó su espectáculo "El mercader de historias" en el Museo Rafael Coronel como parte del 6o Festival Internacional de Narración Oral. Méndez compartió historias de la tradición oral latinoamericana, especialmente de México, con humor y situaciones de la actualidad social. Usando frases como "Cuentan los que cuentan", contó fábulas y cuentos protagonizados por personajes cotidianos que hicieron reír a la audiencia.

1. Instituto
COMUNICADO DE PRENSA
Zacatecano
De 25 de junio de 2010
Cultura No. 168/10
Uno de los pioneros de la narración oral en Latinoamérica
Presentó Gerardo Méndez su espectáculo “El mercader de historias”.
o Con un estilo muy peculiar, el narrador arrancó las
carcajadas de su audiencia.
En agradable velada, se llevó a cabo, en el Museo Rafael Coronel, el espectáculo
unipersonal denominado “El mercader de historias”, de Gerardo Méndez, dentro
del 6º Festival Internacional de Narración Oral.
En un escenario adornado con luminarias en forma de un dragón y un orbe,
Méndez compartió historias de la tradición oral de Latinoamérica, en especial de
México.
A lo largo de sus 30 años como narrador oral, ha puesto al humor como
parte vital de sus relatos. Sus personajes los ha tomado de pregones callejeros de
las grandes ciudades, principalmente de la ciudad de México.
Con un humor muy mexicano, incluyó en sus historias situaciones de nuestra
actual problemática social; las carcajadas se hicieron presentes a lo largo de toda
la presentación.
“Cuentan los que cuentan y dicen los que dicen”, fue la frase con la que
Gerardo Méndez inició cada una de sus narraciones, que fueron desde fábulas,
hasta las protagonizadas por personajes de la vida cotidiana.
Su primera narración fue de cómo la juventud, la religión, la inteligencia y
lasabiduría querían entrar al cielo, y sobre lo que hicieron para lograrlo; quien lo
hizo fue la sabiduría.
Gerardo pidió al público que le ayudara a terminar las frases de sus
historias, lo que provocó un ambiente de camaradería, que propició el
acercamiento con la audiencia.
Personajes modificados muy a la mexicana y canciones clásicas
interpretadas por el cuenta cuentos y sus oyentes, fueron también parte del
espectáculo.

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También escuchamos la fábula africana “El árbol de mango”, con un mensaje
propio para adultos, sin dejar de lado el albur. Después de una hora, Gerardo
agradeció y se despidió del respetable, pero este le solicitó otro cuento y Méndez
no se hizo del rogar.
Fue sobre una muchacha muy bonita, que se enamoró de un charro, luego
de otro y después conoció a un tercero; no sabía con cuál casarse, les puso una
prueba y al final se quedó sola, pues los mandó al panteón.
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