2. Isaías 43:1 Ahora, así dice Jehová,
Creador tuyo, oh Jacob, y
Formador tuyo, oh Israel: No
temas, porque yo te redimí; te
puse nombre, mío eres tú.
3. Isaías 43:2 Cuando pases por
las aguas, yo estaré contigo; y
si por los ríos, no te anegarán.
Cuando pases por el fuego,
no te quemarás, ni la llama
arderá en ti
4.
5. NO NOS PERTENECEMOS A
NOSOTROS
«¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo
del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el
cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?
Porque habéis sido comprados por precio;
glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y
en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.»
1 Corintios 6:19-20 RVR196
6. NO LE PERTENECES A
ESTE MUNDO
«Si ustedes fueran del mundo, la gente del
mundo los amaría, como ama a los suyos.
Pero yo los escogí a ustedes entre los que
son del mundo, y por eso el mundo los
odia, porque ya no son del mundo.»
San Juan 15:19 DHH
7.
8. «Isaías dijo: «Ahora, pueblo de
Israel, Dios tu creador te dice: “No
tengas miedo. Yo te he liberado; te
he llamado por tu nombre y tú me
perteneces. Aunque tengas
graves problemas, yo siempre
estaré contigo; cruzarás ríos y no
te ahogarás, caminarás en el
fuego y no te quemarás»
Isaías 43:1-2 TLA
9. «porque yo soy tu Dios y te
pondré a salvo. Yo soy el Dios
santo de Israel. ”Israel, yo te amo;
tú vales mucho para mí. Para
salvarte la vida y para que fueras
mi pueblo, tuve que pagar un alto
precio. Para poder llamarte mi
pueblo, entregué a naciones
enteras, como Sabá, Etiopía y
Egipto.»
Isaías 43:3-4 TLA
10. EL SENTIDO DE
PERTENENCIA DA
SEGURIDAD
No tengas miedo. Yo te he
liberado; te he llamado por tu
nombre y tú me perteneces.
11.
12. EL SENTIDO DE
PERTENENCIA DA
COMPAÑERISMO
Aunque tengas graves
problemas, yo siempre
estaré contigo;
cruzarás ríos y no te
ahogarás, caminarás
en el fuego y no te
quemarás
13.
14. EL SENTIDO DE
PERTENENCIA DA VALOR
Para salvarte la
vida y para
que fueras mi
pueblo, tuve
que pagar un
alto precio
Notas del editor
Hans Christian Andersen (Odense, 2 de abril de 1805 - Copenhague, 4 de agosto de 1875) fue un escritor y poeta danés, famoso por sus cuentos para niños, entre ellos El patito feo, La sirenita y La reina de las nieves. Estas tres obras de Andersen han sido adaptadas a la gran pantalla por Disney.
Andersen escribió aproximadamente 168 cuentos, destacan entre estos cuentos, los siguientes:
Estatua con el patito feo en Central Park de Nueva York
El traje nuevo del emperador
El yesquero
El ruiseñor
El cofre volador
La pequeña cerillera
La sirenita
Pulgarcita
La princesa y el guisante
El patito feo
Las zapatillas rojas
El soldadito de plomo
El alforfón
La reina de las nieves
El duende de la tienda
Historia de una madre
Había una vez en
mi pueblo un matrimonio
Tibio como la mantequilla
yo puedo dar mi fe
y mi testimonio
que lo que digo no es
ninguna mentirilla
Del matrimonio
nacieron nueve hijos
ocho salieron
rubiecitos
yo lo vi ami nadie
me lo dijo
que el noveno resulto
ser bien negrito
El marido soporto por
muchos años pero
a la larga el silencio
le hizo daño
decidió confesar a su mujer
a si lo hizo y ahora
ustedes van a ver.
Oye capullo
a todos los quiero igual
todos son angelitos
y los llevo aquí en el alma
pero hablemos del negrito
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- ¿No ha pensado usted nunca – inquirió Johnny -, en lo que significa para una mujer saber que su marido pagó por ella el precio más bajo? Cuando las mujeres charlan, se jactan de lo que su esposo dio por ellas. Una cuenta que fueron cuatro vacas; otra que seis. ¿Cómo se sentirá la que fue entregada por uno o dos animales? Yo no quería que esto le pasara a mi Sarita.
- ¿Lo hizo usted, entonces, para que su mujer se sintiera feliz?
- Sí, quería hacerla feliz. Pero fue algo más que eso. Dice usted que se ve diferente; pues lo es, en verdad. Son muchas las cosas que pueden transformar a una mujer. Algunas ocurren en su interior; otras en su mundo circundante. Pero lo que más importa es lo que ella piensa de sí misma. En Kiniwata, Sarita creía que no valía nada; ahora, sabe que vale más que cualquiera otra mujer del archipiélago.
- Así pues, Johnny Lingo, lo que usted deseaba…
- Lo que yo deseaba era casarme con Sarita. La amaba entre todas las mujeres.
- Pero… - estaba empezando a comprender…
Pero – concluyó Johnny Lingo reposadamente -, deseaba tener una mujer que valiera ocho vacas.
Una mujer que le dice a su marido:
- ¡Pepe! ¡que tú no sabes lo que vale una mujer como yo!
- ¡Pero sé lo que cuesta!