3. Fecha: Finales de Mayo
de 1274 a.C.
Combatientes: Egipcios
contra Hititas
4. La estrategia del rey hitita para acabar con la ocupación, era de lo más
simple; consistía en rodear y aislar al ejército de Ramsés. Para
despistar a las tropas egipcias, los hititas enviaron falsos desertores,
que se apresuraron a confesar que su ejército estaba desplegado cerca
de Alepo. Pero mintieron, el ejército egipcio se dirigió hacia allí, los
hititas dejaron pasar al faraón con su guardia y esperaron a que el
primer batallón se situara cerca de Kadesh. Entonces asaltaron al
segundo batallón y cerraron el cerco a posibles refuerzos.
En pocos minutos, la mayoría de los egipcios quedaron aniquilados,
ante semejante situación, Ramsés no vio más salida que lanzarse a la
batalla, pero cuando todo lo tenían perdido llego un destacamento
especial llamado los Nearin, que salvo al ejército de una muerte segura.
5. Aun así, Ramsés II no consiguió ni tomar Kadesh ni derrotar al ejército
hitita, pero para su pueblo era el vencedor, y así lo relata el poema de
Pentaur que compuso el escriba principal del soberano.
Ramsés II y el rey hitita Muwatalli firmaron un tratado de paz después
de 17 años de sucesivas guerras, en el que se comprometieron a que ni
en el futuro ni sus sucesores entrarían mas en conflictos; de hecho el
rey hitita puso a disposición de Ramsés el matrimonio con una de sus
hijas.
7. Mandado por Mardonio, el ejército persa avanzó incontenible hacia
Europa llegando a las fronteras de Macedonia. Las ciudades griegas
fueron invitadas a rendirse pero rechazaron el ofrecimiento.
Atenas y Esparta unificaron fuerzas contando con el inapreciable
consejo de Milcíades, que conocía bien la táctica de guerra persa.
Darío desembarcó con su flota en Eubea y conquistó. Eretria. A
continuación tomó tierra el grueso de la fuerza persa de unos 25.000
hombres, cerca de la llanura de Maratón. Atenas envió
inmediatamente a su infantería pesada de hoplitas para que ocupara
las colinas desde las que se dominaba la zona de desembarco.
Los griegos, dirigidos por Milcíades, atacaron al amanecer con una
fuerza que había concentrado hombres en las alas debilitando el
centro para que cuando los dos ejércitos chocaran se produjera un
movimiento de pinza que encerrara a la fuerza persa. Los griegos,
mejor armados, infligieron un terrible castigo a los persas, sin que
apenas sufrieran pérdidas ellos mismos.
Sin embargo, los persas supervivientes embarcaron en sus naves y
se dirigieron a Atenas con la esperanza de vengarse en la ciudad
indefensa; los atenienses emprendieron veloz marcha hacia la
ciudad, a la que llegaron antes que la flota persa, lo que persuadió a
ésta de abandonar la empresa.
8. El comandante ateniense, Milciades, se tomó su tiempo, taló árboles
y los arrastró hacia adelante para poner obstáculos en la milla de
distancia que separaba a ambos ejércitos. Al escuchar que las tropas
enemigas habían abandonado la escena temporalmente,
presumiblemente para proveer de agua a sus caballos en los
manantiales del norte, Milciades aprovechó la oportunidad. Descartó
el método tradicional de falange usado por los griegos -un
acercamiento lento y deliberado— y ordenó cargar sobre los que
quedaban. Tomaron a los arqueros persas completamente por
sorpresa, y sus flechas de gran alcance cayeron inofensivamente
detrás de ellos.
10. En el verano del año 52 a.C., Julio César salió victorioso de los diversos
enfrentamientos que tuvieron lugar entre las caballerías romana y gala,
de forma que Vercingetórix decidió que no era el momento para una
batalla a gran escala y agrupó a sus tropas en la fortaleza de Alesia,
donde se produciría la batalla definitiva que pondría punto y final a la
Guerra de las Galias.
Para asegurarse un perfecto bloqueo, mandó construir un perímetro
circular de muros de 18 kilómetros de longitud y de 4 metros de altura, con
torres espaciadas regularmente, algunas de hasta 24 metros de altura.
También excavaron fosos de 4 metros y medio de anchura y de cerca de
medio metro de profundidad. El foso más cercano a la fortificación se
llenó de agua desviada desde los ríos cercanos, otro de los fosos fue
construido en forma de V para que no se pudiera poner el pie en el fondo.
Finalmente, se colocaron toda clase de trampas: agujeros ocultos, palos
afilados, estacas de hierro, etc.
A los galos, cercados dentro la fortaleza de Alesia, les empezaron a
escasear los víveres. 80.000 soldados más la población civil autóctona era
demasiada gente para las pocas provisiones que quedaban. Según los
cálculos de Vercingetórix, la comida no duraría ni un mes. Así, la tribu de
los mandubios, originarios de Alesia, decidió expulsar de la fortaleza a
todo aquel no apto para la lucha, es decir, a las mujeres y a los niños.
Tenían la esperanza de que César los dejaría escapar o los haría
esclavos, lo cual, pensaba Vercingetórix, daría a su ejército una
oportunidad para romper las filas enemigas. Sin embargo, César tampoco
podía permitirse el lujo de alimentarlos, así que ordenó que no se hiciera
nada por ellos. Mujeres y niños de Alesia, junto con discapacitados,
murieron de hambre entre las paredes de la ciudad gala y de la
fortificación romana.
11. Al día siguiente, el 2 de octubre del año 52 a.C., los galos
descubrieron lo que César había conseguido esconder hasta
entonces: el punto débil de la línea de defensa de los romanos, el
punto de la fortificación por donde resultaba más fácil atacarlos. Se
trataba de una zona en la que obstrucciones naturales impedían la
construcción de una muralla continua. Esta vez los galos pusieron a
los romanos entre la espada y la pared, la seccion defendida estaba
apunto de caer. Entonces César decidió arriesgarse y agotar sus
últimas fuerzas de reserva. Ataviado con la inconfundible capa roja y
cabalgando su caballo blanco, tomó 13 cohortes de caballería (unos
6.000 hombres) para atacar el ejército de reserva enemigo (unos
60.000) por la retaguardia. La acción sorprendió tanto a atacantes
como a defensores. Viendo a su general afrontar tan tremendo riesgo,
los hombres redoblaron sus esfuerzos y pronto el pánico se apoderó
de las tropas de Vercingetórix, que trataron de huir, pero fueron
exterminadas a causa de la desorganizada retirada.
12. Fecha: 27 de Agosto de
479 a.C.
Combatientes: Griegos
contra Persas
13. Esta guerra viene de las interminables y ya pasadas batallas entre Persia y
Grecia los participantes fueron Aliados griegos : el ejército al mando del general
Pausanias sumaba 40.000 hoplitas y el resto tropas ligeras. Había contingentes
de 19 ciudades estado griegas siendo los de Atenas y Esparta los más
numerosos aliados persas: el ejército al mando del general Mardonio estaba
conformado por alrededor de 120.000 hombres aportados por beocios, aliados
asiáticos y los persas que eran el grueso.
Aunque la posición griega no era apropiada para el empleo de la caballería,
Mardonio decidió atacar antes que los griegos continuaran sumando refuerzos y
para ello envió toda su caballería, al mando del general Masistio, en contra de las
fuerzas griegas, acción que resultó desastrosa para los persas y en la cual perdió
la vida el general Masistio.
La victoria obtenida contra la caballería persa y la carencia de un suministro
adecuado de agua en Eritra decidió a Pausanias a abandonar su posición
defensiva en la montaña y trasladó su ejército a la llanura de Platea, entre dicha
ciudad y el río Asopo. Los espartanos se ubicaron en el ala derecha, los
atenienses en el ala izquierda y el resto de los aliados en el centro.
Cuando Mardonio descubrió el cambio de posición del ejército griego, se
apresuró a sacar su ejército hacia la llanura formando una línea paralela a la de
los griegos. El ala izquierda conformada por los persas, enfrentando a los
espartanos, los aliados asiáticos en el centro y los beocios y otros griegos en el
ala derecha, enfrentando a los atenienses
Los dos ejércitos permanecieron enfrentándose durante ocho días. Al octavo día,
Mardonio envió a la caballería a destruir los pasos por donde llegaba el
aprovisionamiento a las tropas griegas. Además Mardonio comenzó a atacar
nuevamente con su caballería, pero esta vez empleando proyectiles lanzados
desde larga distancia. La posición griega se hizo crítica después del ataque a sus
líneas de abastecimiento por lo que en la mañana del segundo día de ataque
decidieron retroceder en la noche a una posición hasta el monte Citerón.
.
14. En la mañana del 27 de agosto, Mardonio, al ver el nuevo movimiento griego
dejó a su ala derecha que combatiera contra los atenienses y él, con el grueso
del ejército y la caballería, se lanzó contra el ala derecha griega conformada
por los espartanos.
En este combate, la falange griega demostró una vez más la fortaleza de su
constitución. Las tropas ligeras y la carencia de escudos u otra protección de
los persas constituyeron la mayor desventaja contra hombres fuertemente
armados. Mardonio fue muerto y desde ese mismo instante los persas
cedieron y al poco tiempo retrocedieron en fuga. Pausanias había conseguido
una victoria que cambiaría el curso de la historia
15. Fecha: 2 de Agosto de
216 a.C.
Combatientes:
Republica Romana
contra Republica
Cartaginesa
16. Los romanos desplegaron una formación clásica, con la infantería ligera delante
y la pesada detrás. A su derecha, junto al río, la caballería romana y en el flanco
izquierdo la caballería compuesta por aliados de Roma.
Aníbal por su parte, colocó a los íberos, celtíberos, y galos en el centro.
Estando los íberos en primera línea y los galos, menos disciplinados detrás. En
el extremo de su línea de infantería esta se situaban los soldados punicos. En
los flancos situó a la caballería.
Aníbal envió su caballería contra la caballería romana, a sabiendas de que
acabar con esta supondría una gran cantidad de bajas. Pero si querían tener
alguna posibilidad, Cartago debería hacer ese sacrificio. No obstante la
caballería cartaginesa era superior a la romana tanto en número como en
calidad. Así, esta fue capaz de derrotar a la caballería romana, atravesar sus
lineas de infanteria y acabar también con la caballería aliada. Sabedores de su
superioridad numérica Roma contraataco enviando a su infantería contra el
centro de la formación cartaginesa mucho mas débil. Pronto la infantería
romana comenzó a imponerse a la de Aníbal, pero esto formaba parte de plan,
todo le estaba saliendo a la perfección a Cartago. La infantería romana
continuaba avanzando de forma firme, causando grandes bajas en las filas
cartaginesas hasta que finalmente el centro de estos se vio superado y roto.
Al ver esto y creyéndose ya vencedores Roma envió todas sus reservas para
finiquitar la contienda, cuando todo el ejercito romano estaba ya agrupado y la
desbandada cartaginesa con una forma semicircular iba rodeando al ejercito
romano sin que este se diese cuenta, apareció por el flanco un gran numero de
reservas cartaginesas ocultas.
17. Los romanos no pudieron ver aproximarse a estas fuerzas ya que el polvo
levantado por los ejércitos al desplazarse unidos al viento en contra
imposibilitaban la visión de estos. Las tropas que escapaban se dieron la
vuelta y comenzaron acosar a los romanos y a luchar con mucha más
decisión. La única vía de escape que tenían los romanos era su retaguardia, y
cuando estos comenzaron a retroceder, apareció la caballería cartaginesa, que
había acabado con toda la caballería, tanto romana como aliada, envolviendo
al ejército romano totalmente.. El temor se extendió por un ejército que no
podía ni si quiera levantar sus escudos o desenvainar sus espadas. Esta
acción acabaría con la casi totalidad del ejercito romano.
18.
19.
20. Fue un conflicto bélico en el que se enfrentaron una coalición de
ejércitos aqueos contra la ciudad de Troya (también llamada Ilión y
ubicada en Asia Menor) y sus aliados. Según Homero, se trataría
de una expedición de castigo por parte de los aqueos, cuyo casus
belli habría sido el rapto (o fuga) de Helena de Esparta por el
príncipe Paris de Troya.
Esta guerra es uno de los ejes centrales de la épica grecolatina y
fue narrada en un ciclo de poemas épicos de los que solo dos han
llegado intactos a la actualidad, la Ilíada y la Odisea, ambas obras
atribuidas a Homero. La Ilíada describe un episodio de esta guerra,
y la Odisea narra el viaje de vuelta a casa de Odiseo, uno de los
líderes griegos. Otras partes de la historia y versiones diferentes
fueron elaboradas por poetas griegos y romanos posteriores.
Se cree que la leyenda se basa en hechos verídicos, episodios de
una guerra real entre los griegos del último periodo micénico y los
habitantes de Tróade, en Anatolia, parte de la actual Turquía.
Modernas excavaciones arqueológicas han revelado que Troya fue
destruida por el fuego a principios del siglo XII a.C., tradicional
fecha de la guerra, y que ésta pudo haber estallado o bien por el
deseo de saquear esa rica ciudad o por poner fin al control
comercial que Troya ejercía sobre Dardanelos.
21. El caballo de Troya fue un artilugio con forma de enorme caballo de
madera que se menciona en la historia de la guerra de Troya y que
según este relato fue usado por los griegos como una estrategia
para introducirse en la ciudad fortificada de Troya. Tomado por los
troyanos como un signo de su victoria, el caballo fue llevado dentro
de los gigantescos muros, sin saber que en su interior se ocultaban
varios soldados enemigos. Durante la noche, los guerreros salieron
del caballo, mataron a los centinelas y abrieron las puertas de la
ciudad para permitir la entrada del ejército griego, lo que provocó la
caída definitiva de Troya
Por lo general, el caballo de Troya es considerado una creación
mítica, pero también se ha debatido si realmente pudiera haber
existido y fuera una máquina de guerra transfigurada por la fantasía
de los cronistas. De cualquier manera, demostró ser un fértil motivo
tanto literario como artístico, y desde la Antigüedad ha sido
reproducido en innumerables poemas, novelas, pinturas,
esculturas, monumentos, películas y otros medios, incluidos dibujos
animados y juguetes.
22.
23. Tras 5 días de indecisión persa, los cuales estaban acampados a escasa
distancia del paso de las Termópilas, Jerjes envía a un gran ejercito de
hombres que pretendían hacer valer su superioridad numérica para acabar
con la resistencia griega, la estrategia era clara, si esto fracasaba
mandaría a sus "inmortales" la élite de su ejercito, que comprendía a
10.000 hombres, solo ellos ya eran más hombres que todo el ejército
griego.La primera oleada que daría comienzo a la Batalla de las
Termópilas consistía en un ataque masivo de infantería ligera. Eran
muchos pero muy mal equipados en comparación con los griegos. Sus
escudos eran más pequeños , sus espadas mas cortas que las lanzas
griegas, y su armadura era casi inexistente al contrario que las de los
griegos.
Al segundo dia llega la visita de un griego llamado Efialtes al campamento
Persa, este ciego por el dinero, informa a Jerges acerca de un paso que
conduce a la retaguardia del ejercito griego. Esa misma noche un ejercito
compuesto por los inmortales supervivientes y completados con infatería
hasta alcanzar los 20.000 hombres son enviados al secreto paso.
Al tercer día de madrugada la maniobra envolvente estaba en marcha, los
griegos apostados en la retaguardia no pudieron detener el avance persa
que simplemente pasaron de largo a estos hombres, una vez los lideres
griegos fueron avisados de este suceso, un baño de sangre mayor. Se
quedaron los 700 tespios, los 300 espartanos y 400 tebanos. Los griegos
lucharon ya rodeados en la zona mas ancha del paso para causar más
bajas, hasta que se rompieron todas sus lanzas y algunos continuaron la
lucha con espada o con sus propias manos
24. Los tebanos fueron los primeros en rendirse, aunque algunos
causaron más bajas una vez se les acerco el enemigo, los demás
continuaban batallando, en esta lucha murieron Leónidas I y dos
hermanos de Jerges. Finalmente los griegos retrocedieron a una
zona mas estrecha donde una gran descarga de flechas acabó con
ellos. El cadáver de Leónidas fue decapitado y crucificado, pero él ya
había pasado a la historia.
*El emperador persa Jerjes, con un ejército de cientos de miles de
soldados, se propuso invadir Grecia y sumir en la oscuridad a su
cultura. 300 de los mejores espartanos (guerreros temibles), al
mando del rey Leónidas, se adelantaron al paso de las
Termópilas (un angosto pasillo que abría el camino hacia Grecia)
para frenar el avance persa, mientras las ciudades griegas armaban
un auténtico ejército con que plantar cara a Jerjes.
Tras tres días de encarnizada batalla, todos los espartanos
murieron, no sin antes llevarse por delante a 20.000 persas y haber
cumplido su cometido: frenar el avance de los invasores y permitir
que, luego, los griegos aliados vencieran definitivamente a los persas
en labatalla de Platea, dando final a la Segunda Guerra Médica.