La contaminación del suelo se define como el aumento de compuestos químicos de origen antropogénico que degradan la calidad del suelo y reducen su potencial de uso. Se produce principalmente por derrames de tanques de almacenamiento, filtraciones de alcantarillado, aplicación de pesticidas, acumulación de desechos industriales y radiactivos. Los contaminantes más comunes incluyen derivados de petróleo, solventes, metales pesados y pesticidas.