1. Amenazas informáticas
Los atacantes mejoran sus técnicas para lograr sus propósitos. Pero con
unas sencillas medidas para proteger el sistema y mediante unos buenos
hábitos en el uso de Internet, estaremos protegidos.
Se acabaron los tiempos en los que el afán de los creadores de virus era el
reconocimiento público… Ahora es peor.
La evolución de las tecnologías de la información no ha pasado desapercibido para
los delincuentes, que desarrollan en ellas sus actividades maliciosas con el objeto
de lucrarse.
Virus circulando por la red
Diferentes tipos de virus circulan por la red en busca de ordenadores desprotegidos
y usuarios incautos. Las principales motivaciones para infectar tu equipo son
varias:
Conseguir los datos bancarios o de servicios de pago en línea para suplantar tu
identidad y hacer desaparecer tu dinero.
Utilizar tu sistema como puente para realizar otro tipo de actividades
maliciosas; enviar correo basura o atacar otros sistemas.
Las vías de entrada de los virus para infectar los sistemas son muy variadas y están
en constante evolución. Las más comunes son:
Al visitar páginas maliciosas, que aprovechan agujeros de seguridad en el
navegador y en los programas utilizados para ver las páginas; reproductores
de video, visores de texto (pdf), etc.
Al abrir ficheros maliciosos, que llegan al sistema a través del correo
electrónico, mensajería instantánea, redes P2P o descargados directamente de
alguna página poco confiable.
2.
Al conectar al ordenador memorias USB que previamente han sido utilizadas
en un PC infectado.
Cantidad de correos innecesarios
Cuando recibes correos electrónicos de remitentes que no conoces y con contenidos
que son ofertas comerciales o no te interesan en absoluto, estas recibiendo spam.
Ejemplos típicos de spam son:
Venta de medicamentos –como Viagra o sucedáneos- y toda clase de
productos milagrosos
Software pirata o supuestamente original a precios de escándalo
Ofertas de trabajo con suculentos dividendos
Descuentos para suscripciones a páginas pornográficas o de apuestas
Aparte de la pérdida de tiempo que esto te supone el spam también es utilizado
como apoyo a otras actividades maliciosas; como la propagación de virus o el
fraude bancario (mediante notificaciones que suplantan la identidad de tú banco).
El avance de las nuevas tecnologías de la comunicación, abre también nuevas vías
a los spammers - individuos u organizaciones que envían spam - por las que hacen
llegar la publicidad. Servicios altamente difundidos como la mensajería instantánea,
chats, foros…incluso el teléfono móvil, están también siendo utilizados para tal fin.