El documento es una reflexión sobre la tumba como un lugar cambiante que a veces brinda calidez y refugio, pero que con frecuencia se convierte en un abismo frío y oscuro donde el tiempo se desgasta y la persona olvida cómo interactuar con el mundo exterior. La mente dentro de la tumba se siente como un universo aparte donde nacen y mueren ideas en soledad. El narrador mira hacia fuera de su tumba-cuerpo y acepta que ya no tiene dudas de que su cuerpo es su propia tumba.