Este documento promueve el Rosario como un remedio infalible para combatir el desánimo, la soledad y las amarguras. Consiste en 59 perlas potenciadas, un árbol redentor y un fruto de vida unidos en una corona. Se recomienda rezarlo diariamente para desarrollar la piedad, la paz interior y la actividad apostólica. No tiene contraindicaciones y se puede usar sin receta para obtener beneficios espirituales y protección contra las tentaciones.