1. Caminar en el Espíritu
Gálatas 5:
16 Digo, pues: Andad en el
Espíritu, y no satisfagáis los
deseos de la carne.
17 Porque el deseo de la carne es
contra el Espíritu, y el del
Espíritu es contra la carne; y
éstos se oponen entre sí, para
que no hagáis lo que quisiereis.
2. Caminar por el Espíritu
y no por nuestras propias fuerzas
Puntos importantes de aprender al
caminar en el Espíritu Santo:
No por nuestras propias fuerzas
Hay una lucha entre “la carne” y
“el Espíritu”
– Los hábitos del pasado y la vida nueva
en Cristo
– El “viejo yo” y el “nuevo yo”
En Cristo, podemos escoger vivir
según los impulsos del Espíritu
Nuestro Andar = Nuestro Estilo
de Vida – Nuestra forma de ser en
la vida diaria
3. ¡Cambiar nuestro estilo de vida
no es fácil!
¿En algún momento has tratado de hacer uno de
estos cambios?
Dejar de fumar
Perder peso
Dejar de gritar cuando estás enojado
Dejar de deprimirte en los inviernos
Dejar de chismear y criticar
Dejar de comprar demasiadas cosas
No dejar las cosas para la ultima hora
Dejar de andar con amigos que te llevan a las
actividades malas
Presupuestar tu dinero
Anota un cambio que has tratado de hacer que te
fue muy difícil (o imposible) hacerlo.
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4. ¡Es como aprender a caminar
por primera vez!
Piensa en un bebe cuando aprende a
caminar. ¿Cuántas veces se cae y llora?
Es así con nosotros en la vida cristiana.
Somos llamados a “andar como Jesús
anduvo.” (1 Juan 2:4). Nuestro andar –
es decir, nuestro estilo de vida – debe
reflejar los valores y personalidad de
Jesús. ¡Pero no es fácil a aprender un
nuevo caminar! Durante toda la vida
hemos formado hábitos pecaminosos, y
los hábitos fuertes no se cambian
fácilmente. Por esto, es absolutamente
necesario que comencemos con el
entendimiento de que es imposible andar
como Jesús en nuestras propias fuerzas.
¡Necesitamos un nuevo poder dentro de
nosotros para ayudarnos a cambiar!
5. Hebreos 12:
1 Por tanto, nosotros también, teniendo en
derredor nuestro tan grande nube de
testigos, despojémonos de todo peso y del
pecado que nos asedia, y corramos con
paciencia la carrera que tenemos por delante,
2 puestos los ojos en Jesús, el autor y
consumador de la fe, el cual por el gozo
puesto delante de él sufrió la
cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a
la diestra del trono de Dios.
3 Considerad a aquel que sufrió tal
contradicción de pecadores contra sí
mismo, para que vuestro ánimo no se canse
hasta desmayar.
4 Porque aún no habéis resistido hasta la
sangre, combatiendo contra el pecado;
6. ¡No Podemos Cambiar por
nuestras propias Fuerzas!
Es el primer día de enero - el
comienzo de un nuevo año. Te
propones hacer muchos cambios
personales - Rebajar 10 libras…
Comer más vegetales… Llamar a
mamá mas seguido…etc…etc.
Comienzas fuerte. ¡Pero después de
un mes, estas quedaooo o igual y o
peor que antes.!
Si has pasado por algo así, ¡no estás
solo! Nadie puede cambiar por sus
propias fuerzas. Con nuestras propias
fuerzas – nuestra propia voluntad –
¡quedamos cortos cada vez!
7. La Lucha de Pablo
Romanos 7:
11 porque el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, me engañó, y por él me
mató.
12 De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento santo, justo y bueno.
13 ¿Luego lo que es bueno, vino a ser muerte para mí? En ninguna manera; sino que el
pecado, para mostrarse pecado, produjo en mí la muerte por medio de lo que es
bueno, a fin de que por el mandamiento el pecado llegase a ser sobremanera
pecaminoso.
14 Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado.
15 Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que
aborrezco, eso hago.
16 Y si lo que no quiero, esto hago, apruebo que la ley es buena.
17 De manera que ya no soy yo quien hace aquello, sino el pecado que mora en mí.
18 Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien
está en mí, pero no el hacerlo.
19 Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago.
20 Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí.
21 Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí.
22 Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios;
23 pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que
me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros.
24 ¡Miserable de mi! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte?
25 Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente
sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.
8. ¿Porque con la carne se sirve a la
ley del pecado?
La ley del pecado es la siguiente:
I Timoteo 1:
8 Pero sabemos que la ley es buena, si uno la usa
legítimamente;
9 conociendo esto, que la ley no fue dada para el
justo, sino para los transgresores y
desobedientes, para los impíos y pecadores, para
los irreverentes y profanos, para los parricidas y
matricidas, para los homicidas,
10 para los fornicarios, para los sodomitas, para los
secuestradores, para los mentirosos y perjuros, y
para cuanto se oponga a la sana doctrina,
9. ¿Que pasa cuando llega Cristo a nuestras vidas?
Romanos 8:
1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo
Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.
2 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del
pecado y de la muerte.
3 Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la
carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a
causa del pecado, condenó al pecado en la carne;
4 para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos
conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.
5 Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los
que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu.
6 Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es
vida y paz.
7 Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no
se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden;
8 y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.
9 Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es
que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el
Espíritu de Cristo, no es de él.
10 Pero si Cristo está en vosotros, el cuerpo en verdad está muerto a
causa del pecado, mas el espíritu vive a causa de la justicia.
11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en
vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también
vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.
10. El Legalismo no Funciona
Colosenses 2:
20 Pues si habéis muerto con Cristo en cuanto a los rudimentos del
mundo, ¿por qué, como si vivieseis en el mundo, os sometéis a
preceptos
21 tales como: No manejes, ni gustes, ni aun toques
22 (en conformidad a mandamientos y doctrinas de hombres), cosas
que todas se destruyen con el uso?
23 Tales cosas tienen a la verdad cierta reputación de sabiduría en
culto voluntario, en humildad y en duro trato del cuerpo; pero no
tienen valor alguno contra los apetitos de la carne.
¿Cuáles son algunas “reglas” mencionadas en este texto?
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¿Por qué no funcionan para ayudarnos a cambiar nuestro estilo de
vida?
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11. No podemos cambiar por nuestras propias fuerzas porque
nuestra carne es demasiado fuerte…
Gálatas 3:
1 ¡Oh gálatas insensatos! ¿quién os fascinó para no
obedecer a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos
Jesucristo fue ya presentado claramente entre
vosotros como crucificado?
2 Esto solo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el
Espíritu por las obras de la ley, o por el oir
con fe?
3 Tan necios sois? ¿Habiendo comenzado por el
Espíritu, ahora vais a acabar por la carne?
4 Tantas cosas habéis padecido en vano? si es que
realmente fue en vano.
5 Aquel, pues, que os suministra el Espíritu, y hace
maravillas entre vosotros, ¿lo hace por las obras de
la ley, o por el oir con fe?
Los Gálatas tratan de ser “súper-
cristianos” en su propia fuerza
12. ¿Que tenemos que escuchar por fe para recibir el
Espíritu de la Promesa?
Efesios 1:
13 En él también vosotros, habiendo oído la
palabra de verdad, el evangelio de
vuestra salvación, y habiendo creído en
él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo
de la promesa,
14 que es las arras de nuestra herencia
hasta la redención de la posesión
adquirida, para alabanza de su gloria.
13. ¡Nuestra Carne Quisiera Esclavizarnos!
La Carne = La naturaleza pecaminosa
The gorrilla on Your Back – El gorila en el Hombro
Imagina que tuvieras un gorrila como mascota. Ese
gorrila pasa los días sobre el hombro tuyo y te
acompaña durante tus actividades. Tan lindo y
juguetón es el gorilita, que no puedes resistir
cuando te pide un guineo. Te brinda una
sonrisita, y le das de comer siempre. Un
guineito…dos…tres. El gorilita, poco a poco, crece y
se pone más fuerte.
Llega el momento un día, después de alimentar esta
mascota, que el gorilita te pide su comida – pero ya
no habla con la voz suavecita y una sonrisita. La
voz ya es ronca y áspera y demandante - ¡Dame un
guineo! Tu le niegas – No creo que quisiera darte
un guineo hoy. Los brazos musculosos se aprietan
alrededor del cuello tuyo y la voz siniestra te exige
– ¡Dame un guineo – ahora! Ya no puedes respirar
y sientes que te desmayas bajo el peso abrumador
de lo que antes era una mascota tan linda y
divertida. Ya el gorila está en control de la vida, y
no hay otro remedio sino que darle todo lo que se te
exija. Por haber alimentado al gorilita mucho, ya
estás de esclavo bajo su dominio.
Así es nuestra naturaleza pecaminosa – nuestra
“carne.” Le damos de comer muchos “pecadillos” –
como si fuera un juego con una mascota. Pero la
carne crece y nos exige más y más. Pecamos con
más fuerzas y más frecuencia, hasta que el pecado
llega a controlarnos y dominar la vida. Somos
esclavizados. Nuestra carne es el gorila en el
14. ¿Que tenemos que hacer para que la carne
“gorila”no tome el control?
Romanos 6:
1 Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la
gracia abunde?
2 En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al
pecado, ¿cómo viviremos aún en él?
3 O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo
Jesús, hemos sido bautizados en su muerte?
4 Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el
bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la
gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.
5 Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de
su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección;
6 sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado
juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a
fin de que no sirvamos más al pecado.
7 Porque el que ha muerto, ha sido justificado del pecado.
8 Y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con él;
15. Romanos 6
9 sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya
no muere; la muerte no se enseñorea más de él.
10 Porque en cuanto murió, al pecado murió una vez por
todas; mas en cuanto vive, para Dios vive.
11 Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero
vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.
12 No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de
modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias;
13 ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como
instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros
mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros
miembros a Dios como instrumentos de justicia.
14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no
estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.
16. Morir a la Carne = Despójate de la Carne y Ponte Cristo
Andar como Jesús es una Decisión de Gálatas 2:
Todos los Días 20 Con Cristo
estoy juntamente
Hay una decisión que tomar todos los días. crucificado, y ya
no vivo yo, mas
¿Hoy viviré yo según los deseos de mi carne, o vive Cristo en mí;
voy a seguir los impulsos del Espíritu que y lo que ahora
vive en mí? vivo en la
carne, lo vivo en
Después de muchos años de práctica, estamos la fe del Hijo de
acostumbrados al pecado. Son hábitos que
nos parecen naturales y “normales.” Dios, el cual me
Aprender una nueva forma de andar no amó y se entregó
viene fácil al principio. Pero gracias a a sí mismo por mí.
Dios, hay un nuevo poder que mora en 21 No desecho la
nosotros, y nos da poder para debilitar al
“mono” y vivir en una nueva manera. Este gracia de Dios;
cambio de andar se compara al cambio de pues si por la ley
ropa. fuese la
Nota: Información de cuadernos de lecciones justicia, entonces
para maestros para discipular e información por demás murió
adicional del Pastor Orangel Carrasquillo Peña Cristo.
17. Ya en Cristo somos del nueva criatura y caminamos en el
Espíritu
1 Corintios 15: 1 Pedro 1:
45 Así también está escrito: Fue 17 Y si invocáis por Padre a aquel que sin
hecho el primer hombre Adán acepción de personas juzga según la
obra de cada uno, conducíos en temor
alma viviente; el postrer todo el tiempo de vuestra
Adán, espíritu vivificante. peregrinación;
46 Mas lo espiritual no es 18 sabiendo que fuisteis rescatados de
primero, sino lo animal; luego lo vuestra vana manera de vivir, la cual
espiritual. recibisteis de vuestros padres, no con
cosas corruptibles, como oro o plata,
47 El primer hombre es de la
tierra, terrenal; el segundo 19 sino con la sangre preciosa de
Cristo, como de un cordero sin
hombre, que es el Señor, es del mancha y sin contaminación,
cielo. 20 ya destinado desde antes de la
48 Cual el terrenal, tales también los fundación del mundo, pero
terrenales; y cual el manifestado en los postreros tiempos
celestial, tales también los por amor de vosotros,
celestiales. 21 y mediante el cual creéis en
Dios, quien le resucitó de los muertos
49 Y así como hemos traído la y le ha dado gloria, para que vuestra
imagen del terrenal, traeremos fe y esperanza sean en Dios.
también la imagen del celestial. 22 Habiendo purificado vuestras almas por
50 Pero esto digo, hermanos: que la la obediencia a la verdad, mediante el
carne y la sangre no pueden Espíritu, para el amor fraternal no
heredar el reino de Dios, ni la fingido, amaos unos a otros
corrupción hereda la entrañablemente, de corazón puro;
incorrupción. 23 siendo renacidos, no de simiente
corruptible, sino de incorruptible, por
la palabra de Dios que vive y
2Corintios 5: permanece para siempre.
17 De modo que si alguno está en
Cristo, nueva criatura es; las
18. Ponte a Cristo y camina en el Espiritu
Colosenses 3:
5 Haced morir, pues, lo terrenal en
vosotros:
fornicación, impureza, pasiones
desordenadas, malos deseos y
avaricia que es idolatría;
6 cosas por las cuales la ira de Dios
viene sobre los hijos de
desobediencia,
7 en las cuales vosotros también
anduvisteis en otro tiempo cuando
vivíais en ellas.
8 Pero ahora dejad también vosotros
todas estas cosas:
ira, enojo, malicia, blasfemia, palabr
as deshonestas de vuestra boca.
9 No mintáis los unos a los
otros, habiéndoos despojado del
viejo hombre con sus hechos,
10 y revestido del nuevo, el cual
conforme a la imagen del que lo creó
se va renovando hasta el
conocimiento pleno,
11 donde no hay griego ni
judío, circuncisión ni
incircuncisión, bárbaro ni
escita, siervo ni libre, sino que Cristo
es el todo, y en todos.