1. Deportes extremos
Un deporte, no considerado extremo se puede definir así si se practica bajo
condiciones especiales o circunstancias particulares no habituales en el. Por
ejemplo, la escalada en roca a unos centímetros del suelo (bulder) no se considera
deporte extremo, pero si se realiza en una pared vertical rocosa a varios cientos de
metros de altura, entonces sí se le aplica el término.
Se puede considerar que una persona practica un deporte extremo cuando lo
hace por primera vez. Por ejemplo, el rafting de clase IV es bastante extremo para
quienes nunca antes se habían subido a una balsa y lo sentirán como muy por
encima de sus capacidades personales
El término "deporte extremo" no es adecuado aplicarlo cuando se realiza
simplemente una actividad recreativa o Turismo no de masas, turismo cultural,
turismo histórico, turismo arqueológico, etc. Tampoco debe estar definido por las
condiciones medioambientales, algo bastante subjetivo y dependiente del grado
de preparación. En cambio, el término puede aplicarse cuando se practica un
deporte en los límites actuales de desarrollo, sea montañismo a utilizar el término
"deporte de aventura" cuando se practican deportes de más alto riesgo de lo
normal sin ser profesionales. Un ejemplo de esto es la diferencia que existe entre