Copérnico propuso un modelo heliocéntrico del sistema solar donde la Tierra y los otros planetas giran alrededor del Sol, en contraste con el modelo geocéntrico de Ptolomeo. Copérnico creía que los movimientos uniformes y circulares eran los más naturales, y que su modelo simplificaba las órbitas planetarias describiéndolas como círculos perfectos en torno al Sol. Aunque su modelo tenía algunas imprecisiones, ofrecía ventajas técnicas como permitir un cálculo más directo