Porque narro mi vida así, porque en varios episodios de mi vida, he tenido que volver a ser el soldado, la milicia no me ha abandonado , aunque en mi patrimonio académico, algunos tintes y teorías académicas me brindaron la posibilidad de ser neutral en cuanto a lo que defiendo, sería una necedad considerar como un ideal la defensa de los intereses personales de grupos de poder, en ese caso, el sonido del shofar llego realmente a mi vida, aquella mañana del 5 de marzo de 2003,antes de titularme como abogado, se a ciencia cierta que Dios no me iba a dejar en Babilonia y descendió un poco antes de la puerta 50 a mi vida, ese es mi testimonio