La contaminación visual se refiere a la presencia de elementos en el paisaje que no corresponden con su entorno natural y causan desequilibrio y distracción. En las ciudades, la proliferación de vallas publicitarias, graffitis e industrias crean contaminación visual, especialmente para los conductores. Aunque las grandes ciudades se ven más afectadas, también las pequeñas localidades sufren este problema debido a la basura, construcciones mal planificadas y otros desechos producidos por el hombre.