El consumo de drogas entre niños y adolescentes es un problema grave que afecta a nivel internacional. España tiene una de las tasas más altas de consumo juvenil. El uso de drogas a temprana edad puede causar daños al sistema nervioso central y trastornos mentales. Además, con el tiempo el consumo obsesivo puede llevar a la dependencia física y psicológica, creando una necesidad física o compulsión por seguir consumiendo.

1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
EL PROBLEMA
Considerando que las drogas es una sustancia que puede modificar el
pensamiento, las sensaciones y las emociones de la persona que la consume. Las
drogas tiene la capacidad de cambiar el comportamiento y, a la larga, la manera de
ser. Esto no afecta solo al hombre si no también a los niños y esto ocurre a nivel
internacional, ya que, sabemos que son sustancias ilícitas, aun así cada vez son
más los jóvenes que comienzan a hacer uso de las drogas. Empiezan a drogarse a
edades más tempranas que van entre los 10 o los 12. Para los 10 y los 14 años
constituyen un nuevo mercado para las adicciones; desde esa edad usan
inhalables, cocaína, metanfetaminas y heroína entre otro tipo de drogas.
Debemos mencionar que a veces no solo la consumen si no que son usados como
medio traslado para lograr que llegue al destino del comprador, esto ocurre en
todas partes del mundo. Uno de los países que podemos mencionar que tiene el
mayor número de niños que consumen droga lo es España según en (NOTICIAS
EL PAÍS, NOS DICE LA PERIODISTA BEATRIZ PORTINARI en el
artículo publicado el 02 de Mayo de este mismo año)
“España se sitúa entre los países con mayor tasa de consumidores jóvenes. Los
expertos alertan del riesgo de desarrollar trastornos mentales”
Al empezar hacer uso de las drogas trae consecuencias grabes y más cuando se
hace a temprana edad, Según los expertos, afecta el sistema nervioso central en los
adolescentes es más vulnerable a sufrir alteraciones en su estructura y conexiones
neuronales por la introducción de sustancias exógenas. No se trata solo de
pérdidas de concentración y de memoria que afectan al aprendizaje, deterioro
cognitivo asociado al fracaso escolar, falta de reflejos y alteración de la capacidad
motora o el "síndrome a motivacional" que implica apatía y desinterés por los
estudios y el entorno. La alta concentración de tetrahidrocannabinol presente en la

2. marihuana aumenta el riesgo de sufrir en un futuro brotes psicóticos y en casos de
predisposición genética esquizofrenia.
A lo largo de un consumo obsesivo llegan hacer consumidores de dependencia
física a una droga: es un hábito formado físicamente por el que el cuerpo crea una
necesidad física de una droga, de forma que su ausencia repentina da lugar a
ciertos síntomas de abstinencia, conociendo que la abstinencia es conjunto de
alteraciones físicas y psíquicas que aparecen en una persona cuando deja
bruscamente de tomar una sustancia a la cual está habituada o es adicta,
especialmente una droga.
Podemos hacer mención de esos consumidores que tienen una dependencia
psicológica: es el desarrollo de una necesidad psicológica persistente, algunas
veces dominantes de una droga que lleva a una compulsión por tomarla.
Entendemos por la LEY ORGÁNICA DE DROGA que los consumidores
dependientes son