1. La resurrección de Jesús es un episodio evangélico y un tema muy representado en
el arte cristiano, dentro del ciclo de la Pasión. En la literatura cristiana Jesús es, por
antonomasia, "el Resucitado".
Según el Nuevo Testamento, ocurrió al tercer día de
que Jesús fuera crucificado, muerto y sepultado en una tumba. El momento preciso de la
resurrección no se describe, ni aparece como presenciado por nadie (ni siquiera por los
soldados que custodiaban el lugar); sí su consecuencia: las miróforas1 (tres
Marías o santas mujeres) encuentran la tumba vacía2 (en uno de los evangelios, el de
Mateo, en medio de un estruendo causado por la llegada de un ángel -en los demás
evangelios también aparecen ángeles, aunque en otra actitud-). A partir de ese momento
se mencionan varias apariciones de Jesús resucitado3 en diversas ocasiones, tanto
a María Magdalena (Noli me tangere) como a los apóstoles (Tomás, que había mostrado
su incredulidad,4 es invitado por el propio Jesucristo a meter la mano en la llaga del
costado)5 y a otros discípulos (a los discípulos de Emaús y a un grupo de más de
quinientos "hermanos").6
La resurrección de Jesucristo se celebra en el calendario cristiano con la festividad
del domingo de pascua o de resurrección. El domingo de resurrección se denomina
también en los Συναξάριον synaxarion y calendarios litúrgicos de la iglesia
ortodoxa "domingo de las miróforas con el noble José.7