1. El Grupo en el Hogar supone un gran avance en lo que a administración simple de
redes refiere, sobre todo si lo comparamos con la semántica clásica de acceso por
nombre de usuario y contraseña. Veremos hoy aquí cómo resolver sin dificultades
los problemas más complejos de su funcionamiento.
El Grupo en el hogar apareció en Windows 7 como una herramienta más para profundizar el cambio
que Windows Vista había introducido en relación con XP. Los más desmemoriados deberán recordar
que XP aprovechaba todavía la semántica de acceso por nombre de usuario y contraseña, simplificada
apenas por las configuraciones predeterminadas de Uso compartido simple de archivos y por la
configuración predeterminada de un grupo de trabajo -WORKGROUP en todas las versiones excepto
la Home- que permitían el acceso directo a la carpeta [Documentos compartidos], mientras que
Windows Vista introdujo la primera versión del [Centro de redes y recursos compartidos] y limitó
el acceso a cualquier carpeta que no fuera [Acceso público] independientemente del grupo de trabajo
al que perteneciera el equipo.
La llegada del Grupo en el hogar con Windows 7 terminó con buena parte de los problemas de la
administración básica de la red y -sobre todo- del acceso a los materiales disponibles en otros equipos
de la casa (en rigor de verdad, de otros equipos conectados a un mismo enrutador o punto de acceso).
La migración resultó particularmente simple porque el Grupo en el hogar requiere un primer equipo
que cree el grupo en sí mismo, al cual los demás equipos se suman con una clave. La situación ideal
es, precisamente, la del momento de migración a un nuevo sistema operativo: el primer equipo de la
casa que llegue al grupo establecerá la configuración, y cada nuevo equipo (o cada nueva instalación
del sistema) se irá sumando.
Ahora bien, en la era post-PC y con un nuevo sistema operativo en el horizonte de la migración -
Windows 8.1, en este caso- las configuraciones empiezan a solaparse y empieza a ocurrir que los
equipos dejan de poder acceder a los contenidos remotos como es debido. En el peor de los casos
incluso hay dos equipos con grupos diferentes creados, y entonces sólo algunas computadoras pueden
acceder a algunos contenidos, y ya no hay flujo libre de información posible.
Windows 8 llama Grupo Hogar en el cuadro [Configuración] al conjunto de opciones asociadas al
Grupo en el hogar.

2. Eliminar la información del Grupo en el hogar
El primer paso para resolver cualquier problema de Grupo en el hogar es la eliminación de la
información de configuración del grupo. Supongamos que tenemos una red doméstica con tres
equipos conectados a un enrutador inalámbrico, y una de las PC no puede acceder a la información
de los otros equipos, que ven sin problemas los recursos disponibles en ambos. En este caso, la
información de configuración que deberíamos eliminar es la del equipo que no tiene acceso a los
demás.
Uno de los problemas de Grupo en el hogar más comunes es que uno de los equipos de la red
pretenda crear un grupo desde cero y no muestre el botón [Unirse a un grupo en el hogar].
MOSTRAR ARCHIVOS Y CARPETAS OCULTAS
Para mostrar archivos y carpetas ocultas los usuarios de Windows 7 deben acceder al explorador
de archivos y presionar la tecla [Alt] para ver el menú [Herramientas/Opciones de carpeta]. Los
usuarios de Windows 8 podrán acceder mediante la opción [Cambiar opciones de carpeta y
búsqueda] del menú desplegable del botón [Opciones] de la cinta [Vista].
En cualquier caso seleccionaremos la pestaña [Ver] y marcaremos la opción [Mostrar archivos,
carpetas y unidades ocultas] y luego presionaremos [Aplicar] para poder acceder al contenido
vedado.

3. Una vez resuelto el problema es recomendable desactivar nuevamente la vista de archivos y carpetas
ocultas.
Para eliminar esta información deberemos en primera instancia acceder a la carpeta
[C:WindowsServiceProfilesLocalServiceAppDataRoamingPeerNetworking], que es oculta
y de sistema, y borrar todo su contenido. Como es de sistema, debemos contar con una cuenta de
administrador para acceder a ella. No es necesario, al margen, realizar ninguna copia de respaldo.
Antes de continuar debemos ejecutar [services.msc] y busca el servicio [Escucha de grupo en el
hogar]. Haremos doble clic sobre él y chequearemos que en la línea [Estado del servicio] se pueda
leer [En ejecución]. Si leyéramos otra cosa deberíamos hacer clic en [Iniciar]. Repetiremos el
proceso para el servicio [Proveedor de Grupo Hogar], y luego reiniciaremos el equipo.

4. No importa si el tipo de inicio de los servicios en cuestión es [Manual] o [Automático] sino que
estén en ejecución al momento de configurar el Grupo en el hogar.
ACTIVAR LA DETECCIÓN DE REDES
Ahora que la configuración del Grupo en el hogar está virgen, debemos chequear que la detección
de redes esté activada. Para eso, luego de reiniciar, iniciaremos el [Centro de redes y recursos
compartidos] y haremos clic en el vínculo [Cambiar configuración de uso compartido
avanzado]. Allí marcaremos la opción [Activar la detección de redes] para el perfil [Privado] y
nos aseguraremos de que la casilla de verificación [Activar la configuración automática de los
dispositivos conectados a la red] esté marcada. Presionaremos por último [Guardar cambios] y
reiniciaremos el equipo.
Es importante en esta ventana que esté marcada la opción [Activar el uso compartido de archivos e
impresoras].
Configuración de NetBIOS
Si tenemos suerte, luego de completar todos estos pasos y ajustar todas estas configuraciones
tendremos el equipo listo para unirse al grupo en el hogar, caso en el cual iremos directo a la sección
[Configurar el grupo en el hogar] de este artículo. Ahora bien, conocemos la tecnología y sabemos
que las cosas no son siempre como esperamos que sean. En efecto, hay ciertos ajustes sobre la
configuración del protocolo TCP/IPv4 que pueden influir negativamente en la creación del Grupo en
el hogar y que debemos revisar.

5. Si los pasos de configuración previa fueron exitosos, en el Centro de redes y recursos compartidos
deberíamos leer el estado [Disponible para unirse] en el ítem [Grupo Hogar] del equipo cliente.
Para acceder a los ajustes del protocolo abriremos una vez más el [Centro de redes y recursos
compartidos] y haremos clic en el vínculo [Cambiar la configuración del adaptador]. Allí
veremos la lista de adaptadores disponibles en el equipo: debemos seleccionar el que usemos para
conectarnos a la red local y hacer clic con el botón derecho del mouse sobre él. Del menú
contextual seleccionaremos la opción [Propiedades], en la lista [Esta conexión usa los siguientes
elementos] haremos doble clic sobre el ítem [Protocolo de Internet versión 4 (TCP/IPv4)]. Allí
haremos clic en el botón [Opciones avanzadas…] y luego en la pestaña [WINS].
Por defecto estará seleccionada la opción [Predeterminada] en el apartado [Configuración de
NetBIOS]. En ese contexto, será el router -o el punto de acceso, o el dispositivo que sea que
utilicemos para conectarnos a internet- el que ofrezca la configuración de NetBIOS, imprescindible
para que el Grupo en el hogar funcione (aunque no para que funcione, por caso, la conexión a
internet). En el caso de que el dispositivo no la ofreciera o el equipo tuviera algún problema en
recibirla, el grupo no funcionará. Es por eso que aquí seleccionaremos [Habilitar NetBIOS a
través de TCP/IP] y presionaremos [Aceptar]. Puede que sea necesario reiniciar todos los equipos
de la red, pero en todos los casos cualquier problema no listado en la sección anterior de este
artículo será solucionado.

6. En el caso de que nos conectemos con diferentes adaptadores al mismo Grupo en el hogar será
necesario activar NetBIOS en cada uno de ellos.
Configurar el Grupo en el hogar
Una vez lista la configuración de limpieza estaremos en condiciones de configurar desde cero el
Grupo en el hogar en el equipo de nuestro ejemplo que tenía problemas. Para ello seguiremos con
atención la siguiente guía paso a paso.
Paso a paso: Unirse a un Grupo en el hogar
1. Iniciaremos sesión en todos los equipos del grupo. En el equipo aún no unido accederemos a la
pantalla de inicio y ejecutaremos el [Centro de redes y recursos compartidos].

7. 2. Haremos clic en el vínculo [Disponible para unirse] del ítem [Grupo Hogar].
3. Haremos clic en [Unirse ahora] y presionaremos [Siguiente]. Luego seleccionaremos el nivel de
permiso ([Compartido] o [No compartido]) para cada biblioteca, y presionaremos nuevamente
[Siguiente].
4. Buscaremos en el equipo en el que creamos el grupo original la contraseña. Para eso escribiremos
[Grupo Hogar] en la pantalla de inicio, seleccionaremos [Configuración] y haremos clic sobre
[Grupo Hogar]. En el apartado [Pertenencia] podremos leer la contraseña.

8. 5. Escribiremos la contraseña en el equipo que tenía problemas para unirse y presionaremos
[Siguiente].
Una opción inteligente
Aprovechar el Grupo en el hogar parece una decisión inteligente. Resueltos estos eventuales
problemas la administración es realmente muy simple: por defecto el sistema comparte el contenido
de todas las bibliotecas con excepción de [Documentos]. Por supuesto, en la configuración inicial
(paso 3 de nuestra guía [Unirse a un grupo en el hogar]) podemos seleccionar la opción
[Compartir] para [Documentos], pero siempre será mejor en ese caso particular compartir el

9. contenido por carpeta. ¿Cómo? De una manera muy simple: una vez configurado el grupo, el menú
contextual de cualquier carpeta sumará, en el subgrupo [Compartir con] las opciones [Grupo en el
hogar (ver)] y [Grupo en el hogar (ver y editar)]. Así las cosas, alcanzará un clic para compartir
un contenido en modo solo lectura o en modo acceso completo. Todas opciones más fáciles y simples
que las que ofrece la semántica clásica de acceso por nombre de usuario y contraseña, en un contexto
que ya cuenta con la doble protección del firewall de la infraestructura de red y de la configuración
de seguridad del equipo local.
La opción [Usuarios específicos] nos permitirá no sólo elegir un usuario de cuenta Microsoft sino
también uno del Grupo en el hogar.
Alexis Burgos
Licenciado en Ciencias de la Comunicación (UBA) y maestrando en Periodismo Documental
(UNTREF), Alexis Burgos es periodista especializado en nuevas tecnologías. Actualmente firma
varias secciones en la revista Users y colabora de manera estable con esa publicación, con WeekEnd
y con DattaMagazine. Además, es editor en ECOS y conduce micros de tecnología para varios medios
audiovisuales. Por otra parte, es capacitador del Programa de Mejora Educativa de la Universidad
Nacional de Tres de Febrero y docente en la carrera de Ciencias de la Comunicación de las materias
Taller de Comunicación Periodística (Universidad de Buenos Aires) e Introducción a la Lingüística
(Universidad de San Andrés).
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