2. Testamento Desde unas rendijas dices verme incluso en los momentos mas íntimos. Debes saber que veo en tus signos los míos y aunque me eterne hoy quiero hacer testamento. Te dejo mis dudas sin remedio para que tú en los momentos seguros las conserves en silencio. Te dejo mis tontas propuestas para que estas, sí, les des respuestas. Te dejo un cofre vacío para que hagas uso del contenido. Te dejo un hígado graso, el del abuelo, lo siento, te lo paso. Te dejo las ganas de ser feliz, si lo intentas, al dormir al raso verás que las estrellas te acompañan. Te dejo mi colección de meteduras de pata, amplíalas con las tuyas. Te dejo una bolsa de consejos vacía. Para que tú no la llenes y así la entregues a mis nietos. Si te dejara dinero, casa o acciones, me habré equivocado. Reacciones: Reparte el dinero, llena la casa de gente y las acciones lánzalas al viento junto a mis cenizas. Adolfo Lisabesky
3. ¿Que ser? Ser o no ser decía Hamlet a los reyes. Y yo digo ¿Qué ser?. Decía el poeta: “ ...no soy de un pueblo de bueyes...” Mansos o Bravos. Voces secretas nos dicen tener vidas discretas, trabajadores abnegados, mil leyes dispuestas hacer personas selectas. Los mansos dicen que si, los bravos dicen que no. Gritos de rectas personas golpean los afilados clavos. Dispuesta y atenta la mano perfecta. Pueblos de arquitectos y arquitectas que no de obedientes lacayos: construir presente y no olvidos, hacer del progreso no rectas presas, sino del recuerdo presos. Hacer del pasado consejo presente el corazón ardiente, radiante, latente. Olvidar el futuro muerte inminente. Adolfo Lisabesky
4. De Padres e Hijos Uno lo ve frágil, de cristal y quisiera poner fundas y quisiera reservarlo del mal. Desisto de rodearlo de corcho, no haré de mi experiencia su cárcel de cristal. Mis temores en mi existencia tras años cultivados, no serán un agujero, una resistencia a vivir. No te dejarán ser ni querer, te querrán hacer ver con la insistencia de la mala educación los peligros de toda liberación. No estarás solo, con frecuencia encontrarás almas gemelas creerán en tí como creerás tú en ellas. Refresca su estancia disfruta del camino en las esperas y desgrana una a una todas las ideas. Tu insistencia en ser feliz será tu herramienta mas útil. Sobre la toz de tu bronquitis escucho tu risa fértil, tu mirada viva sobre mi. Uno lo ve frágil, de cristal y quisiera poner fundas y quisiera reservarlo del mal. Adolfo Lisabesky
5. Cabestros armados dominan la ciudad Cabestros armados dominan la ciudad entre tantos cuernos yo no se donde ir. Mientras, ellos no paran de embestir. Si me escondo tal vez evada la realidad. Antiguos mansos, se preocupaban por vivir, ahora bravos no ocultan la posibilidad de enseñar sus encantos, para demostrar su torpe e inquietante personalidad. Toro Negro, darás con mi roja tonalidad, de frente te veré y así podré decirte “ ...Corre toro, a la mar, embiste..” Iré hacia los prados que olvidaste y dejaré la ciudad a los rumiantes a salvo de cabestros delirantes. Adolfo Lisabesky
6. Sueño. Historias difusas sobre preocupaciones recientes. Derrotas y victorias confusas nos ponen remedio. Imágenes profusas de vuelos, accidentes, amores, canciones acaban con el tedio, sueños a medio resolver. En ellos soy héroe y villano. Resuelto el despertar, te reclamo cuando lo que en el sueño sucedió, era engaño. No domeñé a gigantes y me encojo, recobro mi humanidad, La poderosa fuerza torna normalidad, pasillo y baño lo que eran rasantes vuelos. Tampoco debo de escapar el crimen cometido en este sueño no tiene castigo y este empeño en fugarme se debe de acabar. Mañana con suerte volveré a soñar, de nuevo una historia me hará actuar y por cuatro horas dejaré de mirar. Adolfo Lisabesky