2. El tannat es considerado por los uruguayos un patrimonio
nacional.
Uva rara si las hay, las bodegas uruguayas han logrado premios
mundiales a partir de la elaboración de vinos con base en esta
cepa que, con cortes de uvas más suaves como el merlot,
adquieren un sabor único, inclusive mejor que en las campiñas
francesas, desde donde llegó a finales del siglo XIX hasta estas
tierras.
3. Las cepas eran de Francia (tannat y folle noir) y llegaron por medio
de los primeros enólogos que tuvo el país: Harriague y Vidiella.
Harriague fue quien plantó el primer viñedo de tannat en la
ciudad de Salto. Tras 130 años de adaptación, las vides tannat
son las típicas de Uruguay. La tannat es la variedad de uva que
mejor se adapta al suelo y clima uruguayo y por esto mismo es
que se la considera la cepa protagonista de toda bodega
uruguaya.
4. Ideal para acompañar cualquier mesa, el tannat, con todo su
cuerpo y violácea alma, es el mejor vino para degustar la gran
parrilla uruguaya, conocida como una de las más completas y
sabrosas.