La adopción por parejas homosexuales se permitió por primera vez en la Ciudad de México en 2009. Aunque ha habido oposición de grupos religiosos, estudios estadounidenses concluyeron que los niños criados por parejas del mismo sexo no tienen resultados diferentes a los criados por parejas heterosexuales. Recientemente, la Corte Suprema de México falló a favor del derecho de las parejas homosexuales a adoptar en la Ciudad de México.

1. ADOPCIÓN DE NIÑOS EN
MATRIMONIOS GAY
• La adopción de un niño por parte de una pareja o persona homosexual es
conocida como familia homoparental.
•Desde diciembre del 2009, se permite la adopción a parejas homosexuales en
la Ciudad de México. Fue el Distrito Federal, el primero en el país en autorizar
la adopción a homosexuales, lo cual ha provocado rechazo por parte de la
Iglesia católica y ha sido impugnado sin éxito por el Partido Acción Nacional, en
cuya impugnación ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación se elevó a
rango federal el reconocimiento y derechos de los que en el Distrito Federal
adopten a un infante o infantes

2.  En el Distrito Federal y otros estados de la
república mexicana la población menor de 35 años
se ha manifestado a favor de la medida, mientras el
rechazo, generalmente por cuestiones religiosas se
incrementa con la edad. El 18 de Agosto del 2010
el Supremo Tribunal resolvió que las parejas
homosexuales tienen el mismo derecho de poder
adoptar a un menor en la Ciudad de México.

3.  Esto se pudo dar gracias a la colaboración de los
Estados unidos de América quienes fueron los que
recomendaron que las parejas gay pueden adoptar
niños. Llegaron a esa conclusión luego de años de
elaboración de diversos estudios que concluyeron
que los niños educados por ellas no difieren de los
niños criados por parejas heterosexuales.

4.  Por otro lado, no se elige ser homosexual, así como no se elige ser
heterosexual. Aún se desconoce científicamente cuáles son los motivos por
los que una persona se orienta sexualmente hacia la homo, la bi o la
heterosexualidad. Desde teorías genéticas hasta de estructuración
familiar, todas pueden dar explicaciones, pero esas mismas teorías también
podrían explicar diversos tipos de personalidad con mayor o menor salud
mental.

5.  La adopción requiere de personas adultas sanas que deseen dar
amor, cuidado, respeto, proyectos positivos de vida a niños que de otro modo
quedarían subsumidos en la muerte psíquica y social. No todas las personas
heterosexuales ni homosexuales están emocionalmente preparadas para la
difícil tarea de criar sanamente a un niño. Es necesario que quienes se
ocupan de diagnosticar a los posibles padres adoptivos lo hagan desde el
conocimiento científico y profesional y no desde sus prejuicios y valores
discriminatorios.

6.  Es algo de lo que más se discute acerca de los adoptos ya que no se sabe
qué clase de educación puedan llegar a tener los hijos puesto que no es lo
mismo el tener alguien con quien platicar como si tú fueras un varón con tu
mama a que tengas platicas con dos papas sería muy raro y probablemente
penoso; otro punto importante sería la discriminación que podría llegar a
tener el muchacho ya que hoy en día la sociedad da a conocer sus opiniones
públicamente sin importar que daño puede causar a algún tercero.

7.  La conclusión que se llega es de que la mejor manera de aceptar a los
homosexuales y a la vida que ellos escojan es la del respeto sin lugar a duda
pero como se podría lograr esto, se llegaría a este objetivo por medio de la
educación desde casa esa que recibimos de los padres que es con la que
nos damos a conocer a la sociedad y es esa la que nos pondrá en un buen
ejemplo o mal ejemplo, después de la educación en casa se tendría que
seguir con esta desde el nivel de primaria y secundaria enseñándoles a los
niños y preadolescentes a poder convivir en armonía sin criticas y tachar a la
gente que tiene tendencias sexuales diferentes a las comunes.

8.  La base de todo esto seria la EDUCACION y esto solo se podría lograr si
todos escuela y padres combinados con la sociedad aprendiéramos a
respetar.