Las bebidas alcohólicas se producen por destilación de otras bebidas como el vino o mezclas fermentadas con alto contenido de azúcares. El alcoholismo se define como la ingestión excesiva de alcohol y se caracteriza por la dependencia emocional y física al alcohol, causando daño cerebral progresivo. El tratamiento del alcoholismo incluye consejería individualizada y terapia de grupo para lograr la abstinencia de forma voluntaria.