1. Daniel Alcolea Trillo
Educación y Sociedad
ESTRUCTURA DE LOS HOGARES ESPAÑOLES
Análisis de la gráfica.
La estructura de los hogares españoles ha variado mucho en los últimos años,
debido a la evolución de nuestra Sociedad y también a diferentes situaciones que nos
han ido marcando todo este tiempo, como por ejemplo, la crisis económica en la que
nos encontramos actualmente. La gráfica a simple vista nos muestra los diferentes tipos
de familias/hogares que existen en nuestro país y las diferencias que se han ido dando
desde el año 2001 hasta el 2011.
En un primer momento, podemos encontrar personas que viven solas con menos
de 65 años (13,7%), y personas con una edad superior a los 65 años (9,5%). En estos
dos tipos de hogares se pueden ver claramente diferencias con el año 2001, ya que han
variado en un 63,7% y un 28,5% respectivamente.
Durante estos últimos años, también, se han ido dando más parejas que no han
querido o no han podido tener hijos (21%). Este tipo de familia también ha aumentado
durante estos años, llegando a encontrarnos con una variación del 55,4%.
Dentro de las parejas que si tienen hijos, podemos encontrar tres tipos de
familias principalmente. Las parejas que tiene solo un hijo (16,3%), donde la variación
desde 2001 ha aumentado un 34,8%, parejas que tienen dos hijos (15,5%), en la cual
también ha aumentado, aunque en menor cantidad con un (11,6%), y las parejas que
tienen 3 hijos o más (3,2%), las cuales han decaído significativamente con un marcado
32,8%.
También podemos encontrar que desde 2001 hasta ahora, se han ido dando cada
vez más hogares en los que vive solo un adulto con sus hijos. Dentro de este grupo
podemos encontrar principalmente dos subgrupos: la madre con sus hijos (7,5%), la
cual ha aumentado la variación en un 44,8%, y el padre que vive con sus hijos (1,8%),
el cual también ha aumentado con un 59,7%.
Por último podemos encontrar otros tipos de hogares o familias, según se vean,
donde están los grupos no familiares (1,4%), el cual ha aumentado razonablemente con
un 77,3%, y otros tipos de hogares (10,1%) que han disminuido en un 9,9%.
Si observamos cuales son las familias que han sufrido un mayor aumento desde
2001 hasta nuestros días vamos a encontrar dos principalmente. La primera, y la más
destacable son las parejas de hecho, que han aumentado vertiginosamente en un 196%.
Y en segundo lugar podemos encontrar a las familias reconstituidas que también han
aumentado en sus últimos años con un 111%.
2. Desde 1970 hasta nuestros días, cada vez se han ido dando más datos de que
iban aumentado los hogares con una sola persona (unipersonales). A últimos del siglo
XX encontrábamos un porcentaje del 7,8 y ahora ha ascendido hasta un 23,2%.
Observando la media de personas que han vivido en un hogar y las que viven
actualmente, también encontramos variaciones, en este caso una clara disminución. En
1970, la media de personas por hogar se encontraba en 3,82% y hasta nuestros días ha
caído en un 2,56%.
En mi opinión, y para finalizar con este apartado, creo que los datos que nos
muestran estas gráficas del periódico “El país”, no van a permanecer así por mucho
tiempo, creo que van a seguir variando. Por ejemplo, van a ir aumentando las parejas sin
hijos, ya que actualmente en el momento que estamos de crisis, existen muchas parejas
que no pueden mantener a uno o más hijos. Las familias que tienen 3 o más hijos van a
seguir disminuyendo, por el mismo motivo que el anterior. Y también, a mi parecer, van
a aumentar considerablemente los adultos que vivan solos con sus hijos y los grupos no
familiares, ya que la Sociedad ha ido evolucionando y el pensamiento de las personas ya
no es tener una familia con mucho hijos, casarse y quedarse en su casa para siempre,
sino tener un poco más de vida y disfrutar sin estar atados a otras cosas. Por todo esto,
la media de personas por hogar creo que seguirá cayendo, y los hogares unipersonales
irán aumentando.
Consecuencias sociales y educativas de dicha estructura.
En nuestra Sociedad, como hemos visto anteriormente, podemos encontrar una
gran variación desde finales del siglo XX hasta nuestros días. Todos estos cambios
pueden ir a parar directamente a la Educación de los niños creando unos fallos y
defectos en esa función educadora: limitaciones económicas, culturales o sociales que
pueden coartar las posibilidades de educación de los niños, los desequilibrios afectivos
y perturbaciones ambientales o anomalías personales de los padres que pueden marcar
el tono de los hijos, la cerrazón de ideas y actitudes en que viven algunos hogares, etc.