Este documento discute la relación entre el diseño, la tecnología y la cultura material contemporánea. Argumenta que la tecnología ha transformado los patrones sociales y hábitos que dan forma a la vida cotidiana y la cultura material. También señala que la irrupción de la tecnología ha generado cambios en el discurso del diseño, el cual ahora se enfoca más en la experiencia e interacción que en los objetos. El autor propone que el diseño debe reconstruir una reflexión sobre estas relaciones y cómo la tecnología se integra en

1. Diseño, tecnología y cultura material
David E. Rodriguez1
davide.rodriguezv@utadeo.edu.co
Universidad Jorge Tadeo Lozano
RESUMEN
Dentro de las estructuras sociales que proponen y mantienen las relaciones de la vida cotidiana, la tecnología2 en
particular se ha convertido en un vehículo de transformación de los patrones y hábitos sociales que hoy le dan forma a
nuestra vida cotidiana y a la cultura material en particular. Esta disrupción que propone el aterrizaje de lo tecnológico en
nuestros más íntimos espacios de interacción lleva a reflexiones para la actividad de diseñar, las cuales pueden ir de lo
general a lo particular, e incluso de lo diacrónico a lo sincrónico –en el caso de proponer aproximaciones históricas o
etnográficas, respectivamente-. Junto con el tipo particular de relaciones que plantea la irrupción de la acción tecnológica
en nuestra vida diaria y particularmente en la cultura material contemporánea, se pueden detectar cambios en el discurso
actual del diseño, el cual tiende a una reflexión volcada sobre el plano de la experiencia y la interacción redefiniendo de
alguna manera el paradigma del proyecto anclado en el objeto. Bajo esta perspectiva y en el sentido más amplio la
pregunta en torno a la cual esta ponencia propone discurrir sería: ¿Cómo reconstruir una reflexión que retome las
relaciones últimas que se han dado entre la irrupción de la tecnología en la cultura material contemporánea y la
redefinición de un discurso del diseño en el marco de estas relaciones? Si la manera como producimos, mediamos y
consumimos –es decir, ordenamos, proyectamos, reconstruimos/destruimos, significamos y apropiamos- nuestra cultura
material ha sido sustancialmente modificada por la idea de cambio continúo que soporta la dinámica de lo tecnológico, si
las maneras de relacionarse con el entorno diario se exponen cada vez más sobre las tensiones que generan lo real versus
lo simulado, lo material versus lo virtual, la desaparición de los limites y la restitución de comunidades y subculturas, así
las preguntas abundan.
Palabras clave: Diseño, tecnología, cultura material, interacción, vida cotidiana.
Mesa temática: Teorías del Diseño y la Creación
ABSTRACT
Within the social structures that offer and maintain relations of everyday life, technology in particular has become a
vehicle for transformation of social patterns and habits that today shape our quotidian life in general and our material
culture in particular. This disruption that proposes the integration of technology within our most intimate spaces of
interaction arise interesting questions for the design activity, which can range from general to particular, and even from
diachronic to synchronic, in the case of proposed historical or ethnographic approaches, respectively. Along with the
particular type of relations arising from the emergence of technological action in our daily lives and particularly in
contemporary material culture, one can detect changes in the current design discourse, which tends to reflect overturned
on the level of experience and interaction somehow redefining the paradigm of the object-based project. From this
perspective and in the broader sense the question around which this paper intends to revolve is: How to rebuild a
reflection that resume the latest relations that have existed between the emergence of technology in contemporary material
culture and the redefinition of design discourse in the context of these relationships? If the way we produce, mediate and
consume, it means, order, project, rebuild /destroy, signify and appropriate, our material culture has been substantially
modified by the idea of continuous change that supports the dynamics of the technological, if the ways we relate to the
everyday environment is increasingly exposed to the tensions that generate different spheres such as: real versus
simulation, material versus virtual, the disappearance of boundaries and the restoration of communities and subcultures,
thus questions abound.
Key Words: Design, technology, material culture, interaction, everyday life.
Introducción
1
Diseñador consultor en temas de desarrollo de producto y branding. Investigador en temas de cultura material y métodos
de investigación en diseño. Diseñador Industrial graduado con honores de la Universidad Nacional de Colombia (2003).
Obtuvo su grado de Maestría en Design History and Material Culture en Brighton University en Inglaterra (2009).
Profesor Asociado de la Facultad de Artes, Diseño y Humanidades de la Universidad Jorge Tadeo Lozano (2010).
Recientemente publicó un libro titulado ¿Cómo mueren los objetos? ideas sobre la estética en el objeto de uso y algunos
otros artículos relacionados con estudios del diseño y cultura material en revistas especializadas.
2
Al hablar de tecnología se hace una especial referencia a la tecnología digital

2. Desde la perspectiva de los estudios de cultura material los artefactos son representaciones
de las maneras como las sociedades se han ido conformado a través del tiempo. Son
también un canal a través del cual se puede comprender las formas en que los seres
humanos han ido construyendo las relaciones que cohesionan a los individuos y les
permiten subsistir como sociedad. Estos mismos artefactos son obviamente, pruebas
materiales de la ideas de cambio que han provocado nuevos rumbos en las sociedades. Son
de hecho reflejo físico de las explicaciones que dan orden y sentido al mundo, este sentido
puede entonces ser estudiado no sólo desde su materialidad, dando cuenta de su
producción, sino también desde las dinámicas de uso y consumo, dando cuenta tanto de la
manera como interactúan los individuos con estos artefactos así como también de la forma
como estas interacciones proponen nuevas interrelaciones entre los individuos que
confluyen en el uso y consumo de estos artefactos. Los estudios de cultura material, la
teoría social, los estudios tecnológicos, los estudios de diseño, entre otros, son campos de
estudio que empiezan a tomar cada vez más fuerza, y han servido como punto de
confluencia para explicar la manera como los seres humanos han modificado su entorno,
volviéndolo cada vez más artificial, dando cuenta de una historia de la producción material
que implícitamente da cuenta de una historia de la tecnología, la ciencia, la cultura y el
diseño. Esta mirada interdisciplinaria permite justificar a través de la idea de continuidad el
rol que los artefactos han tenido al convertirse en punto de encuentro entre ciencia,
tecnología y diseño. Lo que se propone en este documento entonces es traer a discusión la
estrecha relación que ha venido ocurriendo entre el diseño, la tecnología y la cultura
material contemporánea. El propósito es indagar cómo la tecnología está implícita en el
ciclo de vida de nuestras prácticas más cotidianas, y como a través del diseño los avances
tecnológicos toman forma para participar en la construcción de los aspectos físicos e
ideológicos de la cultura y la sociedad.
La tecnología trastorna de la superficie a la esencia
Las preocupaciones alrededor del impacto de la tecnología en la vida cotidiana pueden
rastrearse hasta los esplendores de la primera revolución industrial en la Inglaterra
victoriana, en donde los debates en torno a la contraposición entre formas de pensamiento
artesanal e industrial sentaron las bases para discutir sobre los efectos de la mecanización y

3. aceleración en los procesos de producción, distribución y consumo. Esta línea de discusión
se extiende obviamente hasta las consecuencias de la tercera revolución industrial acaecida
en la segunda mitad del siglo XX, y mantiene viva la discusión sobre los efectos de la
industrialización y la tecnificación en los patrones que configuran la vida cotidiana de
nuestros días. Lo que vale la pena resaltar, es como a través de estos cambios a veces casi
invisibles, se han trastocado nociones fundamentales sobre las cuales las sociedades se han
definido, las ideas de tiempo, espacio, comunidad, territorio, materia, individuo, identidad y
poder, entre otros, han perdido su carácter absoluto y se han rendido a la velocidad que
impone la integración de la tecnología en diferentes aspectos de la cultura.
Parte de esta discusión es afrontada como tema central en la reciente exposición curada por
Paola Antonelli, exhibida en el MOMA de New York y titulada “Design and the Elastic
Mind”. Esta exposición propone que (Antonelli, 2008):
Durante los últimos veinticinco años, la gente ha vivido cambios dramáticos en su
experiencia de tiempo, espacio, materia, e identidad. Las personas lidian a diario con
una multitud de cambios en el trabajo tanto en escala como en ritmo a través del uso
simultáneo de varios husos horarios, viajando con relativa facilidad entre mapas de
satélite e imágenes a nanoescala, siendo inundados con información. La adaptabilidad
es una distinción ancestral de la inteligencia, pero las variaciones instantáneas en el
ritmo de hoy necesitan de algo más fuerte: elasticidad, el producto de la adaptación
más la aceleración. Design and the Elastic Mind exploró la relación recíproca entre la
ciencia y el diseño en el mundo contemporáneo, reuniendo objetos de diseño y
conceptos que unen la investigación científica más avanzada con el examen atento de
limitaciones humanas, hábitos y aspiraciones. [Esta] exposición puso en relieve la
capacidad de los diseñadores para captar los cambios trascendentales en la tecnología y
la ciencia que demandan o reflejan cambios importantes en el comportamiento
humano, y traducirlos en objetos que la gente comprende y usa (p. 14).
Así entonces, junto con el tipo particular de relaciones que plantea la irrupción de la acción
tecnológica en nuestra vida diaria y particularmente en la cultura material contemporánea,
se pueden detectar cambios en el discurso actual del diseño, el cual tiende a una reflexión
volcada sobre el plano de la experiencia y la interacción redefiniendo de alguna manera el
paradigma del proyecto anclado en el objeto. Esto abre posibilidades, cuando por ejemplo,

4. las ciencias de la computación y de los materiales convergen con la moda y la arquitectura
en textiles y entornos inteligentes…(Shove, 2008).
Estos nuevos cruces interdisciplinarios tiene como consecuensia la redefinición del objeto
de estudio del diseño. Preguntas sobre los aspectos físicos de la cultura y los patrones de
formación de la cultura material que den cuenta de comprender la manera como
producimos, mediamos y consumimos –es decir, ordenamos, proyectamos,
reconstruimos/destruimos, significamos y apropiamos nuestro entorno artificial, cuestiones
que relacionan identidad, comunidad y territorio, y otras preguntas resultantes de pensar el
diseño transversalmente se convierten en labor importante para la disciplina
Un discurso de diseño que responda al cambio de época
Bajo esta perspectiva y en el sentido más amplio la pregunta en torno a la cual esta
ponencia propone discurrir sería: ¿Cómo reconstruir una reflexión que retome las
relaciones últimas que se han dado entre la irrupción de la tecnología en la cultura material
contemporánea y le redefinición de un discurso del diseño en el marco de estas relaciones?
Como bien propone Latour, se debe considerar fuertemente la idea de concentrar la mirada
sobre las esferas prácticas de la vida cotidiana con el ánimo de comprender mejor las
relaciones entre la tecnología y la formación de la cultura material contemporánea (Latour,
2005). Así entonces podríamos proponer el diseño como esa esfera práctica en donde los
avances tecnológicos de materializan. A través del diseño la tecnología toma forma tanto
semiótica como práctica y a través de la experiencia de uso los productos se integran a
nuestra acciones de todos los días. Es por medio del diseño que la tecnología se socializa.
En este sentido se necesitan hoy más que nunca, llenar los vacíos entre los estudios de la
sociología y de las ciencias humanas en general, la ciencia y la tecnología, la investigación
en diseño y los estudios de cultura material (Shove, 2008, p. 10). Volver la mirada a las
nociones de apropiación y uso de las cosas, también mirar hacia la ecología de las cosas, no
solo de un artefacto, sino de sus implicaciones sociales. Mirar la dinámica actual de la vida
cotidiana, la normalización. Comprender la práctica como una unidad de análisis social. En
este sentido por ejemplo, “podría decirse que electrodomésticos como lavadoras de platos,
microondas y neveras han rediseñado la forma y el significado de la cocina, y

5. reconfigurado el orden y la organización de las rutinas domésticas. Del mismo modo, las
cámaras digitales han marcado una diferencia en la fotografía de aficionados, ampliando la
gama de situaciones fotogénicas y el contexto en el que las imágenes digitales son
compartidas y vistas” (Shove, 2008, p. 2).
El estudio de dicho tipo de fenómenos prácticos requiere de herramientas conceptuales y de
la buena competencia en el uso de diferentes métodos cualitivativos que exploren casos de
estudio de formación de la cultura material, tanto sincrónica como diacrónicamente, en el
caso de proponer una mirada etnográfica o histórica, respectivamente. Estas miradas son
posibles obviamente en el cruce de disciplinas, de la historia y la teoría social, del diseño y
las ciencias humanas, de la ciencia de los computadores y la teoría social, lo que se ha
empezado a ver reflejado en el surgimiento de los estudios del diseño, del design history, de
los estudios de cultura material, consumption studies, technological studies, innovation
studies, entre otros.
Si la manera como producimos, mediamos y consumimos ha sido sustancialmente
modificada por la idea de cambio continúo que soporta la dinámica de lo tecnológico, si las
maneras de relacionarse con el entorno diario se exponen cada vez más sobre las tensiones
que generan lo real versus lo simulado, lo material versus lo virtual, la desaparición de los
limites y la restitución de comunidades y subculturas, las preguntas en necesidad de
respuesta sobran.
Varias de las reflexiones que se proponen en este texto se establecen sobre la idea de un
cambio procesual y continuo dinamizado por la relación entre diseño, tecnología y cultura
material. Un cambio procesual que integra el proyectar, el construir y el reordenar o
apropiar a través de la re-significación de productos e imágenes que constituyen nuestro
entrono cotidiano y que puede redefinirse como la materialización de lo tecnológico a
través del diseño.
No sólo comprender sino participar del cambio

6. Si el diseño y la tecnología tratan la idea de cambio ¿Cómo y desde que lugar proponer una
ruta que nos permita no solo comprender ese proceso de cambio sino también participar en
él? La simple observación no participante y contemplativa no es suficiente para comprender
y sobre todo para participar de los cambios que propone la tecnología. El reto fundamental
que nos plantea la acelaración constante es entonces el de buscar estrategias para hacer
parte de estos cambios y direccionar los procesos de transformación en diferentes niveles y
tipo de organizaciones. La mejor manera de participar es proponiendo un puente que lleve
al diseño a moverse más hacia la investigación –desde, para y dentro- (Laurel, 2003) lo cual
permitirá comprender los modos a través de los cuales la tecnología se ha venido
implementando y proponer otros nuevos. Por otro lado se hace necesario que el
pensamiento tecnológico se deje permear por otras maneras de abordar problemas, describir
escenarios y enmarcar situaciones venidas más del diseño, herramientas que permitan
limitar y comprender posibilidades de innovación desde lo tecnológico así como también
desde la resignificación de prácticas cotidianas, es decir desde el diseño. El espacio de
encuentro propicio para estas dos formas de pensamiento son en el sentido más amplio los
procesos de innovación, los cuales pueden incluir transformaciones incrementales o
radicales y cambios en el sentido y significado de las relaciones sociales, como por ejemplo
propone el modelo de innovación de Roberto Verganti (Verganti, 2008). La innovación
como espacio común en donde la investigación tecnológica direcciona su sentido para
provocar cambios en los estilos de vida a través del diseño requiere de una visión del futuro
que rompa radicalmente la visión occidental de un tiempo lineal y de un desarrollo social
como un progreso evolutivo. Es tarea importante identificar los actores que lideran los
procesos de investigación tecnológica, las prácticas del diseño, las necesidades de la
industria, los planteamientos de políticas públicas en diferentes niveles y los usuarios y
consumidores. Mover el paradigma de la innovación hacia terrenos de cocreación y
participación cada vez más voluntaria.
Diseño y tecnología liderados por la innovación social
Si aceptamos la estrecha relación entre diseño, tecnología y cultura material ¿Cómo esta
relación afecta el proceso de creación de los diseñadores, el proceso de aproximación a los

7. clientes de la industria e incluso el proceso de enseñanza del diseño y la tecnología en
diferentes niveles de educación?
El proceso de creación de los diseñadores debe asumir el reto de proponer nuevas
definiciones para lo que han venido siendo temas centrales en el desarrollo tanto de la
práctica como del pensamiento. Se debe promover el investigar diferentes maneras de
comprender conceptos como valor, necesidad y utilidad (Shove, 2008) incluso algunos
otros como deseo, expectativa, consumo e intercambio; la constante reflexión sobre los ejes
centrales del diseño permitirán redefinirse en relación al contexto y su propia velocidad.
El preguntarse constantemente buscando ajustarse a la velocidad propia del entorno en
diferentes escenarios, tanto el académico como el corporativo y el institucional, exigirá a
las organizaciones implementar la idea de cambio constante en el core essence de las
mismas. Esto llevará a que las organizaciones se piensen como organismos vivos para
lograr ser más ágiles. Esta velocidad es necesaria tanto para absorber los cambios en las
prácticas cotidianas de los clientes, como para implementar avances tecnológicos dentro de
las organizaciones. El reto será que esto no se establezca de manera impositiva sino que la
estructura flexible de las organizaciones se adapte a estos cambios. Ejemplo de esto puede
ser el rompimiento del paradigma en donde las herramientas de investigación se concentran
en la fragmentación de grupos sociales como segmentos de mercado, para moverse hacia la
comprensión compleja y profunda de grupos sociales en términos de comunidades o
subculturas. Esto es reflejado en la implementación de herramientas de investigación de las
ciencias sociales con el ánimo de buscar interpretar escenarios y direccionar organizaciones
en los más altos niveles estratégicos. En este sentido la implementación de la tecnología
como vehículo para proponer relaciones sociales se vuelve un canal para lograr los
movimientos de información abierta y multicanal, lo cual encuentra utilidad tanto para
convertir los clientes externos en agentes más participativos como para promover el
compromiso de empleados, socios y otros stakeholders desde adentro de las organizaciones.
Si estas herramientas son de alguna manera implementadas por la industria, los
profesionales dedicados a implementar este tipo de cambios deberán estar preparados para
aproximarse proponiendo nuevas herramientas de investigación flexibles y dinámicas, que
permitan la toma de información y de decisiones en tiempo real. Estas herramientas deben

8. estar consolidadas desde lo formativo y debería incluir terrenos comunes en donde
conluyan la teoría y la práctica propias del diseño, la tecnología y la investigación social. El
reto en los diferentes niveles de educación sobrepasa la idea de transmitir un know-how, y
propone un reto mas grande que es lograr transmitir un think-how que permita
constantemente producir conocimiento. La preocupacion desde lo educativo en el diseño
será en los próximos años descubirir nuevas herramientas que le permitan a los futuros
profesionales comprender, representar y participar de los cambios que experimentamos en
nuestras vidas cotidianas.
Diseño y tecnología en otras lógicas de cultura material
Si estas esferas se integran cada vez más ¿Cómo esta relación afecta otras esferas de la
sociedad que responden a otras lógicas de formación de la cultura material tales como la
artesanía, el intercambio, el reuso y el reciclaje? Si la cada vez mas estrecha y aceptada
relación entre diseño y tecnología y el efecto del encuentro de estas dos en la formación de
nuestra cultura material contemporánea es evidente, lo será también el efecto que esta
dinámica particular de formación de nuestro entorno cotidiano tiene en formas dispares de
producción, distribución y consumo. Los modelos de pensamiento que se proponen desde
la artesania, el intercambio, el reuso y el reciclaje, entre otros, son naturalmente afectados.
El carácter de esta afectación dependerá del provecho que estas forma alternativas de
producción, distribución y consumo saquen del cruce entre diseño y tecnología. Ejemplo de
esto son tecnologías sociales que generar redes para localizar productores, distribuidores y
consumidores en lugares comúnes, pero en donde las comunidades se autocontruyen y
autoregular con el propósito de suplir necesidades y colmar expectativas a través del flujo
de mercancias. De la misma manera opera la construcción de identidades de marca
construidas sobre las asociaciones de stakeholders que participan en la formación de estas
de manera más voluntaria y participativa a través de la tecnología social. La relación entre
tecnología y diseño debe ser vista como una plataforma para que estas maneras de
formación de la cultura materia logren sus objetivos sin perder su carácter alternativo, y no
como una barrera impuesta por los modos de formación de la cultura material propias del
capitalismo industrial de los siglos XIX y XX.

9. Conclusión
En el panorama de esta reflexión se hace evidente que en el cruce entre el diseño, la
tecnología y su efecto en la formación de la cultura material contemporanea pueden surgir
gran cantidad de preguntas, muchas de ellas incluso obligarán a una redefinición de los
principios fundamentales de las disciplinas, la habilidad para proponer las preguntas
adecuadas e ir en búsqueda de las respuestas más precisas surge, entre otros, de la
teorización seria sobre el rol de los artefactos en la vida cotidiana. Se necesitan teorías
capaces de explicar el proceso de cambio acelerado en las prácticas de la vida cotidiana
contemporánea. Paola Antonelli propone que (Antonelli, 2008): “debido a su papel como
intermediarios entre investigación y producción, los diseñadores a menudo actúan como los
intérpretes principales en equipos interdisciplinarios, llamados no sólo a concebir objetos,
sino también a idear escenarios y estrategias. Para hacer frente a esta responsabilidad, los
diseñadores deberían establecer las bases de una sólida teoría del diseño, algo que hoy
todavía falta” (p. 15).
La necesidad por formular preguntas adecuadas lleva también a buscar respuestas desde el
design research. La investigación en, para y desde el diseño (Laurel, 2003) invita a
diferentes actores a pensar en conceptos, procesos y resultados, contemplando todas las
etapas del proyecto de diseño. También promueve la investigación en diseño desde una
mirada histórica y crítica, lo que últimamente se ha llamado design studies. Estamos en
necesidad de encontrar nuevos métodos más participativos y críticos para comprender y
explicar el diseño de sistemas y productos que alteran prácticas sociales, tanto en la vida
pública como la vida privada. Estas alteraciones son las que han venido dando forma a
nuestra cultura, no sólo material, sino social en general. Si entendemos esto, podemos
redefinir la dimensión del diseño y comprender más ampliamente el impacto del diseño y la
innovación, o para ser más precisos la dimension de la innovación a través del diseño,
responsable directo de las maneras como interactúamos y de las diferentes formas que
tomará nuestra sociedad en el futuro.

10. Referencias
Antonelli, P., & Museum of Modern Art (New York, N.Y.). (2008). Design and the elastic
mind. New York: Museum of Modern Art.
Latour, B. (2005). Reassembling the social: An introduction to actor-network-theory.
Oxford: Oxford University Press.
Laurel, B. (2003). Design research: Methods and perspectives. Cambridge, Mass: MIT
Press.
Shove, E., Watons, M., & Ingram, J. (2008). The design of everyday life. Oxford: Berg.
Vannini, P. (2009). Material culture and technology in everyday life: Ethnographic
approaches. New York: Peter Lang.
Verganti, R. (September 01, 2008). Design, Meanings, and Radical Innovation: A
Metamodel and a Research Agenda. Journal of Product Innovation Management, 25, 5,
436-456.