En 2016, las principales economías desarrolladas registrarán tasas de crecimiento decentes e incluso notables en el caso de EEUU, España (3,1%), Polonia (3%) y Reino Unido (2%). La primera potencia mundial creció a un ritmo anual del 2,9% en el tercer trimestre y ha alcanzado el pleno empleo con una tasa de paro del 4,9%.