El documento discute el alto costo de la Thermomix y cómo su valor no se justifica solo por su uso culinario, sino también por su valor simbólico como signo de estatus social. Aunque la Thermomix es cara, algunas personas se sienten presionadas a comprarla para no parecer de menor estatus que sus amigos. Sin embargo, el documento argumenta que para personas de alto estatus económico como el destinatario y su esposo, no es necesario demostrar su riqueza comprando la Thermomix.

1. Yo creo que la Termomix es un utensilio de cocina carísimo. Si tú te compras una sartén de 60
euros, para que el uso de una comida cocinada con él te salga a un euro necesitas usarla al
menos sesenta veces. Si quieres que el batido, el pure, el hielo picado que haces en la
Termomix te salga a un euro tienes que usarla 1000 veces. ¡Ya te vale!
Por eso creo que si nos atenemos únicamente a su uso mucha gente que tiene la Termomix no
la amortiza debidamente. Si atendemos solo a su uso. Pero es que los bienes –todos ellos- no
solo tienen un uso. También tienen una significación social. Con esto me refiero a lo que los
bienes “visten” a quien los tiene. El prestigio o el desprestigio –según el caso- que dan a su
dueño. El fardar, vamos.
Desde este punto de vista la Termomix viste mucho y no digo que se compre para eso pero se
compra TAMBIÉN para eso. Y desde luego SOLO para picar el hielo para el mojito sale a pelo
p***.
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¿Qué es un signo ostensible de riqueza? Algún bien que claramente muestra a los demás que
su poseedor tiene un estatus elevado económicamente. En su momento, cuando todas las
teles eran en blanco y negro era un signo ostensible de riqueza tenerla en color. Todo esto es
relativo y los bienes simbólicos van cambiando con las épocas y supongo que hay diferentes en
las distintas clases sociales. Cuando yo era un chaval, jugar a tenis o esquiar era un signo
ostensible de riqueza porque ambos deportes costaban un pastón y no todo el mundo podía
hacerlo. Ahora eso ya no es así. Ahora creo que es jugar golf o yo que sé.
A veces este tipo de signos de riqueza eran para los nuevos ricos. Es decir aquellos que habían
ascendido recientemente y tenían que mostrar a los demás rápidamente que eran ricos. El rico
de verdad no necesitaba cuidar tanto la apariencia porque nadie dudaba que era rico.
Determinada marcas exclusivas -un bolso de Luis Vuiton- son claros signos de riqueza-
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Esto es lo que yo decía (más desarrollado) en la primera parte de mi guasap. ¿Y por qué a
continuación te nombraba a ti y qué decía sobre ti?
Decía casi textualmente “Pensando en este último factor –los signos de riqueza-, y te
nombraba por tu nombre, yo no me la compraría. Vosotros ya tenéis otros.
Creo que a nadie se le escapa que tu marido y tú sois una de las parejas que tenéis más alto
status económico dentro de los hijos de I. Hablar de dinero no está bien visto y no sé si decir
esto de modo tan claro es signo de mal gusto pero tengo que decirlo si quiero explicarlo. Por
esta razón, como nadie duda de vuestro nivel de riqueza, no tenéis que demostrar nada a
nadie. Puede que una mujer de clase media se sienta un poco incómoda si todas sus amigas
tienen la Termomix y ella no tiene presupuesto para comprarla. Tú, no podrías sentirte
incómoda de ningún modo porque todo el mundo sabe que si no la tienes es porque no

2. quieres. Todos sabemos que tienes otras cosas que lo demuestran. Tú misma mencionas
algunas en lo que escribiste.
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Mi experiencia con la gente –pero a lo mejor trato con gente muy rara- es que muchas veces la
gente compra cosas o tiene cosas no para ser más que nadie sino para no ser menos. Es decir,
hay que tener –al menos- lo mismo que los vecinos.
Creo que no entendiste lo que decía. No es que yo te viera a ti especialmente proclive a
comprar cosas para fardar ni especialmente presumida. Unamuno decía: el que se da
importancia será porque lo necesita. Yo decía que precisamente porque nadie cuestiona tu
elevado status económico no necesitas fadar especialmente de nada. Querer aparentar es,
muchas veces, un sustituto del auténtico ser. Pero si se es, no tiene uno que esforzarse en
parecerlo.
Así que lo repito: como elemento de cocina es carísimo y como modo de presumir (el único
modo amortizable para mucha gente) no lo necesitas.
Ahora, si, os parece, sus mosqueáis las demás.
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Y con respecto al hecho mismo de presumir yo no lo veo como algo estúpido, sino como algo
muy común en muchísima gente. Estamos hechos de esa pasta. A la gente no nos es suficiente
con tener o hacer las cosas sino que además, si son cosas “envidiables”, nos gusta que los
demás lo sepan. Y por eso lo vamos contando y lo mostramos. Y a mí me gusta mucho poder
leer una novela en inglés, y disfruto haciéndolo, pero ADEMÁS me gusta que se sepa que
puedo hacerlo. Y se lo digo a todo el que puedo. Pa fardar. Y coincido con lo que decía Chuchi,
viajar hoy en día es un signo de riqueza. Sobre todo determinados viajes. Los hay que indican
más riqueza y otros menos. Y la gente no viaja solo para fardar, pero poder fardar es una
motivación más del viaje, aunque sea inconsciente. Te puede interesar muchísimo la China y
vas allí por eso pero nadie es ignorante de que viajar a la China viste mucho. (con kimono, jeje)
Eso sí, con esto de fardar pasa una cosa. Del mismo modo que nadie reconoce que compra las
cosas porque lo ha visto en la publicidad, nadie reconocerá nunca que hace algo para presumir
o porque se lo vió al vecino. Esas cosas se hacen de modo inconsciente y uno no suele
reconocer que le importa la opinión que los demás tienen de él. Pero igual que la publicidad
funcionan sabemos que a la gente le gusta presumir. Y resulta que nosotros, nos guste o no,
somos una parte de la gente.