La identidad se refiere al sentido que una persona le da a sus acciones y percepciones, y es aquello por lo que se siente a sí misma en un lugar y tiempo determinados. Los rituales de confirmación sellan la identidad al confirmar y unificar la concepción que cada persona tiene de sí misma. La identidad proporciona una fuente de fortaleza ideológica a través de un sistema de ideas que brinda una imagen convincente del mundo.