El documento habla sobre la solidaridad con Haití después del terremoto de 2010. Discute que la vida no nos pertenece a nosotros mismos, sino a Dios, por lo que los desastres inevitables muestran que dependemos de Él. También dice que Jesús se entregó por nosotros aunque Él es el dueño de nuestro tiempo, mostrando Su bondad. Finalmente, cita al Papa Benedicto XVI haciendo un llamado a la generosidad para ayudar a Haití, y a Luigi Giussani sobre la

1. HAITÍ: SOLIDARIDAD, SIN DEMORA Cena a beneficio de Haití Jueves 28 de Enero 2010. Ayuda coordinada por Caritas Chile MOVIMIENTO CATÓLICO COMUNIÓN Y LIBERACIÓN

2. Nuestra vida pertenece a Otro Cuando algo inevitable sucede, se pone de manifiesto que nuestra vida no est á en nuestras manos

3. “ Inevitable” es el t é rmino que mejor clarifica que nada nos pertenece, y, sobre todo, que no nos pertenece aquello de lo que deriva todo.

4. Nuestra vida pertenece a Otro

5. En este sentido, se comprende por qu é la vida del hombre es dram á tica.

6. Si no perteneciera a Otro, sería trágica.

7. Todo en la vida estaría abocado a la nada.

8. La tragedia se produce cuando una construcción se derrumba y todas las piedras, las tapias, los muros se hunden.

9. No se mantiene en pie nada de lo que hab í a antes,

10. No se mantiene en pie nada de lo que habíamos vivido hasta hace una hora, hasta hace cinco minutos.

11. Y esto es t rá gico. La tragedia es la nada como meta, la nada de lo que existe.

12. En cambio, si todo pertenece a Otro, a Algo distinto, entonces la vida del hombre no es tr á gica, es dram á tica

13. “ Reconozco que te pertenezco, reconozco que el tiempo no es mío, que no me pertenece,

14. que el tiempo que he vivido hasta hoy no me pertenecía.

15. Toma mi vida, reconozco que no me pertenece, acepto que no me pertenezca”.

16. El que posee nuestro tiempo se ha entregado por nosotros;

17. Se presenta ante nuestra mirada y nuestro cora zó n como el que ama nuestro destino,

18. é l que ama nuestra felicidad,

19. hasta el extremo de que el Se ñ or del tiempo muere por nuestro tiempo.

20. El Se ñ or , Aquel a quien pertenece el tiempo, es bueno.

21. HAITÍ: SOLIDARIDAD, SIN DEMORA "Hago un llamamiento a la generosidad de todos, para que a estos hermanos, que viven un momento de necesidad y de dolor, no falte nuestra solidaridad concreta y el apoyo efectivo de la comunidad internacional". Benedicto XVI “ Cuando compartimos la real necesidad, traspasamos la primera reacción de impotencia frente al dolor que nos detendría. No podríamos hacerlo solos por eso necesitamos alguien que nos lo recuerde y amigos que decidan acompañarnos.” Luigi Giussani