2. PAUTAS BÁSICAS.
Encuentro con Dios
precede a la sujeción
Hech 9:3-6.
Todo hijo de Dios esta
capacitado para
reconocer la autoridad,
someterse a ella y
obedecer.
3. PAUTAS BÁSICAS.
Dispuesto a sufrir antes
de quebrar la autoridad
Luc 22:42; Fil 2:8.
Nada debe impedir el
obedecer con la actitud
correcta.
No es sacrificio sino
ofrenda de amor como
demostración de
gratitud
4. PAUTAS BÁSICAS.
La evidencia de que se
es hijo de Dios es la
obediencia Mat 7:21-
23.
La voluntad de Dios es
que hagamos Su
voluntad en todas las
áreas de nuestra vida
Sal 40:8.
5. PAUTAS BÁSICAS.
Verificar las actitudes en tu
vida: Aquellas que se oponen
a la sujeción y la obediencia
deben ser confrontados con la
verdad de Dios Sal 139:23-24.
Aprender a reconocer que los
que detentan autoridad
pueden equivocarse, no por
eso se le debe perder el
respeto.
6. PAUTAS BÁSICAS.
Verificar las motivaciones
que determinan tu
conducta para con la
autoridad Hech 8:18-24;
Fil 1:15-18.
Rechazar toda actitud que
sea inadecuada a nuestro
Dios.
Desarrollar las actitudes
que son correctas.
7. PAUTAS BÁSICAS.
Evalúa los resultados
de tu estilo de vida
ante la autoridad
Bendición de Dios
Det 28:1-2
Juicio de Dios Det
28:15
8. PAUTAS BÁSICAS.
Arrepentirse de las actitudes
contrarias a la sujeción y
obediencia a la autoridad
Este arrepentimiento debe
llevar a la confesión de los
pecados 1 Jn 1:8-9.
En ciertos casos, conversar
con la autoridad para
restaurar el corazón de quien
se ha quebrado el principio
de autoridad.
9. PAUTAS BÁSICAS.
Renunciar a todo espíritu
de rebelión que esta
tomando control de la
conducta.
Renunciar implica que le
negamos al Diablo
derechos sobre nuestras
vidas.
10. PAUTAS BÁSICAS.
Decidir día a día la
verdad que estamos
aprendiendo.
La practica de la
verdad determinara la
formación de nuevas
actitudes.
Hech 9:3-6 RV95 Pero, yendo por el camino, aconteció que, al llegar cerca de Damasco, repentinamente lo rodeó un resplandor de luz del cielo; 4 y cayendo en tierra oyó una voz que le decía: —Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? 5 Él dijo: —¿Quién eres, Señor? Y le dijo: —Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón. 6 Él, temblando y temeroso, dijo: —Señor, ¿qué quieres que yo haga? El Señor le dijo: —Levántate y entra en la ciudad, y allí se te dirá lo que debes hacer.
Luc 22:42 DHH Se alejó de ellos como a la distancia de un tiro de piedra, y se puso de rodillas para orar. 42 Dijo: «Padre, si quieres, líbrame de este trago amargo; pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya
Fil 2:8 DHH se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, hasta la muerte en la cruz.
Mat 7:21-23 RV95 No todo el que me dice: “¡Señor, Señor!”, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.22 Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?”23 Entonces les declararé: “Nunca os conocí. ¡Apartaos de mí, hacedores de maldad!”
Sal 40:8 DHH A mí me agrada hacer tu voluntad, Dios mío; ¡llevo tu enseñanza en el corazón!
Sal 129:3-4 DHH Oh Dios, examíname, reconoce mi corazón; ponme a prueba, reconoce mis pensamientos; 24 mira si voy por el camino del mal, y guíame por el camino eterno.
Hech 8:18-24 DHH Simón, al ver que el Espíritu Santo venía cuando los apóstoles imponían las manos a la gente, les ofreció dinero, 19 y les dijo: —Denme también a mí ese poder, para que aquel a quien yo le imponga las manos reciba igualmente el Espíritu Santo. 20 Entonces Pedro le contestó: —¡Que tu dinero se condene contigo, porque has pensado comprar con dinero lo que es un don de Dios! 21 Tú no tienes ningún derecho a recibirlo, porque delante de Dios tu corazón no es recto. 22 Abandona esta maldad tuya, y ruega a Dios, para ver si te perdona el haber pensado así.23 Porque veo que estás lleno de amargura y que la maldad te tiene preso.
Fil 1:15-18 DHH Es verdad que algunos anuncian a Cristo por envidia y rivalidad, pero otros lo hacen con buena intención.16 Algunos anuncian a Cristo por amor, sabiendo que Dios me ha puesto aquí para defender el evangelio; 17 pero otros lo hacen por interés personal, y no son sinceros, sino que quieren causarme más dificultades ahora que estoy preso.18 Pero ¿qué importa? De cualquier manera, con sinceridad o sin ella, anuncian a Cristo; y esto me causa alegría. Y todavía me alegraré más
Det 28:1-2 DHH Si de veras obedeces al Señor tu Dios, y pones en práctica todos sus mandamientos que yo te ordeno hoy, entonces el Señor te pondrá por encima de todos los pueblos de la tierra. 2 Además, todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te alcanzarán por haber obedecido al Señor tu Dios.
Det 28:15 DHH Pero si no obedeces al Señor tu Dios, ni pones en práctica todos sus mandamientos y leyes que yo te he ordenado hoy, vendrán sobre ti y te alcanzarán todas estas maldiciones
1 Jn 1:8-9 DHH Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no hay verdad en nosotros; 9 pero si confesamos nuestros pecados, podemos confiar en que Dios, que es justo, nos perdonará nuestros pecados y nos limpiará de toda maldad.