2. 1. Establece limites claros y
sencillos
Es muy importante que los niños
comprendan claramente las nomas (sin
confusiones).
“Solamente puedes ver una caricatura y
luego te vas a la cama.”
3. 2. Cuando pongas un límite
obedécelo a toda costa
Asegúrate siempre de hacer cumplir la
norma.
Si dices que solo permites una
caricatura, permite solamente una
caricatura, no dos o tres.
4. 3. Nunca te rindas a las
súplicas
Cuando accedes a las súplicas estás
enseñando al niño a suplicar, a
lloriquear y a insistir.
5. 4. Haz que tu hijo te convenza
Cuando tu hijo quiera algo de ti permite
que te convenza. Déjalo que te dé
buenos motivos.
Si quiere ir al parque y ya hizo su
tarea, tal vez quieras dejarlo ir.
6. 5. Exige que cumpla sus
obligaciones antes de jugar
No le haces un favor cuando eres
demasiado permisivo.
7. 6. No temas decepcionarlo
A veces es difícil defraudar a nuestro
hijo. Sin embargo las pequeñas
desilusiones fortalecen su carácter y lo
entrenan para problemas mayores de
la vida.
8. 7. Deja que se esfuerce para
conseguir lo que quiere
Es importante permitir que nuestro hijo
se esfuerce para conseguir lo que
quiere y por tanto le dé valor.