1. La gaceta 13 de septiembre de 2010 11
MARTHA EVA LOERA
C
uentan que es amiga de la
penumbra, su figura fantas- Cinco siglos
delágrimas
mal sigue recorriendo ca-
minos solitarios, barrancas,
calles y callejones oscuros; el paso
de los siglos no ha podido mitigar su
honda pena, la Llorona sigue viva en
el imaginario popular, muchos creen
haberla visto. Cuentan que todavía
lamenta la muerte de sus hijos.
Algunos dicen que se llamaba Jua-
na Canana, una madre soltera del ba-
rrio de Dolores, ubicado en la Ciudad
de México, que por matar a sus hijos, 4 Publicidad
del casting que
después de morir, fue condenada a va-
gar por toda la eternidad. En San Luis se desarrolló en
Potosí hay quienes la identifican con agosto para una
el nombre de Lucía y otros creen que nueva versión
se trata de doña Marina, la mal llama- de La Llorona
da Malinche. Cuentan que al morir que se prepara
doña Marina fue condenada a penar actualmente en
por haber traicionado a los de su raza. Hollywood.
El mito de la Llorona es parte de Foto: Archivo
la cultura mexicana. Existen figuras
iguales o equivalentes en Chile, Ve-
nezuela, Costarrica y Panamá, ex-
plica Bogar Armando Escobar Her-
nández, profesor investigador del
Centro Universitario de Ciencias
Sociales y Humanidades (CUCSH).
Este académico no descarta la
idea de que se haya difundido de
México a otras partes de Centroamé-
rica y Sudamérica. Los mitos tratan
de explicar al mundo y cumplen una
función y didáctica social. En el caso
de la Llorona, mito muy difundido en
la época Colonial, advertía a las mu-
jeres sobre las consecuencias de vivir
con un hombre sin casarse y desqui-
tar sus frustraciones con los hijos, era El mito de la Llorona llegó de la Ciudad de México y
una especie de freno para ellas.
Ahora el mensaje no tiene el se instauró en la provincia. Aleccionar a la mujer ante
mismo impacto en las nuevas gene-
raciones. La manera de pensar en posibles faltas morales, el mensaje oculto que han
torno al matrimonio y la sexualidad
ha sufrido cambios, sobre todo en el detectado los antropólogos en la actualidad
medio urbano. Sin embargo, el mito
sobrevive, por ser parte de un legado donó a su hijo Mixcoatl. La tradición con un español. Él nunca se casó con Después de que el mito de la Llo-
cultural, ya que todavía prevalecen dice que regresaba frecuentemente al ella. En venganza ahogó a los hijos de rona se fortaleció en el ámbito urbano,
en ciertos ámbitos las maneras de lugar donde lo dejó para llorar por él. ambos y por eso penaba. El relato ha- en el siglo XVII pasó al medio rural
pensar tradicionales y porque “el ser Miguel León Portilla, en La vi- bla también del mestizaje biológico y donde a la historia se le dio un nuevo
humano necesita creer, imaginar y sión de los vencidos, hace referencia cultural entre españoles e indígenas, giro. Se trata de una joven de un pue-
desbordar la realidad, crear mundos a Cihuacóatl, que de acuerdo a los detalló el investigador de la UdeG. blo, que en la ciudad es engañada y
alternativos que otorgan otras posi- informantes de Bernardino de Sa- En la segunda mitad del siglo mancillada. Ella regresa a su lugar
bilidades de vida, de conciencia y de hagún y al Códice Florentino, antes XVI, en la Ciudad de México, había de origen y por temor al castigo de
percepción. Esa necesidad es intrín- de la llegada de los españoles, pre- gente que narraba que al toque de sus padres ahoga a su hijo en un río.
mito
seca al hombre y no va a cambiar”. sagió la caída de la gran Tenochtit- ánimas, alrededor de las once de la La Llorona tuvo su mayor auge a me-
lan. “Ella lloraba y gritaba por las noche, una mujer vagaba por la ciu- diados del siglo XVI y durante el siglo
En tiempos de la Colonia noches: ‘¡Hijitos míos, pues ya tene- dad sin que sus pies tocaran el sue- XVII. El mito se extendió del centro a
El antecedente primigenio de la Llo- mos que irnos lejos!’ A veces decía: lo. Gritaba: “¡Ay mis hijos!” Decían todo el país. El manejo de la electrici-
rona se remonta a tiempos prehispá- ‘Hijitos, ¿a dónde los llevaré?”’ que portaba un vestido blanco, a dad para beneficio del hombre fue un
nicos. La diosa Cihuacóatl era mitad Al parecer, Los españoles adapta- veces transparente. Algunos afirma- avance tecnológico que influyó en su
mujer y mitad serpiente, era protec- ron a su cultura el mito de Cihuacóatl. ban que desaparecía rumbo al lago transformación. Perdió fuerza en las
tora de los partos y de las mujeres Después de la conquista se hablaba de de Texcoco, por lo que se le empezó ciudades, pero en el ámbito rural to-
que morían durante éste. Ella aban- una mujer indígena que tuvo amoríos a vincular con cuerpos de agua. davía es cobijada por la noche. [