Por amor nos llamó Dios a la vida, por amor nos envió a su Hijo y por amor nos sigue ofreciendo su amistad, que es para nosotros fuente de vida y de todo bien a pesar de nuestros continuos y reiterados abandonos, desalientos y traiciones. Y aunque Dios no tiene ninguna obligación su amor, su apasionado amor por el hombre, es lo que le hace ponerse de nuestra parte y ofrecernos su amistad. Ahora, con la confianza y el gozo de sabernos salvados, amados irrevocablemente por Dios nuestro Padre, Celebremos su día, el Día del Señor. Pbro. John Dalffer Salazar Director Pereira – Colombia 2012