El documento propone 6 pasos para mejorar el futuro de Argentina: 1) independencia de poderes, 2) un sistema de partidos fuerte y estable, 3) una economía que promueva la equidad y la justicia social, 4) fomento de las economías regionales y las autonomías provinciales, 5) abordar la inseguridad mediante políticas de prevención e inversión, y 6) promover la inclusión e igualdad erradicando la pobreza. El objetivo general es construir un país con un gobierno justo que mejore las oportunidades y
FRENTE RENOVADOR CABA: 6 pasos para el próximo futuro.
1. 6 PASOS PARA EL PRÓXIMO FUTURO
Los argentinos nos hemos acostumbrado a carecer de políticas de mediano y largo
plazo, a no poder pensar estratégicamente nuestro presente y así nuestro futuro. Nos
hemos acostumbrado a ver cómo se malgastan recursos públicos y cómo el resultado
del esfuerzo cotidiano se diluye en manos de funcionarios/as improvisados, escasos
de formación y vocación de servicio.
Nos parece natural, también por acostumbramiento, vivir en la incertidumbre, sin
reglas claras. Nos parece natural vivir con inseguridad y sin oportunidades. Con una
educación mediocre y sin perspectivas. Con niños, abuelos y familias enteras
padeciendo porque no tienen un hogar digno donde vivir junto a su familia.
Quienes somos hijos de la democracia hemos visto correr mucha agua debajo del
puente: hombres y mujeres de distintos espacios, con diferentes ideas y relatos.
Hemos visto muchos aciertos, disputado batallas y realizado sueños, pero también
hemos sido testigos de la desidia, la avaricia y la incompetencia de muchos que nos
han depositado en el letargo en el que estamos.
Pero (en esto) nada es natural y mucho menos por costumbre. Lejos de resignarnos y
consolarnos con el rol de meros espectadores, un amplio número de jóvenes con
orígenes, tradiciones y militancias diversas queremos hacernos cargo de nuestro
presente para construir un futuro mejor, como el que soñaron nuestros padres y
abuelos.
Somos jóvenes y militantes que queremos expresar una nueva forma de entender y
hacer política. Nueva no por nuestra condición de jóvenes (hemos visto cómo, en
nombre de lo nuevo, se pueden reproducir las peores viejas prácticas). Sino nueva en
valores, nueva en propósitos, nueva en sentidos.
Nos sumamos a este espacio que lidera Sergio Massa, el FRENTE RENOVADOR, porque
expresa la oportunidad de construir un país en serio. Construir sobre los aciertos y
2. cambiar lo necesario para evitar que muchos argentinos, en los comienzos del siglo
XXI, continúen sumergidos en la pobreza.
Somos conscientes del cambio de época, de la necesidad de re-definir herramientas,
objetivos y metas. Y también somos conscientes de las necesidades, imperiosas, de
quienes resultaron y resultan víctimas de un modelo injusto. Creemos en la solidaridad
y en la buena fe. Creemos en el amor por el prójimo y en la concordia. Y creemos que
nadie puede decidir por el pueblo lo que el pueblo quiere y necesita: creemos, como
parte de él, que el pueblo es el sujeto político por excelencia y por consecuencia motor
de las transformaciones.
Tenemos la experiencia, las ganas y la formación para construir un espacio colectivo
de reflexión, debate, intercambio de ideas y propuestas que nos permita ofrecer a la
sociedad a lo largo y a lo ancho de todo el país, desde la Quiaca hasta Tierra del
Fuego y desde Cuyo hasta el Río de la Plata, un proyecto que transforme de una vez
y para siempre los destinos de la Patria. Somos protagonistas de proyectos de gestión
exitosos, y eso nos incentiva a trabajar fervorosamente para reproducir esas
experiencias en otras escalas.
Porque mejor que decir es hacer y mejor que prometer es realizar, lejos de
confortarnos con el tentador yugo de la victoria y convencidos de que éste no es el
punto de llegada, sino el de partida hacia una Argentina mejor, anunciamos nuestro
compromiso y esfuerzo para trabajar en la consecución de los siguientes ejes
centrales del país por venir:
1.
INDEPENDENCIA DE PODERES
Queremos un sistema político emancipado de poderes fácticos. Que en ese
sentido, atestigüe la división republicana de poderes: una Justicia
independiente del poder político; un Congreso libre de los dictados del
Ejecutivo y cuyo único mandato sea el voto soberano del pueblo; un
Ejecutivo que gobierne por y para la gente y no conforme el interés de
grandes corporaciones.
Un Estado que dé la cara ante la sociedad: al dictar una sentencia como al
alzar su mano para sancionar una ley cada funcionario/a debe rendir
cuentas. Mientras el acceso a la información, la transparencia de los actos
de gobierno y en fin, la soberanía del pueblo se vean afectados, la eficiencia
de Estado será sólo una ilusión.
Esto también es prevenir y combatir la posibilidad de cualquier corrupción.
Porque en una república como la nuestra, que pretende ser federal, toda
concentración de poder sólo es posible a través de manejos oscuros.
3. 2.
SISTEMA DE PARTIDOS
La falta de previsibilidad conlleva inestabilidad. Trabajaremos por un sistema
de partidos fuerte y estable: no añoramos los esquemas de partidos del
pasado, sino que al andar esperamos construir el más acorde con los
nuevos tiempos.
Las consecuencias del 2001 y las causas profundas de aquel estallido
calaron hondo en nuestra cultura política: hacen falta partidos que sean
perceptivos de las expectativas sociales, ágiles para la respuesta y flexibles
al cambio. Pero una agilidad que no pierda de vista que cuando las reglas de
juego permanecen, ganamos todos los argentinos.
3.
UNA ECONOMÍA HACIA LA EQUIDAD Y LA JUSTICIA.
Bregaremos por un modelo que procure equidad y justicia social en una
comunidad de hombres y mujeres libres. Creemos en un Estado activo que
no sólo garantice reglas de juego. Creemos en un Estado que estimule la
productividad, la eficiencia y la inclusión de todos/as. Un estímulo que no se
limite a un oscuro festival de subsidios.
De cara al futuro, los trabajadores y productores son incuestionablemente lo
necesario. Y los pobres y excluidos son necesariamente lo apremiante.
Si nuestra mirada apunta al mundo será para prestar atención a esos
nuevos horizontes que hoy despliega. Pero nuestro eje siempre será el
pueblo argentino y la región latinoamericana como cuestión estratégica.
4.
FOMENTO DE LAS ECONOMÍAS REGIONALES Y DE LAS AUTONOMÍAS PROVINCIALES.
En la última década del siglo XX la Nación delegó funciones administrativas
en los estados provinciales. Pero la lógica de mercado que entonces
dominaba acabó con las economías regionales y agudizó las asimetrías
provinciales.
En los últimos años fuimos testigos de cierta recuperación de aquellas
economías regionales con apoyo y fomento obrados desde el gobierno
central. Sin embargo, lo que se ganó en recuperación económica se perdió
en autonomía política.
Repetir, sea con nuevos nombres o actitudes, la antigua partición entre el
puerto y el interior atenta contra el federalismo que profesamos y que
todavía nos queda por construir.
4. 5.
SEGURIDAD: ATENDER LA URGENCIA Y ABRIR LOS OJOS.
La inseguridad recoge causas profundas que requieren de un abordaje
interdisciplinario y un rol activo del Estado. Con injusticia no hay seguridad.
Con corrupción no hay seguridad.
Mediante una fuerte inversión pública deben destinarse los mejores recursos
para combatir las redes nacionales e internaciones de narcotráfico, trata y
otros crímenes organizados que operan en el país.
La ley debe ser cumplida y deben garantizarse sólidas políticas de
prevención.
6.
JUSTICIA SOCIAL: PROMOVER INCLUSIÓN E IGUALDAD
Tenemos que erradicar la pobreza para que haya desarrollo integral. Junto a
una equitativa redistribución de la riqueza, tenemos la convicción de que la
promoción y el fortalecimiento comunitario puede generar mayor inclusión.
Debemos invertir en las nuevas generaciones, que hoy se encuentran en
situación de vulnerabilidad, inculcar en ellos nociones de JUSTICIA, IGUALDAD,
SOLIDARIDAD y RESPETO. Formar bases sólidas. Buscar que cada uno pueda
desarrollar su máximo potencial, poniendo el acento en el DESARROLLO
INTEGRAL.
Nuestros niños y jóvenes son la prioridad: en ellos debemos invertir hoy para
lograr un mañana mejor.
QUEREMOS LANZARNOS A SOÑAR Y A TRANSFORMAR.
A SOÑAR con racionalidad.
A TRANSFORMAR con prudencia, con voluntad y con responsabilidad.