Que es el Humanismo empresarial

RAFAEL
ALVIRA

¿QUE ES
EL HUMANISMO EMPRESARIAL?

CUADERNOS
EMPRESA Y HUMANISMO
I N S T I T U T O

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¿QUE ES EL HUMANISMO EMPRESARIAL?
RAFAEL ALVIRA

Es un lugar común, expresado de mil por todo? ¿Qué es ese todo?, además ¿Lo 2
CUADERNOS EMPRESA Y HUMANISMO Nº 17

maneras diversas desde los siglos pasados conoce alguien? No me interesa más que lo 15
hasta hoy, que el ser humano posee una cierta que hago: paso de los demás. En todo caso, me
universalidad, una amplitud sin igual entre los interesa el éxito, el poder, el placer. El resto son
seres que pueblan la tierra. Como se suele historias.
decir, el hombre es un ser racional. Aún más: el
El que en el fondo piense así -y hay tantos-
ser humano es, entre todos los pobladores del
concibe la vida como un pasar que hay que
mundo, el único que necesita saber quién es
pasar, o desde un punto de vista individualista.
para ser. Un elefante actuará por instintos.
Nosotros actuamos por costumbres adquiridas, Pero no tiene un interés por el hombre,
desde luego, pero luego somos la imagen que porque no le interesa la sociedad.
nos hemos hecho de nosotros mismos, hasta
Uno que está haciendo de todo, o que le da
cierto punto.
igual de todo, se identifica con el que busca el
El problema está en que la amplitud de poder, el brillo y el placer en una cosa al
nuestro ser dificulta el que seamos conscientes menos: a saber, que no le interesa la otra
de todo lo que somos. Por eso, nuestra incli-
persona. Ahora bien, eso es lo mismo que decir
nación va pareja con nuestra unilateralidad.
que no la necesito, que no me hace falta. En
Estar inclinados a algo es lo mismo que decir:
todo caso, me hace falta instrumentalmente,
nos unilateralizamos.
para mis fines, pero no en sí.
Nacemos siendo hombres, pero aún no
Si esto es así, yo he de ser forzosamente uni-
humanos. La humanidad se adquiere. Si no nos
lateral -es decir, inhumano-, pues el modo prin-
educamos, somos unos «animales». Así pues el
cipal que tengo de completarme no soy yo
problema es llegar a ser humanos. Y eso sólo
lo conseguimos si desarrollarnos, al menos mismo -que no llego a todo-, sino la sociedad.
algo, las diferentes posibilidades a las que Me parece, entonces, que el famoso huma-
estamos abiertos. Ser humano es lo mismo que nismo es, sobre todo, un societarismo: el
superar la unilateralidad, hombre es humano «si y sólo si» como diría un
lógico, es capaz de tomarse en serio la
Y en este momento muchos desconectarán
sociedad.
¿cómo podríamos saber de todo o interesarnos


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Querámoslo o no, todos estamos empe- 3
tismo. Y sin duda lo peor es que en no pocos

ñados en construir o destruir la sociedad, pues casos es una forma -refleja o no- de cinismo.
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ese mínimo de humanidad que tenemos lo Como decía al principio las inclinaciones son
hemos recibido precisamente porque hay
constitutivas. Pero hay muchos que -tras darse
sociedad. En la medida en que pasamos a
cuenta de ello- no saben como avanzar, les
actuar a espaldas de ella, por intereses mera-
falta claridad y precisión para construir prácti-
mente particulares, producimos el escándalo, -
camente esa universalidad propia del hombre.
pues los demás esperaban que devolviésemos
Por eso, siempre ha habido necesidad de direc-
la humanidad recibida con acciones humanas-
tivos en la sociedad: personas que tienen esa
y rompemos la sociedad. Es lo normal buscar el
capacidad de saber conectar de una manera
propio interés, pero buscar sólo el propio
práctica la pluralidad de dimensiones humanas
interés es la esencia del escándalo. Y ello,
y, de ese modo, universalizar. Es decir, los que,
insisto, por la razón ya apuntada de que el
a través de su actividad directiva, organizan la
hecho de necesitar al otro empuja a responder,
sociedad como tal o, dicho de otro modo,
es decir, a agradecer. Si no lo hago, estoy des-
humanizan el hombre, pues, como he dicho,
haciendo o desintegrando lo que de humano
sin sociedad el hombre no es humano.
hay. Por eso, toda labor humanística es
también un trabajo de integración, y la edu- Por eso es un problema fundamental que los
cación humanística, como tantas veces se ha dirigentes organicen bien, pues en absoluto es
dicho, una educación integral, que no quiere lo mismo un tipo de estructura que otro. Si
decir tanto el saber de todo cuanto el nadie debe actuar sólo y meramente por el
aprender a descubrir cómo necesitamos a los propio provecho, esto afecta de un modo muy
otros. Dicho de otra manera, desarrollar la especial a los que dirigen, pues en sus manos
finura de espíritu, frente a la zafiedad hoy rei- está en buena medida el poner las condiciones
nante. para el crecimiento humano. La actividad
directiva ha de ser esencialmente magnánima
Ya Ortega y Gasset lo vio, entre nosotros y a
y, por ello, han de ser seleccionados los
su manera, con su famoso dicho de la barbarie
mejores para desempeñarla. Se trata de la ver-
del especialismo. Pero ahora el problema es
más grave: se trata de la barbarie del paso- dadera aristocracia.


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Toda sociedad ha necesitado siempre un 4
matrimonios entre personas de una casta y
grupo de hombres cuya función social es la de otra, porque ello produce la movilidad social y,
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organizar e integrar la sociedad. Como son las con ella, todos los desórdenes.
personas en las que, lógicamente, se fijan los Pero, como la modernidad ha intentado
demás, tienen también una función estética o simetrizar al Antiguo Régimen, ha cometido
ejemplar que cumplir. Son las funciones por los mismos dislates, sólo que con una justifi-
excelencia de la aristocracia: ella es la clase de cación diametralmente contraria: el recurso al
la organización y la estética, o, si se quiere, de futuro. El aristócrata de la nueva sociedad fue
la ética y de la estética. el gran fabricante, empresario o capitalista. Sin
Siempre que una aristocracia cumple mal o duda él es el que ahora organiza la sociedad. Y
deja de cumplir sus funciones, se produce un ello por la simple razón de que un conde o un
malestar social, que puede llegar hasta la revo- marqués unificaba la población agraria dis-
lución. Como es bien sabido, una clave de la persa, pero ahora lo que unifica y organiza a
revolución francesa fue que la aristocracia los hombres es la empresa. Por ello el burgués
había dejado de cumplir una función auténtica poderoso pasó a ser también la figura en la
y se había inclinado hacía la degeneración de que se fijaba toda la población.
ella: en vez de organizar la sociedad -que es un Ahora bien, la historia de la nueva sociedad
servicio había aceptado el poder como privi- mostró que las cosas, en el fondo, no habían
legio, y en vez de dar buen ejemplo, había cambiado mucho. No pocos grandes burgueses
buscado el brillo escandaloso. -ya en el XIX-utilizaron su posición preminente
La aristocracia del Antiguo Régimen había como forma de privilegio más que como un
intentado justificar su actuación inhumana o servicio a la sociedad. Y, si bien al principio la
antisocial mediante un gran truco: el recurso burguesía industrial de los viejos pioneros era
al pasado. Era la inamovilidad de las herencias, austera y familiar, pronto degeneró en no
la presunta necesidad de no revolver la pocas ocasiones en el señoritismo escandaloso
sociedad, lo que defendía el status de unas de sus sucesores. Lo que había cambiado radi-
personas cuya actuación era en ocasiones cla- calmente era la forma de justificación del
ramente injusta. Es la misma tesis de la status. Si antes la herencia lo justificaba todo,
sociedad hindú de las castas, que prohibe los ahora será la innovación, el progreso, la nece-


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buen trato o simpatía con los demás, no en
sidad de crear. Antes se le decía a alguien: lo 5

siento, no te puedo ayudar, la rígida estructura subir un sueldo o poner un director de per-
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social lo impide: el pasado manda. Ahora se le sonal para que le sirva de mediador o de
insinúa: me gustaría ayudarte, pero no te muralla. Desde luego, el puesto de director de
adaptas al ritmo de avance que la empresa personal o como se le quiera llamar (siempre
requiere: el futuro impone. Es ya sabido, por me ha parecido que hablar de personal era
ejemplo, que está apareciendo un nuevo tipo como referirse al otro costo de la empresa: uno
de analfabetismo, a saber, el de los incapaces es el material y el otro el personal. Por eso,
de manejar un ordenador. pienso que se ha de hablar de personas más
que de personal) me parece de gran impor-
No quisiera, de ningún modo sostener una
tancia. Pero el problema ético del directivo
tesis maximalista. Al contrario. Aparte de que
está en organizar con la atención puesta en la
bastantes duques lo hicieron bien y bastantes
persona. Se dirá: sin beneficios no hay nada, y
grandes burgueses lo mismo, no hay duda que
la gente se queda sin trabajo. De acuerdo,
las razones de pasado o de futuro son en
muchos casos verdaderas. Lo que no me parece pero se tiene que notar que se busca el creci-
verdadero es que alguien justifique su desa- miento por cada persona de la empresa y no
tención real a la persona y los problemas del por el beneficio mismo o por el nuevo bene-
prójimo -pues en último extremo sólo le ficio de alguien. Y este tono lo ha de dar el
interesa su persona y su beneficio-, con el directivo de arriba.
recurso a la herencia o a la innovación.
Desde luego, la noble competencia en el
La innovación y el cambio me parece que mercado es algo estimulante, y la lucha por la
pueden ser algo magnífico y son en muchas innovación y el crecimiento algo muy bello y
ocasiones necesarios, etc. Pero no son lo único profundamente humano. Sin todo eso, la vida
que se ha de perseguir, lo cual quiere decir que es aburrida, triste. Ahora bien, la figura del
si se persiguen incondicionalmente se con- «Iátigo» empresarial, triunfador arriesgado en
vierten en inhumanos. todos los campos, nuevo «condottiero» de la
sociedad moderna, tan alabada y admirada
Me gustaría pararme un momento en este
hoy, me parece una figura dudosa. Entiendo
punto. El problema ético de] directivo empre-
sarial está principalmente no en «técnicas» de que el directivo ha de evitar tanto el ano-


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nimato como esos tipos de estrellazgos. El ano- 6
que -siendo un especialista extraordinario en
nimato no es bueno, por diversas razones. En cierta materia científica- no conseguía la
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primer lugar, infunde sospechas, como todo cátedra. La explicación estaba en que se le
poder oculto. En segundo lugar, impide la había olvidado completamente todo lo fácil.
función ejemplar característica -como he La filosofía, por el contrario, se ocupa de
dicho- del estamento dirigente. Pero salir a la estudiar lo que todo el mundo da por sabido.
palestra pública de] modo como hoy lo hacen Así pues, la formación humanística del
algunos me parece muy grave. El espejo en el directivo ha de ir dirigida primariamente a que
que se mira la sociedad es ahora frecuente- éste sea capaz de admirarse y tomarse en serio
mente un tipo humano corrupto. El problema las cosas más sencillas. La primera de las cuáles
es que muchos que, con buena voluntad, qui- es que es menester hacer el bien. Poco a poco,
sieron realizar una actividad verdaderamente y sin darnos cuenta, con las justificaciones del
humana, no son capaces de desarrollarla. triunfo y del no arruinarse y del no ser
ingenuos, hemos construido una sociedad del
Aquí está el punto que justifica, quizá, este
mal.
escrito. El ámbito de lo humano, de las rela-
ciones societarias, no parece de difícil com- Para hacer el bien hay que entrenarse a ello.
prensión. Todo el mundo está convencido de Se requiere práctica y estudios. El juicio pru-
que sabe tanto como el que más acerca de él. dente supone memoria de pasado, examen
Por ello, al parecer, uno tiene que dedicarse a atento de las circunstancias, conocimiento de
aprender cosas útiles y difíciles, que le den los principios y de las reglas, y visión de futuro.
éxito en la vida. Los lenguajes se hacen delibe- El empresario tiene necesariamente que
radamente oscuros: es un modo de reafirmar tener la visión amplia del humanista, porque
la propia importancia. el producto o servicio que realiza está en
Como consecuencia, es improbable que sea función del todo social. Sólo si lo conoce podrá
acogido el que nos diga: tienes que aprender establecer las estrategias oportunas. Pero es
lo fácil. El que nos dice eso es el humanista. que, además, y como he señalado, el directivo
Recuerdo lo vieja historia de aquel profesor empresarial, a través de su trabajo, organiza la


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El análisis del presente supone conoci-
sociedad: la «externa» a él, por la influencia 7

que despliega, y, sobre todo, la interna, la mientos sociológicos y psicológicos que han de
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referida a los propios hombres de la empresa. ser muy tenidos en cuenta también. Pensar, sin
Es este aspecto el más importante de su embargo, que lo único humano que a la
trabajo, sin duda. ¿Quién se atrevería a negar, empresa le importa son los aspectos socioló-
ante la opinión pública, que el fin que le gicos y psicológicos, me parece una reducción
mueve es el bien del hombre? de dimensiones y un empequeñecimiento.
Me parece, pues, que junto a la necesaria De gran interés es la formación retórico-lin-
formación técnica, es precisa una educación güística. Nuestro lenguaje es nuestro mundo.
historiográfica. No se puede ser prudente sin De ningún modo es posible ejercitar bien la
memoria de pasado. Una historiografía de la ética sin la apoyatura en la estética. Una mala
empresa -para aprender de errores pasados- y forma estropea la intención. Esto, que el
una historiografía general social: dónde empresario lo sabe bien a la hora de la publi-
estamos y de dónde venimos. Sin estudiar la
cidad y el trato con el cliente, ha de aplicarlo
revolución francesa, por ejemplo, es muy difícil
también hacia dentro de la propia empresa. La
saber bien en qué sociedad vivimos. Tenemos
falta de formación retórica me parece una de
una visión chata de nuestra propia existencia.
las lagunas más sensibles de la educación
Pero luego es menester el estudio de los actual. Ello produce un mundo presuntamente
principios. Cuáles son las grandes nociones a sencillo y campechano, pero que en verdad es
partir de las cuáles se ha construido la vida artificial y zafio. Hace falta una educación
humana, un tipo de sociedad. No es en artística, sobre todo musical. El problema de
absoluto lo mismo pensar de modo dialéctico las músicas es de la mayor importancia social.
que armónico. El personalismo y el individua-
En el futuro, por último, hay una clave fun-
lismo pedirán dos tipos de sociedad completa-
damental. Desarrollar el olfato es imposible de
mente distintos. Es diferente una sociedad que
modo directo: no hay técnicas para ello. Y, sin
se basa sobre la crítica, de otra que se apoya
embargo, es básico en un directivo el intuir por
en el amor al prójimo. La preminencia del
donde ha de caminar. Para desarrollar ese
pasado produce demasiada fijeza, la del futuro
excesiva movilidad. olfato hace falta saber historia y otra tanta


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mientos externos para atraer al comprador,
filosofía. Y, según yo creo, también mucha 8

aunque las más depuradas técnicas de la
religión.
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retórica publicitaria hagan aparecer nuestra
Cierto: hay personas que tienen ese «sexto
imagen con un aire cálido, atractivo, y que da
sentido». Sin estudios pueden acertar. Pero no
confianza, hacia dentro, piensan los que saben
se suele dar ni en muchos casos, ni de modo
«de qué va», no puede reinar más que un prin-
continuo, ni con verdadero acierto global.
cipio: el del logro, el del éxito en el mercado.
Todo genio tiene que tener primero escuela,
Aunque en la propia empresa se pongan car-
haberse dedicado a «perder el tiempo» con
teles de «el jefe sonríe», se imponga el campe-
enseñanzas aparentemente inútiles. Porque,
chano tuteo generalizado, se hable de prin-
del mismo modo que el gran organizador es el
cipios democráticos o se enfatice el cargo de
que preparó hasta el último detalle, pero exte-
«jefe de recursos humanos», los que saben «de
riormente todo parece espontáneo y no
qué va» no piensan más que una cosase trata
forzado, el gran directivo es el que sin mon-
de habilidades para aumentar el rendimiento -
tajes ni artefactos, sin presentarse como
y disminuir las fricciones, se trata, en suma, del
técnico de la organización, consigue crear un
logro, del éxito, en último término, eco-
clima humano en el que la gente, de modo
nómico.
natural, sonríe. A el se le puede aplicar, en
Desde luego, cualquiera, en este momento,
verdad, la denominación de empresario huma-
me reprocharía mala voluntad, o injusta gene-
nista.
ralización, al menos. Muchos empresarios son
Y paso entonces a intentar precisar en qué
buenas personas, luchan por sacar adelante
consiste el «humanismo empresarial». La
algo que va en beneficio de todos, y luchan
expresión «humanismo empresarial» parece, a
con gran esfuerzo y mérito, pues arriesgan.
primera vista, un hierro de madera o un círculo
cuadrado. La empresa está en manos de los Arriesgan por el bien de todos: ¿qué sería de
que emprenden, y de los que emprenden algo la mayoría, gente muchas veces de grandes
con fines económicos. Esto supone el con- cualidades, pero sin el don de la iniciativa, si
sabido estilo duro e implacable. Aunque hacia no hubiese quien botase y gobernase los
fuera se ponga la necesaria sonrisa para ganar barcos? No harían nada. Por tanto, los que
al cliente, aunque se extremen los refina- arriesgan, merecen también sus beneficios.


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estudio y el interés serio por la ética empre-
Estas consideraciones últimas me parecen 9

sarial en el mundo, lo todavía relativamente
muy bien, y son, según creo, verdaderas. Sólo
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escaso de su extensión, y los obstáculos que
que no sirven para resolver el problema. Pues
desde el principio encontró y sigue encon-
el problema no consiste en si uno sabe botar y
trando, decir ahora que hemos de ampliar el
dirigir un barco, sino en determinar a qué
enfoque, puede parecer absurdo, improce-
puerto lo quiere dirigir y para qué lleva per-
dente, descabellado. Apoyemos el hombro a la
sonas a bordo.
ética y ya quizá luego podremos ocuparnos de
Aquí se encuentra, precisamente, la dife-
otras cosas, si es que por rara casualidad triun-
rencia entre el estudio de las técnicas que me
famos en ésta.
hacen navegar mejor -tratar bien a las per-
sonas relacionadas con la empresa: trabaja- Además, la situación probablemente incluso
dores y clientes- y el saber llevarlos a un buen va a empeorar los próximos años para los
puerto. De esto último es de lo que trata el éticos. No es que se vaya a atacar a la moral
humanismo empresarial. Si lo entiendo bien, él más que antes, sino que el fracaso notorio de
es, pues, algo más que una business ethics, que las economías socialistas está ya llenando de
una ética empresarial, hoy progresivamente de nuevo impulso a los defensores del capitalismo
moda gracias a la beneficiosa aportación nor- puro y la competencia como forma de hacer
teamericana. Pues el problema no está sólo en avanzar la economía y la sociedad. Si se quiere
si hemos engañado al cliente, hemos hecho un desarrollo rápido de los países del Este, no
una competencia desleal, hemos desvelado un va a quedar mucho tiempo para debilidades
secreto comercial, etc. Todo eso tiene un gran moralizantes.
interés, desde luego, y hay que repetir, a mi Sí, el humanismo es difícil, siempre lo ha
juicio, el aplauso a los que -en medio de sido. Es una doctrina para espíritus fuertes. Su
incomprensiones y dificultades no pequeñas- triunfo no está nunca definitivamente ase-
se han decidido a combatir por tan noble gurado y sólo puede darse -relativamente- si
causa. Pero el humanismo empresarial no es se dan al menos dos condiciones, a las que me
sólo ética empresarial. he referido antes: que haya una élite dirigente
Llegados a este punto, las cosas están cada social consciente de lo que es y de su nece-
vez peor. Si consideramos lo reciente que es el sidad, y que esa élite consiga mostrar suficien-


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temente al resto de la sociedad los beneficios 10
Ni la ética empresarial, ni el apoyo al
llamado «mundo de la cultura» son el buscado
que trae consigo. Así como el espíritu de la
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humanismo. Tampoco consiste éste en crear
Ilustración trajo como consecuencia -cuando
una «Dirección de personal» o de «Recursos
arraigó en la élite burguesa- primero los
humanos». Extraordinaria la labor que en esos
sucesos revolucionarios y después el cambio
resortes interiores a la empresa se lleva a cabo.
total del modo de vida de una población,
Me parecen hoy por hoy imprescindibles. Pero
ahora -bien notorio el fracaso de ese espíritu-
las propias denominaciones son significativas.
hace falta apoyar un humanismo que salve al
¿Son los hombres un recurso o son el corazón
hombre occidental del vacío en que se
de una empresa? ¿Se puede hablar de per-
encuentra.
sonal, como si fuera el otro capítulo que hay
Pero, ¿qué es el humanismo? ¿Dominar,
que pagar, al lado del material? A mí, sincera-
como en el Renacimiento, las letras griegas y mente y con todo respeto, no me gusta que
latinas? ¿Aprender a gozar de la literatura? me encuadren en un personal o que digan que
¿Saber, además, mirar un cuadro sin indife- soy un recurso para nadie.
rencia? ¿Luchar por las justas reivindicaciones
El humanismo es difícil de realizar, pero no
de los oprimidos y menesterosos? ¿Una buena
me parece tan complicado de pensar. Consiste
mezcla de todo ello? Bien, y todo eso, en cual-
simplemente en tomarse en serio al ser
quier caso, ¿qué tiene que ver con la empresa?
humano, lo cual sólo se puede hacer, si lo
Sí, ya ahora se ve claro. Humanismo empre-
entiendo bien, de dos maneras, que, lejos de
sarial debe querer decir organizar exposiciones
ser excluyentes, son complementarias. Una es
de pintura, conciertos de buena música, sub-
considerar al hombre como absoluto. La otra,
vencionar congresos científicos, dar becas y
considerarlo como una totalidad.
subsidios a jóvenes prometedores y científicos
y artistas consagrados, montar fundaciones Que es absoluto supone, como es claro, que
para la cultura. ¡Qué bonitas son todas esas no es sólo relativo, pues el hombre es, también
actividades, qué útiles y que dignas de ala- y necesariamente, relativo a los demás. Pero,
banza, a mi juicio! Pero no son más que una sobre todo, que es absoluto, absuelto o
parte -quizá pequeña- del humanismo empre- separado del mundo físico, que está por
sarial. encima de él y que, por tanto, ha de ser


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tratado en atención a esta su condición tras- el humanismo persigue es única y exclusiva- 11

cendente. mente tomar en serio la dignidad humana.
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Lo ejemplificaré con el recurso a la noción Hablar de ella da más resultados prácticos
de dignidad. Si consideramos al ser humano que tratar de los derechos humanos. Porque
como meramente relativo, como alguien que por más vueltas que se le dé no se sabe nunca
depende de otros y de una serie de condi- porqué debo respetarlos. Pero, en cambio, es
ciones, y cuyo actuar, a su vez, es relativo a inmediatamente evidente que debo respetar a
puras necesidades o a logros pasajeros, no le alguien que tiene dignidad.
damos ninguna dignidad. Es un animal con Es muy posible intentar rechazar teórica-
características especiales, alguien que no tras- mente esta idea de dignidad. Y no voy a entrar
ciende. Pero eso es notoriamente falso. aquí en el tema. Pero me pregunto si alguien -
A su vez, si pensamos que el hombre es un sobre todo alguien que tiene alguna responsa-
ser simplemente absoluto -como cierto libera- bilidad social o política- se atrevería práctica-
lismo cree-, queda aislado en él mismo. Pero mente -es decir, abiertamente cara a los intere-
un ser aislado no tiene espíritu: sólo hay inte- sados- a negarla. Pues la negación implica
rioridad cuando me relaciono con otro automáticamente que la actuación del diri-
espíritu. Ahora bien, para relacionarme con él gente no puede tener otro fin que el de instru-
no como objeto, sino como ser humano, debo mentalizar al dirigido. Dicho de otra manera,
servirle. Y en ese momento, tengo dignidad: cualquier actuación al margen del humanismo
ser digno de significa servir para. El que no se de la dignidad no puede más que abrir el
relaciona en forma de servicio no es digno, no mecanismo de la sospecha, y, como conse-
tiene dignidad. El absolutismo individualista es cuencia, desencadenar un proceso basado en
indigno. la fuerza y, por tanto, en último término, en la
dominación del hombre por el hombre. Valga
Así pues, es menester considerar al hombre
esto para la consideración del hombre como
al mismo tiempo como absoluto y como
ser absoluto.
relativo a los otros hombres para poderle dar
una dignidad. Ni el individualismo absolutista En segundo lugar, el hombre es un ser total.
ni el relativismo colectivista lo consiguen. En Eso quiere decir que tenemos todos múltiples
efecto, lo que hoy falta es dignidad. Y lo que inclinaciones diversas, posibilidades distintas.


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Los animales están necesariamente especiali- más rica en posibilidades desarrolladas es una 12

zados: unos vuelan, otros nadan, otros sociedad, tanto más dignas son las personas
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caminan. Unos viven en zonas frías y otros en que de esos inmensos beneficios se lucran. Por
las cálidas. El hombre puede todo. O mejor: eso aquí la clave está en el intercambio, en el
tiene la posibilidad de todo, pero no alcanza diálogo, y no sólo en la información. Pues el
más que a unas pocas cosas. Y eso significa que diálogo me enriquece también interiormente,
aquel que tiene menos, tiene también menos mientras que la mera información no me da
para dar, se cierra más sobre sí mismo y, de esa más que poder sobre los demás.
forma, no es digno, pues no sirve. Pero, a su Y, llegados a este punto, de nuevo parece
vez, el que tiene mucho y no lo da, viene a claro que mi argumentación está lamentable-
identificarse de facto con el que no tiene nada: mente equivocada. Y ello por la simple razón
es tan indigno como él. En efecto, tan indigno de que una empresa es lo que se llama, desde
es el que se limita a vivir solitario bajo un el punto de vista social, una entidad inter-
puente, como el acaudalado que vive sin media, una sociedad intermedia. Se encuentra
interés por nadie. en lo que se llama la bürgerliche Gesellschaft.
Por nuestro carácter absoluto, tenemos Ese tipo de sociedades son, por una parte, rela-
necesariamente que ver con Dios. Sólo si hay tivas, pues buscan sólo cubrir alguna necesidad
alguien plena y eternamente absoluto puedo o deseo humano, y quedan al margen de un
entender que yo lo sea por nacimiento. Pero planteamiento absoluto. De otro lado, son
sólo si hay ese ser debo tomarme en serio -res- necesariamente parciales, y no totales. El
ponsablemente- el considerar a los demás sentido de la empresa es, justamente, desa-
rrollar un sector de las posibilidades humanas.
como absolutos. Es decir, sólo si hay sociedad
Es el trabajo especializado, precisamente, el
con Dios hay un fundamento para la sociedad
característico de lo empresarial.
humana.
Así pues, un empresario podría -supuesto
De otra manera, por nuestro carácter total,
que su paciencia le haya permitido seguir la
tenemos necesariamente que ver con el resto
argumentación hasta aquí- decir ahora que
de la humanidad. Pues, efectivamente, yo sólo
todo el discurso era vacío. Que -si es que hay
puedo hacer real mi totalidad con la ayuda de
tal carácter absoluto y total en el hombre- no
los demás. Los demás, me completan. Tanto


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realiza sus funciones de padre o de político.
es para nada tarea suya -del empresarioel ocu- 13

parse de ello. De eso se ocuparán, en todo Pero en la sociedad intermedia, en la vida
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caso, la familia y el Estado. «socio-económica» reinan otras leyes. Si es así,
esas otras leyes ¿serán inhumanas, puesto que
En la familia es donde a cada uno se le ve
esa esfera no es humanística? De nuevo, la res-
como absoluto. Es lo típico de los padres el
puesta del empresario, ya enfadado: no se
amor incondicionado a sus hijos. Sólo si soy
trata de que sean inhumanas, en el sentido de
querido de esa manera por alguien, soy social-
antihumanas. Se trata de que en ese tipo de
mente absoluto, soy alguien. Por eso, la familia
vida no cuenta, como se dijo, lo absoluto o lo
es una institución religiosa por esencia. El
total. Por ello, tiene que contar lo relativo y lo
hogar, ya en la Antigüedad, era un sitio de los
parcial.
dioses. Porque allí se da, como queda dicho, lo
absoluto. El problema está en que lo relativo y lo
parcial no tienen ningún sentido más que en
Si en la familia es donde se ve a alguien de
orden a lo absoluto y total. Es decir, que lo que
ese modo, es en el «Estado» donde se le con-
se trata de desenmascarar aquí es muy fácil de
templa con un carácter de total. El «Estado»
expresar: cuando se vive la vida «socio-eco-
tiene por obligación el terminar de cubrir
nómica» sin ordenarla a la familia y a la
todas las necesidades de la sociedad y, por ello,
sociedad en general, o sea, en último término,
de cada individuo. El organiza, o debe orga-
cuando se vive sin ordenarla a la dignidad
nizar, las cosas de manera que a cada uno le
humana, entonces se está absolutizando y
falte lo menos posible para «tener todo». Por
totalizando la esfera socio-económica. Por
ello, los antiguos decían que era en el
desentenderse de un absoluto -verdadero- se
«Estado» donde el hombre se perfeccionaba,
cae en otro -falso-. Y eso es lo que, de hecho,
alcanzaba una cierta plenitud. Y, en la
sucede. A eso se le llama sociedad burguesa,
sociedad actual, esto es especialmente pal-
consumista, capitalista o como se quiera. Es la
pable.
sociedad de nuestros días.
Dicho en otros términos: siempre se ha con-
Para convertir eso -que, claro está, es mate-
siderado que los «humanistas» prácticos eran
rialismo- en humanismo, basta ordenar al fin
los padres de familia y los políticos. O, si se
quiere, la persona, cualquier persona, cuando del hombre -a su dignidad- la actividad socio-


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económica, la actividad, en concreto, empre- 14
dignidad humana, por ejemplo, si, a conti-

sarial. El humanismo empresarial consiste sim- nuación, establecemos fuertes diferencias
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plemente en poner como último fin de la retributarias y menospreciamos unos trabajos
empresa la dignidad de todos los que con ella con respecto a otros. Por último, es funda-
se relacionan y, en último extremo, de toda la mental, colocar a cada uno en su sitio. El que
sociedad. no está en su sitio hace el ridículo, que es el
error social por excelencia.
Pues es bien claro que ni una empresa, ni
una familia, ni una Universidad, ni un Club, ni La ley del mercado es necesaria y válida,
una Iglesia, pueden funcionar bien si no tienen desde luego. Pero no puede ser ley suprema. Si
una economía saneada. Y cuanto más saneada, se convierte en suprema es inhumana, pues el
mejor. Pero eso es una condición para la vida, mercado, desde el punto de vista del com-
no un fin último. La economía es condición, ha prador, es cambiante, relativo y parcial. Me
de ser, por tanto buscada, pues la necesitamos. parece que dejar al Estado que regule el
Pero una condición no puede ser nunca un fin mercado es un proceder vicioso. Pero no
último. Convertir la economía en fin es mate- porque el Estado no pueda profanar la preten-
rialismo, es decir, indignidad. didamente sacrosanta libertad individual, sino
porque la dignidad del empresario pide que
Un empresario debe, por consiguiente, si las
sea él el que se cuide ya de la dignidad de los
reflexiones anteriores no son demasiado
que caen bajo su esfera. Dicho en otros tér-
erróneas, darse cuenta de que lo relativo, o
minos: el humanismo empresarial pide la
sea, el trabajo que se desarrolla en su empresa
extensión y profundización del principio coo-
para alcanzar unos fines que vienen a cubrir
perativo entre las empresas, para defender y
unas necesidades y unos deseos, ha de conec-
promover la dignidad humana. Desde fuera no
tarse con lo absoluto. Por tanto: ha de digni-
se puede hacer bien: el Estado lo tiene que
ficar el trabajo. El trabajo se dignifica de
imponer, porque es externo, pero eso es un
muchos modos. En primer lugar, dándole
mal arreglo. Tendría que estar claro que el
siempre importancia. Después, poniéndole las
principio de competencia, necesario, está
condiciones espacio-temporales adecuadas.
subordinado al de cooperación y no viceversa.
Además, dotándolo de unos honorarios ade-
cuados: no se puede decir que aceptamos la Sólo en la cooperación los empresarios pueden


RAFAEL ALVIRA

pensar en el hombre en cuanto tal, en la pura NOTA BIOGRAFICA 15

competencia no pueden pensar más que en el
Rafael Alvira es licenciado en Historia y 15
dinero en cuanto tal.
Doctor en Filosofía. Es catedrático de Historia
Y, por otro lado, la empresa debe estar inte-
de la Filosofía y ha ampliado sus estudios en
resada en que todos los que con ella se rela-
Universidades de diversos países como
cionan, se acerquen más a esa totalidad, a una
Alemania, Italia, Austria y Estados Unidos.
plenitud. Ahí es donde tiene sentido la regu-
Actualmente es Decano de la Facultad de
lación de horarios que permitan desarrollar
Filosofía y Letras de la Universidad de Navarra
otras actividades. Y el fomento de la cultura,
y es miembro del Comité Directivo del
que redunda en una mayor socialidad, es decir,
Seminario Permanente «Empresa y
humanidad.
Humanismo».
Humanismo empresarial es, pues, para ter-
Recogemos aquí -levemente retocadas y
minar, el que la élite dirigente de las empresas
ampliadas- dos conferencias suyas, pronun-
sepa contar, tener en cuenta, a cada uno,
ciadas respectivamente en las jornadas organi-
dándose cuenta de que ese cada uno no es una
zadas por el Ten Group España y Nueva
mera fuerza de trabajo, ni un mero sujeto ina-
Empresa, los días 6 y 7 de junio de 1989, bajo
lienable de derechos, sino, pura y simple-
el título ¿Cómo será el directivo de la próxima
mente, un hombre, es decir, un hermano.
década?, y en la III Reunión internacional del
Seminario Permanente «Empresa y Huma-
nismo», celebrada en Pamplona los días 26 y
27 de octubre de 1989.


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