Lula da Silva fue presidente de Brasil de 2003 a 2011. Comenzó como obrero metalúrgico y sindicalista antes de ser elegido presidente. Durante su mandato, implementó reformas que transformaron a Brasil económica y socialmente, sacando a millones de personas de la pobreza y convirtiendo a Brasil en la octava economía mundial. Su carisma y cercanía con el pueblo lo convirtieron en uno de los políticos más queridos de Brasil.