Este documento describe el programa "Club de Lactancia Materna de RUSH" en Chicago, el cual ha logrado las tasas más altas de inicio de lactancia materna en madres de recién nacidos prematuros. El programa emplea "Consejeras de amamantamiento de madre a madre" para brindar apoyo directo a las madres y aumentar las tasas de lactancia. Las Consejeras, quienes son madres previas de prematuros, proveen la mayoría de los servicios de lactancia bajo la supervisión de una enfermera especializada. Los
INFORME: FACTORES PSICOSOCIALES QUE INFLUYEN EN EL DESTETE ANTES DE LOS DOS A...
Programa de amamantamiento para consejeros
1. Programa de amamantamiento para Consejeros
Enero 2007
Programa de ―Breastfeeding peer counselors‖ en las Unidades de
Cuidados Intensivos Neonatales
P. MEIER
Director for Clinical Research and Lactation. Neonatal Intensive
Care Unit and Professor of Women and Children’s Health Nursing.
Rush University Medical Center. Chicago, IL
Cuando nace un bebe prematuro, las glándulas mamarias de la madre, aun
inmaduras, producen un derivado lácteo que posee un efecto protector mayor
al de la leche que será producida en una gestación a termino1,2. Esto es
particularmente cierto al referirnos al calostro, siendo esta la leche que se
produce durante los primeros días post-parto; periodo durante el cual los
espacios paracelulares del epitelio de la glándula mamaria se encuentran
abiertos, permitiendo así el paso de componentes anti-infecciosos y anti-
inflamatorios al recién nacido a través de la leche1,3,4. Estos componentes anti-
infecciosos y anti-inflamatorios, además de los factores de crecimiento,
compuestos celulares, enzimas y otros agentes; trabajan en conjunto para
proteger al recién nacido de algunas patologías asociadas a la prematuridad
como lo son las infecciones intrahospitalarias(sepsis tardía), enterocolitis
necrotizante (NEC) neumopatia crónica, intolerancia a la alimentación enteral
y retinopatía del prematuro5-14. Múltiples estudios sugieren que la leche
materna provee una protección a largo plazo a los prematuros de patologías
que pudieran aparecer posteriormente en la infancia como retardo del
crecimiento, infecciones, atopia y trastornos neurocognitivos15-20. Por lo tanto
las evidencias acerca del rol que desempeña la leche maternal en los
prematuros indican que no solo se trata de una ―nutrición‖ a corto plazo, sino
de una terapia biológica que podría reducir la incidencia y severidad de
2. múltiples patologías cuyo tratamiento demandaría de otra manera costos
elevados y secuelas invalidantes de por vida21-24.
A pesar de estos hechos demostrados, muchas mujeres en todo el mundo eligen
las formulas de leche ―maternizada‖ para sus recién nacidos prematuros. Las
estadísticas revelan que muchas madres desconocen la importancia de la leche
materna o muestran cierta preocupación por si la calidad o volumen de su
leche será adecuada para el prematuro1,25-28. A través de la historia, los
médicos y enfermeras en las UCIN (unidades de cuidados intensivos
neonatologicos) se han mostrado reacios a compartir dicha información con las
madres, debido a la preocupación y/o el impacto que generaría en las mismas,
o peor aun el hecho de hacerlas sentir presionadas a elegir25-27,29,30. Del mismo
modo, muchas veces estas madres son mal informadas acerca de ciertas
contraindicaciones para la lactancia (como el consumo de fármacos o ciertas
patologías maternas) ya sea por médicos o familiares, llevándolas a preferir el
uso de formulas para sus bebes prematuros. Estas barreras solo sirven para
llevara a las madres a desistir siquiera de intentar brindar lactancia materna a
sus recién nacidos. Para aquellas que optan por iniciar la lactancia, el
inadecuado volumen de leche producido suele ser un problema universal, a
pesar del hecho que muchas de dichos problemas son prevenibles con el equipo
o la información adecuados25-27,31-35. El temor a ―quedarse sin leche‖
representa la barrera mas común para perseverar con la lactancia en las
madres de prematuros1,25-27 . A pesar de la abundante información y evidencias
acerca de la superioridad de la leche materna para la nutrición en prematuros
existente, en el entorno clínico hay pocos o ningún método/ programa que
intenten aplicar estos hallazgos con el fin de incrementar la lactancia y su
duración en esta población. The Rush Mothers’ Milk Club (El Club de
Lactancia Materna de RUSH), es un programa combinado de investigacion y
practica aplicado en las 52 camas del servicio de cuidados intensivos
neonatales (NICU) en el centro medico de la Universidad de RUSH (RUMC)
en el área metropolitana de Chicago. Este programa, creado en 1996, tiene en
la actualidad las mas altas tasas de inicio de lactancia en madres de recién
3. nacidos prematuros de muy bajo peso al nacer (VLBW; <1.500 g) así como las
mas ―altas dosis‖ de leche maternal recibidas por prematuros en los Estados
Unidos de Norteamérica25.
Actualmente, el 95% de madres del Club de Lactancia Materna de RUSH
inician la lactancia a sus recién nacidos prematuros. Durante los dos primeros
anos de este programa (1997-1998), alrededor del 70% de la alimentación
enteral para prematuros de muy bajo peso al nacer durante toda la
permanencia hospitalaria, consistía en lecha materna, demostrando así que los
problemas asociados a volúmenes escasos de leche serian prevenibles y
tratables con un adecuado manejo basado en evidencias.
La investigación constante y experiencias clínicas obtenidas en el Club de
Lactancia Materna de RUSH han resultado en múltiples publicaciones1,25-
27,29,35-47, entre las cuales destaca un estudio que demuestra que las madres
no se sentirían culpables o coercionadas por su medico al decirles que su leche
seria beneficiosa para la salud de su recién nacido. Este estudio prospectivo fue
realizado en razón que aproximadamente el 50% de las madres que iniciaron
la lactancia en sus recién nacidos prematuros habrían tenido planeado utilizar
formulas para su alimentación de no haber sido informadas de lo anterior.
Estas cambiaron de opinión inmediatamente al ser informadas, por sus
médicos o enfermeras, de los beneficios potenciales de la lactancia materna. El
estudio prospectivo29 demostró que el informar a las madres no las hacia sentir
culpables o presionadas, señalando las mismas madres que las opciones a
tomar deberían ser informadas por sus médicos. La población en este estudio29
comprendió madres de bajos ingresos (62%) y de raza africano-americanos
(76%), dos grupos poblacionales que según estudios del Centers for Disease
Control and Prevention tendrían baja tasa de apego y cumplimiento al inicio y
mantenimiento de la lactancia maternal48– 51. Este estudio demostró que
cuando los médicos y enfermeras brindan información adecuada basada en
evidencias a estos grupos poblacionales de madres, acerca de la importancia de
la lactancia materna, las tasas de apego y cumplimiento serian comparables al
de madres de mayores ingresos y recursos.
4. El Club de Lactancia Materna de RUSH se encuentra dirigido por la Dra.
Meier (enfermera doctorada en investigación), pero cuenta además con 10
neonatólogos y 180 enfermeras que proveen servicios de lactancia que incluyen
el informar acerca de la leche materna en prematuros, enseñar el uso
adecuado de las bombas de extracción de leche, resolver problemas
concernientes a la producción de volúmenes escasos de leche, cuantificar la
cantidad de grasa y calorías de la leche materna para ser administrada en el
prematuro empleando la técnica del crematocrito y apoyar a las madres con
las técnicas adecuadas de lactancia. Todos los viernes y lunes se realizan
charlas en ingles y español respectivamente; llamadas ―Lonches del Club de
Lactancia Materna de RUSH, al cual pueden asistir todas las madres de
prematuros en la UCIN. Estas reuniones de aproximadamente dos horas
abarcan distintos temas de investigación y actualidad sobre la lactancia
maternal, generando preguntas y discusiones, permitiendo además la
interacción y apoyo mutuo entre madres. Cada semana se brinda las madres
copias de artículos científicos originales, además de ciertos formatos
prediseñados para evaluar la educación impartida por la Dra. Meier.
En 1997 el Club de Lactancia Materna de RUSH prepare a su primer
Breastfeeding Peer Counselor (Consejeras de Amamantamiento de Madre a
Madre) voluntario (no pagado), una madre africano-americana de un
prematuro de 1.000 g que fue dado de alta hacia 6 meses. A pesar de que en un
principio esta madre no tenía planeado dar lactancia maternal, lo hizo por
aproximadamente un ano y retorno frecuentemente a los lonches del club de la
lactancia maternal para compartir sus experiencias con otras madres. La Dra.
Meier, como miembro del consejo de prevención en salud de la liga
internacional LA LECHE, decidió preparar a esta mujer como Breastfeeding
Peer Counselor a través de un programa de 5 días ofrecido por la Liga de La
Leche. Tras completar el curso y rendir los exámenes pertinentes, esta madre
asistió como voluntaria a los lonches semanales del club de lactancia materna.
Su presencia constante en estas reuniones hizo aun más eficaz el propósito de
las mismas, permitiéndole a la Dra. Meier el usar las experiencias y resultados
5. obtenidos en esta madre para incentivar a las otras madres asistentes. Las
madres cuyos prematuros aun hospitalizados, encontraron los testimonios de
esta mujer muy motivadores. Por lo tanto, muchas mujeres, especialmente de
bajos recursos empezaron a pensar del siguiente modo, ―si ella pudo hacerlo,
yo también puedo lograrlo...pues quiero que mi bebe sea tan sano como el de
ella‖.
Entre 1997 y 2005 el Club de Lactancia Materna de RUSH capacito a un total
de 14 madres, concentrándose en madres cuya primera opción era el no dar de
lactar, así como madres de bajos ingresos y de grupos étnicos en los que seria
menos probable el inicio de la lactancia materna.
En enero del 2005, la Dra. Meier logro crear un fondo de investigación foráneo
par poder dar empleo a estas Breastfeeding Peer Counselors con el fin de que
provean apoyo directo a otras madres en la UCIN. Las dos madres elegidas
completaron el programa de entrenamiento de 5 días en la Liga de La Leche, y
posteriormente siguieron un programa de orientación de 6 semanas diseñado
especialmente para este propósito por la Dra. Meier. Es así que desde el 2005,
estas consejeras de lactancia (BPC) han sido empleadas a tiempo completo en
la NICU del RUMC proveyendo un 75% de todos los servicios de lactancia,
bajo la supervisión y dirección de la Dra. Meier. Actualmente RUMC es la
única institución en los Estados Unidos de Norteamérica que emplea
consejeros de lactancia (BPC) en esta capacidad, pero en una presentación de
la prensa asociada en el 2006, acerca de uno de las Breastfeeding Peer
Counselors (Sra. Benjamin-Johnson), demostró un considerable interés acerca
de este enfoque acerca del empleo de las UCIN en los Estados Unidos de
Norteamérica.
Las responsabilidades de los consejeros de lactancia (BPC), definidas en su
plan de trabajo incluyen: 1) Conocer a todas las nuevas madres de prematuros
en el UCIN dentro de las 48 horas posteriores al nacimiento; 2) Completar una
evaluación de riesgo de la lactancia y otra información demográfica; 3)
Enseñar el uso apropiado de la bomba eléctrica de leche, incluyendo principios
de lactogénesis, frecuencia de extracción de leche, colocación adecuada del
6. equipo de bombeo y el adecuado almacenamiento y transporte de la leche a la
UCIN posterior al alta hospitalaria; 4) Realizar medidas del crematocrito en la
leche materna para evaluar el contenido lipídico y calórico cuando se indique;
5) Ayudar con la lactancia de pecho a los prematuros que no se encuentren
recibiendo respiración asistida a presión positiva pero que pudieran estas
recibiendo oxigeno por cánula binasal; 6) Instituir el uso de pezoneras y
evaluar el peso las veces que sea necesaria para facilitar la transferencia de
leche durante la lactación; 7) Organizar encuentros semanales del Club de
Lactancia Materna de RUSH, incluyendo el transporte en taxi para las madres
de bajos ingresos que no disponen de movilidad propia; 8) Realizar visitas
domiciliaras a las madres y prematuros de bajos ingresos posteriormente al
alta del UCIN para proveer un continuo cuidado de la lactancia; 9) Servir
como asistentes de investigación en los estudios dirigidos por la Dra. Meier.
Las familias del UCIN aprenden acerca de las consejeras de lactancia (BPC) y
sus servicios en un panfleto especialmente diseñado que es parte del
paquete de información del club de lactancia materna de RUSH para nuevas
familias.
Nuestros resultados preliminares indican que las Breastfeeding Peer
Counselors son altamente efectivas en el ambiente del UCIN, debido a la
combinación única del conocimiento en lactancia y sus experiencias previas
como madres de infantes prematuros que recibieron cuidados en ese ambiente.
Las Breastfeeding Peer Counselors se reúnen semanalmente con la Dra. Meier
y otros miembros del staff de la UCIN para revisar todos los casos de las
madres y sus problemas de lactancia. Esta reunión asimismo sirve como un
foro de educación continua. Así es como las habilidades y conocimientos de las
consejeras de lactancia son actualizados y mejorados constantemente. El uso
de Breastfeeding Peer Counselors representa por lo tanto un modelo de
cuidado que sustituye a profesionales con remuneraciones mas altas por un
personal ligado a los padres bajo la dirección del profesional especialista en
lactancia (Dra. Meier). Al extender los servicios del profesional, el rol de las
consejeras de lactancia mantiene un alto nivel en el cuidado de la lactancia, y
7. logra además una adecuada satisfacción de los pacientes y personal del UCIN,
manteniendo un efectivo costo-beneficio.
BIBLIOGRAFÍA
1. Rodriguez, N.A., D.J. Miracle, and P.P. Meier, Sharing the science on
human milk feedings with mothers of very-low-birth-weight infants. J
Obstet Gynecol Neonatal Nurs, 2005. 34(1): p. 109-19.
2. Diaz-Gomez, N.M., E. Domenech, and F. Barroso, Breast-feeding and
growth factors in preterm newborn infants. Journal of Pediatric
Gastroenterology & Nutrition, 1997. 24(3): p. 322-7.
3. Montagne, P., et al., Immunological and nutritional composition of
human milk in relation to prematurity and mother’s parity during the
first 2 weeks of lactation. J Pediatr Gastroenterol Nutr, 1999. 29(1): p.
75-80.
4. Neville, M.C., Anatomy and physiology of lactation. Pediatric Clinics of
North America, 2001. 48(1): p. 13-34.
5. Shoji, H., et al., Suppressive effects of breast milk on oxidative DNA
damage in very low birthweight infants. Archives of Disease in
Childhood Fetal & Neonatal Edition, 2004. 89(2): p. F136-8.
6. Lucas, A. and T.J. Cole, Breast milk and neonatal necrotising
enterocolitis.[ see comment]. Lancet, 1990. 336(8730): p. 1519-23.
7. Schanler, R.J., et al., Randomized trial of donor human milk versus
preterm formula as substitutes for mothers’ own milk in the feeding of
extremely premature infants. Pediatrics, 2005. 116(2): p. 400-6.
8. Davidson, B., et al., Fucosylated oligosaccharides in human milk in
relation to gestational age and stage of lactation. Adv Exp Med Biol,
2004. 554: p. 427-30.
9. El-Mohandes, A., M. Picard, and S. Simmens, Human milk utilization
in the ICN decreases the incidence of bacterial sepsis [abstract].
Pediatric Research, 1995. 37: p. 306A.
8. 10. Hylander, M.A., D.M. Strobino, and R. Dhanireddy, Human milk
feedings and infection among very low birth weight infants. Pediatrics,
1998. 102(3).
11. Schanler, R.J., R.J. Shulman, and C. Lau, Feeding strategies for
premature infants: beneficial outcomes of feeding fortified human milk
versus preterm formula. Pediatrics, 1999. 103(6 Pt 1): p. 1150-7.
12. Furman, L., et al., The effect of maternal milk on neonatal morbidity of
very low-birth-weight infants. Arch Pediatr Adolesc Med, 2003. 157(1):
p. 66-71.
13. Uraizee, F. and S. Gross, Improved feeding tolerance and reduced
incidence of sepsis in sick very low birthweight (VLBW) infants fed
maternal milk [Abstract]. Pediatric Research, 1989. 25: p. 298A.
14. Simmer, K., R. Metcalf, and L. Daniels, The use of breastmilk in a
neonatal unit and its relationship to protein and energy intake and
growth. Journal of Paediatrics & Child Health, 1997. 33(1): p. 55-60.
15. Hack, M., et al., Outcomes in young adulthood for very-low-birthweight
infants. N Engl J Med, 2002. 346(3): p. 149-57.
16. Ehrenkranz, R.A., et al., Longitudinal growth of hospitalized very low
birth weight infants. Pediatrics, 1999. 104(2 Pt 1): p. 280-9.
17. Hintz, S.R., et al., Neurodevelopmental and growth outcomes of
extremely low birth weight infants after necrotizing enterocolitis.
Pediatrics, 2005. 115(3): p. 696-703.
18. Stoll, B.J., et al., Neurodevelopmental and growth impairment among
extremely low-birth-weight infants with neonatal infection. [see
comment]. Jama, 2004. 292(19): p. 2357-65.
19. Perlman, J.M., Neurobehavioral deficits in premature graduates of
intensive care—potential medical and neonatal environmental risk
factors. Pediatrics, 2001. 108(6): p. 1339-48.
20. Marlow, N., et al., Neurologic and developmental disability at six years
of age after extremely preterm birth.[see comment]. New England
Journal of Medicine, 2005. 352(1): p. 9-19.
9. 21. Payne, N.R., et al., Marginal increase in cost and excess length of stay
associated with nosocomial bloodstream infections in surviving very low
birth weight infants. Pediatrics, 2004. 114(2): p. 348-55.
22. Petrou, S., T. Sach, and L. Davidson, The long-term costs of preterm
birth and low birth weight: results of a systematic review. Child Care
Health Dev, 2001. 27(2): p. 97-115.
23. Gilbert, W.M., T.S. Nesbitt, and B. Danielsen, The cost of prematurity:
quantification by gestational age and birth weight. Obstet Gynecol,
2003. 102(3): p. 488-92.
24. Rogowski, J., Cost-effectiveness of care for very low birth weight
infants. Pediatrics, 1998. 102(1 Pt 1): p. 35-43.
25. Meier, P.P., et al., The Rush Mothers’ Milk Club: breastfeeding
interventions for mothers with very-low-birth-weight infants. J Obstet
Gynecol Neonatal Nurs, 2004. 33(2): p. 164-74.
26. Meier, P.P., Supporting lactation in mothers with very low birth weight
infants. Pediatr Ann, 2003. 32(5): p. 317-25.
27. Meier, P.P., Breastfeeding in the special care nursery. Prematures and
infants with medical problems. Pediatr Clin North Am, 2001. 48(2): p.
425-42.
28. Philipp, B.L., E. Brown, and A. Merewood, Pumps for peanuts: leveling
the field in the neonatal intensive care unit. Journal of Perinatology,
2000. 20(4): p. 249-50.
29. Miracle, D.J., P.P. Meier, and P.A. Bennett, Mothers’ decisions to
change from formula to mothers’ milk for very-low-birth- weight
infants. J Obstet Gynecol Neonatal Nurs, 2004. 33(6): p. 692-703.
30. Sisk, P.M., et al., Lactation counseling for mothers of very low birth
weight infants: Effect on maternal anxiety and infant intake of human
milk. Pediatrics, 2006. 117(1).
31. Slusher, T., et al., Promoting the exclusive feeding of own mother’s milk
through the use of hindmilk and increased maternal milk volume for
10. hospitalized, low birth weight infants (< 1800 grams) in Nigeria: a
feasibility study. Journal of Human Lactation, 2003. 19(2): p. 191-8.
32. Cregan, M.D., T.R. de Mello, and P.E. Hartmann, Pre-term delivery
and breast expression: consequences for initiating lactation. Advances
in Experimental Medicine & Biology, 2000. 478: p. 427-8.
33. Cregan, M.D., et al., Initiation of lactation in women after preterm
delivery. Acta Obstetricia et Gynecologica Scandinavica, 2002. 81(9): p.
870-7.
34. Hill, P.D., J.C. Aldag, and R.T. Chatterton, Effects of pumping style on
milk production in mothers of non-nursing preterm infants. Journal of
Human Lactation, 1999. 15(3): p. 209-16.
35. Meier, P.P., Suck-breathe patterning during bottle and breast feeding
for preterm infants. British Journal of Clinical Practice, 1996: p. 9-20.
36. 36. Hurst, N.M., et al., Mothers performing in-home measurement of
milk intake during breastfeeding of their preterm infants: maternal
reactions and feeding outcomes. J Hum Lact, 2004. 20(2): p. 178- 87.
37. 37. Meier, P.P., et al., Nipple shields for preterm infants: effect on milk
transfer and duration of breastfeeding. J Hum Lact, 2000. 16(2): p. 106-
14; quiz 129-31.
38. Meier, P.P., et al., Mothers’ milk feedings in the neonatal intensive care
unit: accuracy of the creamatocrit technique. J Perinatol, 2002. 22(8):
p. 646-9.
39. Meier, P.P., Extremely low birthweight infants: Individualizing the
lipid content of own mothers’ milk. Academy of Breastfeeding Medicine
News and Views, 1998. 4(1): p. 1-6.
40. Brown, L.P., A.H. Bair, and P.P. Meier, Does federal funding for
breastfeeding research target our national health objectives? Pediatrics,
2003. 111(4 Pt 1): p. e360-4.
41. Meier, P.P., et al., A new scale for in-home test-weighing for mothers of
preterm and high risk infants.[see comment]. Journal of Human
Lactation, 1994. 10(3): p. 163-8.
11. 42. Griffin, T.L., et al., Mothers’ performing creamatocrit measures in the
NICU: accuracy, reactions, and cost. J Obstet Gynecol Neonatal Nurs,
2000. 29(3): p. 249-57.
43. Jegier, B., et al. What is the Cost of Providing 100 mls of Own Mothers’
Milk (OMM) for Very Low Birth Weight (VLBW; <1500g) Infants in
the NICU? in Pediatric Academic Societies Annual Meeting. 2006. San
Francisco, California.
44. Meier P, Engstrom JL, Zuleger JL, Motykowski JE, Vasan U, Meier
WA, Hartmann PE, Williams TM. Accuracy of a user- riendly
centrifuge for measuring creamatocrits on mothers’ milk in the clinical
setting. Breastfeeding Medicine, 2006. 1 (2): 79- 7.
45. Patel, A.L., et al., Accuracy of methods for calculating postnatal growth
velocity for extremely low birth weight infants. Pediatrics, 2005. 116(6):
p. 1466-73.
46. Motykowski, J.E., et al. Conducting a Randomized Trial with an
Underserved Population of Mothers with VLBW (<1500g) Infants. in
International Society for Research in Human Milk and Lactation. 2004.
Cambridge, UK.
47. Engstrom, J.L., et al. Comparison of Milk Output from the Right and
Left Breasts during Simultaneous Pumping in Mothers of Very Low
Birthweight Infants. (Manuscript submitted for publication), 2006.
48. Li, R., et al., Breastfeeding rates in the United States by characteristics
of the child, mother, or family: the 2002 National Immunization Survey.
Pediatrics, 2005. 115(1).
49. Li, R. and L. Grummer-Strawn, Racial and ethnic disparities in
breastfeeding among United States infants: Third National Health and
Nutrition Examination Survey, 1988-1994. Birth, 2002. 29(4): p. 251- 7.
50. Li, R., et al., Prevalence of exclusive breastfeeding among US infants:
the Third National Health and Nutrition Examination Survey (Phase II,
1991-1994). American Journal of Public Health, 2002. 92(7): p. 1107-10.
12. 51. Martin, J.A., et al., Births: Final data for 2000. National Vital Statistics
Reports, 2002. 50: p. 11-18.