El documento describe la historia de La Valla, un pueblo en el sureste de Francia donde Marcelino Champagnat compró una casa en 1817 para iniciar una escuela y comunidad religiosa marista con dos hermanos. Actualmente en La Valla se celebran eventos conmemorativos de los 200 años de los maristas y se enfatiza la importancia de cultivar la interioridad a través de la contemplación, el silencio y la escucha.