1. RESUMEN ADN
Hasta mediados del siglo XX no se sospechaba que el ADN fuera la
molécula capaz de asegurar la transmisión de los caracteres hereditarios
de célula a célula.
En 1869 el biólogo suizo Johann Friedrich Miescher aísla el núcleo
celular, identificando un nuevo grupo de substancias celulares a las que
denominó nucleínas.
Observó la presencia de fósforo. Luego Richard Altmann las identifico
como ácidos y les dio el nombre de ácidos nucleicos.
En esa época prevalecía la idea de que el ADN era una molécula
demasiado simple como para ser considerada portadora de la
información genética. Esta idea fue desechada en 1950 por el científico
checo Erwin Chargaff, quien analizó en detalle la composición de bases
del ADN extraído de diferentes organismos. Llegó a la conclusión de que
las cuatro bases nitrogenadas no se encontraban en proporciones
En 1914, el químico alemán Robert Feulgen
describió un método para teñir el ADN por medio
de un colorante llamado fucsina. Utilizando este
método, descubrió que el ADN se encontraba
formando parte de los cromosomas.
Durante los años 20, el bioquímico
Levene analizó los componentes del
ADN, y encontró que contenía cuatro
bases nitrogenadas: citosina, timina,
adenina y guanina; un azúcar
desoxirribosa y un grupo fosfato.
También demostró que se encontraban
unidas en el orden fosfato-azúcar-base,
formando lo que denominó un
nucleótido. Levene también sugirió que
los nucleótidos se encontraban unidos
por los fosfatos formando el ADN. Sin
embargo, Levene pensó que se trata
ban de cadenas cortas y que las bases
se repetían en un orden determinado.
2. exactamente iguales en las distintas especies, lo cual sugirió que el ADN
no debía ser tan monótono como se pensaba.
Chargaff demostró que la adenina (A) aparecía con tanta frecuencia
como la timina (T) y la guanina (G), con tanta frecuencia como la
citosina (C). Había dos juegos de equivalencias, A y T por un lado y G y
C por otro.
James Watson y Francis Crick eligiendo los datos más relevantes de
un cúmulo de información y analizaron con recortes de cartón y modelos
de alambre y metal, fueron capaces de develar la estructura de la doble
hélice de la molécula del ácido desoxirribonucleico, ADN, y formularon
los principios de almacenamiento y transmisión de la información
hereditaria. Este hallazgo les valió el premio Nobel, que compartieron
con M.H.F. Wilkins.
Watson y Crick tenían en mente una serie de posibles estructuras, pero
al carecer de buenas fotografías no podían concluir sobre cuál era la
correcta. Acceder a la fotografía de Franklin fue clave para lograrlo. De
esta forma, Watson y Crick pudieron publicar en 1953, en el mismo
número de la revista Nature en el que publicaron sus fotografías Wilkins
y Franklin, la estructura de doble hélice del ADN. Watson y Crick inician
su artículo original de esta manera.
Es una doble hélice, con las bases nitrogenadas dirigidas hacia el centro,
perpendiculares al eje de la molécula (como los peldaños de una
escalera caracol) y las unidades azúcar-fosfato a lo largo de los lados de
la hélice (como las barandas de la escalera). Las dos hebras que la
conforman son complementarias (deducción realizada a partir de los
datos de Chargaff), Adenina se aparea con Timina y Citosina con
Guanina y el apareamiento se mantiene debido a la acción de los
Rosalind Franklin fue la
primera en obtener una
excelente fotografía del
ADN por difracción de rayos
X, a partir de la cual podía
deducirse la distribución y
la distancia entre los
átomos que formaban parte
del ADN.
3. puentes hidrógeno entre ambas bases. Ellos calcularon las distancias
exactas que debía haber entre las cadenas y entre los átomos que las
componen.
Nucleotidos de ADN: unidad de repetición de ADN.
Modelo de Watson y crick: Solo pares específicos de bases, llamados
pares de bases complementarias, se pueden unir en la hélice mediante
enlaces o puentes de hidrógeno: adenina con timina y guanina con
citosina.
Evidencvias experimentales: Experimento de Griffith
En 1928, Friedrich Griffith utilizó dos cepas de bacterias Streptococus
pneumoniae :
(cepa S: smooth), cuyas colonias eran de superficie lisa y producían la
muerte de ratones.
(cepa R no encapsulada (rough), cuyas colonias tienen una superficie
rugosa y que no mataban a los ratones.
4. Observaciones de Griffith:
La cepa S producía infección letal en los ratones de su laboratorio
y los de la cepa R, no lo hacían.
Las cepas S muertas por calor son también inofensivas, excepto
cuando se las mezcla con cepa R vivas.
En este último caso, se puede producir una infección fatal y en los
ratones infectados se encuentran células vivas con cápsulas
características de la cepa S.
Este experimento permite inferir que algún factor de la cepa S
muerta pasa a las cepas R vivas y las transforma en cepas
infecciosas letales.
Griffith no supo cual era ese factor.
Griffith concluyó que un "factor de transformación" había sido
transferido desde los neumococos S muertos a los neumococos R vivos.
Este factor de transformación convirtió a los neumococos R en
neumococos S con la cápsula de polisacáridos que les hace letales.