El primer poema describe dos gusanos que se chocan con una rosa y quedan arrugados. El segundo poema describe el vapor que sale de una taza de café mientras da vueltas y se estira. El tercer poema describe la llegada del otoño rodando sobre ruedas, dejando pálidos a los melones mientras las uvas, manzanas y mandarinas maduran, con pocas golondrinas y fuegos chisporroteando.