Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
Merla
1. Dios te salve Madre Tierra
Llena eres de gracia, el Señor es contigo,
Bendita eres entre espíritus femeninos y planetas,
Y bendito es el fruto de tu vientre:
La humanidad en ti, Jesús.
Santa Madre Tierra, madre de todos,
Ruega por nosotros, los aprendices,
Ahora y en la hora de la trascendencia...
Amén.
Pacha Mama, Macune, Tonanzín, Nana Tlalli, Gaia, Saras, Merla, Urantia, María, Guadalupe y
muchos nombres más, representan la naturaleza femenina de la Creación, simbolizando
en ellos el equilibrio necesario de la parte masculina
identificada con el Padre, Dios.
A través de las enseñanzas recibidas por nuestros
Guías y Maestros, hemos podido rescatar la imagen
del Dios masculino, heredada de una sociedad
machista y de un concepto religioso tradicional y
partidista que identifica al Espíritu Esencia con la
imagen de un hombre. Este rescate de la idea
ortodoxa, nos ha llevado a comprender que nuestro
Creador es Padre y Madre a la vez, y que así como
el Padre se identifica con el Cosmos, la Madre se
asocia con la Naturaleza que nos da la vida, que nos
engendra en su seno y que nos alimenta de su savia
viva. Ella es el sustento y el cobijo que renace
diariamente para entregarnos todos sus elementos por medio de los cuales, nosotros, sus
hijos, podemos desarrollarnos y crecer en conciencia para acercarnos cada vez más a la
Esencia misma, que es puro e infinito Amor.
Pero para lograr dicho estado, primero tendremos que aprender a respetarla; ella será la
encargada de examinarnos, pues lo sabe todo ya que lee nuestras intenciones inscritas
inclusive hasta en lo más profundo del corazón. A ella no la podemos engañar, y no es de
extañarnos que su cobijo se tienda de una manera u otra hacia cada uno, ya que es ella la
que evalua según el grado de afinidad o respecto que le otorguemos a sus otros hijos,
nuestros hermanos.
No olvidemos que si ella es la Madre, todos sus hijos, desde
estados de conciencias primarios representados en un
mineral, pasando luego por las plantas y los animales, hasta
llegar al Ser Humano, nos hace una sóla familia, y como
siempre se ha dicho, la familia es el primer y principal
laboratorio de crecimiento interno y de experimentación del
amor. Simplemente nos hace falta contemplar su propia
grandeza que se expresa desde lo más simple, un grano de
arena, hasta lo más sublime, el Hombre, su hijo consciente,
2. el que sabe, aunque muchas veces seamos nosotros mismos los que nos volteamos contra
ella... contra la Madre.
Nuestra civilización ha llegado a un adelantado grado de tecnología olvidando lo que fue
sagrado para muchos en el ayer. La sensibilidad ha quedado relegada a los renglones de
abajo, mientras el avance de lo externo y temporal ha tomado los titulares de las primeras
páginas de nuestras vidas, sin tener encuenta el hábitat, en donde nos afirmamos día a
día. En otras palabras, la forma de expresión masculina sigue prevaleciendo muy a pesar de
los avances de la femenina, y hasta que no equilibremos los dos planos del Todo, las fuerzas
mismas del universo, tarde o temprano, buscarán su propio balance.
Afortunadamente este momento de la historia humana
señala una preeminencia de la mujer en la política, en
los derechos humanos, en la religión, en la lucha
ecológica, en la ciencia, en las artes, pero especialmente
en los ámbitos de lo espiritual, donde empiezan a liderar
marcando la pauta con una mayor sensibilidad,
disposición y disciplina.
Como una visión profética de todo esto, ya en el imperio
nuevo egipcio, la reina Hatsheput gobernó vestida de
varón, pero manteniendo sus actitudes femeninas que le
permitieron una buena administración y un período de
esplendor y tranquilidad.
Posteriormente Akenatón, se hizo representar en frisos y
bajorrelieves de los templos de Tell-El Amarna, jugando
con sus pequeñas hijas y acariciándolas al lado de su esposa Nefertiti, quien incluso
compartió el mando hacia los últimos años del gobierno de este faraón, que fueron de un
profundo misticismo.
La virgen María, quien al terminar su vida terrenal ascendió al cosmos, fue la condensación
selecta de las fuerzas de la naturaleza, toda pureza y sin error, como la abeja reina
preparada desde un principio para cumplir su destino. Y es que el Creador es Padre y Madre
a la vez. Entonces, las apariciones marianas no son otra cosa que la comunicación de la
Madre Cósmica con la humanidad a través de María, cuyos mensajes son universales,
positivos y respetuosos.
Durante la edad media, los Templarios recogieron e
hicieron suyos los rituales del contacto con la Madre Cósmica
a través de las vírgenes negras, las cuales personificaban
a la primera mujer y a la raza originaria del planeta.
En los templos y catedrales góticas, la ojiva simboliza la
matriz de la madre, y la estructura, incluyendo los arcos,
reproduce la Catedral del Alma, quinto vehículo sutil del ser
humano y quinta dimensión de conciencia donde se
recopilan, como bases sólidas de roca viva, las experiencias
acumuladas en las diversas encarnaciones.
No olvidemos que los Guías nos han manifestado que de
Eva nació un Adán; cosa más que alegórica ya que es de la
madre que nace el Hombre. Así pues, la mujer en este
tiempo, cuando entramos en una fase decisiva y
determinante dentro del Plan, debe continuar emergiendo,
tomando en cuenta los múltiples ejemplos de otras que con sus actitudes, en el pasado,
3. lograron marcar con sus huellas el camino a seguir. Es la hora de la revelación femenina, no
solamente en las mujeres, sino también, en cada uno de los hijos de la Madre.
Apartes de esta página fueron transcritos del libro,
"El umbral secreto" de Sixto Paz Wells
"Tenemos que tener cuidado, pues ella, la Madre, toma formas muy diversas
como por ejemplo la del jaguar o la de la serpiente, para cortarnos el paso,
probándonos el valor y la fe. También actua a trevés del agua y el viento,
lanzando contra nosotros los elementos. Pero no olvidemos, que al ser
madre, también lo es de nosotros; no actuemos como extraños en ella,
sintámonos mas bien sus hijos, respetando a nuestros hermanos y así, ellos
nos respetarán a nosotros".
El guardián de la ribera
¿Qué pasaría si de repente alguien entra a nuestro hogar sin nuestro consentimiento, y va a
la cocina, abre la nevera, saca lo que le apetece y después, se tira en el sofá a ver televisión
y a escuchar el estereo a todo volumén?
No nos gustaría, ¿verdad? Pues esa es muchas veces nuestra actitud frente a la
naturaleza cuando vamos a visitarla en parques o zonas rurales de nuestros países.
Llegamos a ella y sin importamos entramos, sin pedir ni siquiera permiso al guardián del
lugar. Sí, al guardián, ya que cada lugar tiene su vigilante o custodio invisible ante nuestros
ojos o inclusive se representa en determinadas oportunidades por medio de alguno de los
animales, pudiendo ser una ave o un cocodrilo o cualquier otra especie.
Pero no solamente demostramos nuestra inconciencia de esta forma; también la expresamos
cada vez que el ser humano en su afán de resolver los conflictos de una forma
armamentista, detona una bomba de gran poder (como las que se vieron en la Operation
Iraqui Freedom o en los ensayos franceses en el océnao Pacífico) sin importarnos las heridas
que le podamos causar a la Madre, a nuestra amada Merla, que se resiente en cada uno de
los miserables golpes con que le atinamos. Y después los muy civilizados dicen que no hay
cosa más fea que pegarle a la mamá. ¿Muy civilizados o muy hipócritas?
"No mataréis ni bestia ni Hombre, ni aun el alimento que pasa por vuestra
boca,
Porque matando el alimento, no obtenéis de él vida, sino muerte, y contraéis
una deuda que habréis de pagar en cumplimiento de la Ley
Con el reino animal que es hermano del vuestro
Así, habréis de derramar la sangre humana en guerras y en luchas fraticidas
Así, como derramáis su sangre en vuestros mataderos..."
Aparte de Evolución, Camino al Infinito
Este aparte nos muestra a las claras que todos vivimos relacionados, que no somos entes
separados y que son nuestras propias e inconcientes acciones las que nos llevan a sufrir las
consecuencias de dolor, de las cuales luego nos preguntamos "¿por qué a mí?", olvidando las
Leyes, como la Ley de Causa y Efecto.
4. Pero el efecto de estos artefactos explotando en la superficie, también trae graves
consecuencias a la atmósfera con sus gases y humaredas, pero aun más, al interior, que
hoy ya sabemos es hueco en algunas zonas y en donde conviven seres (los Maestros y los
sunkies, una raza hermana a la nuestra) que sufre terriblemente ante estas acciones
basadas en el miedo, que no es más que sentirse separado del Creador, madre y padre.
Sabias culturas como la Inca, la Maya, así como la Hopi y los egipcios nos han dejado
como parte de su legado una referencia de luz que nos habla del respeto a la Madre, de su
identificación trina que nos llevaría a convertirnos en
Maestres del conocimiento si comenzamos a
percibirnos a través de ella misma. Esto es lo que nos
dice al respecto, un verdadero Maestro, Alcir:
"Ma es la Tierra, la Madre, el Hogar. La Tierra
no es solamente el suelo que pisan, sino
también lo que hay abajo del suelo y lo que
se halla en los cielos; todo ello forma parte de
la estructura planetaria. Hablamos de un
concepto antiguo que quedó plasmado en la
sabiduría Inca: Janan Pacha, Cay Pacha Ukju
Pacha. Los tres mundos del Imperio del Sol.
Pues al descomponer de esta forma la palabra
Maestro, veremos que significaría Ma es tres,
es decir que la Tierra guarda un equilibrio,
donde el número tres representa a su vez los
tres planos de preparación: el físico, el mental
y el espiritual. Seguro se preguntarán qué
relación existe en ser un Maestro al servicio
del Plan, con lo antes expuesto. Pues un
verdadero Maestro conoce y respeta el hábitat
que ocupa, en este caso la Tierra. Y al cumplirse esto, el Maestro se funde
con su verdadero hogar, el Cosmos. El Maestro es un ser integral, por ello no
descuida el trabajo en los tres planos".
El aprender a reconocer esta realidad, ajena a las costumbres, es un paso fundamental para
convertirmos en ese ser integral que nos lleva a la maestría de nusetro propio ser interno
que como un diamante en bruto espera ser reconocido en su incandecente brillo.
La Madre contiene en sí los elementos básicos para nuestra subsistencia. Ellos son conocidos
como los Elementales. Estos seres fueron creados para servir a la humanidad a través de su
propio elemento.
Las Salamandras a través del Fuego.
Las Ondinas a través del Agua.
5. Los Silfos y las Hadas a través del Aire.
Y los Gnomos a través de la Tierra.
Con su labor y el uso de sus propias vidas, estas criaturas nos proveen con la envoltura
carnal que llevamos, en el agua que bebemos, los alimentos que ingerimos, el aire que
respiramos y todo lo demás que precisamos para mantenernos sobre este hermoso planeta.
El Plan divino resolvió que el Hombre debe ser servido por amor, pero que a su vez, a
medida que creciera, derramase a su vez Amor, Gratitud y Bendiciones a todos sus
hermanos que lo han acompañado en este periplo de reconocimento de la Esencia en si
mismo.
Estos seres son creación del ingenio de la Madre, que como buena representante del género
femenino, se las rebusca para darle todo lo necesario a sus hijos, para que no nos falte
nada, limpiando los aires de los polutantes de las fábricas y de los motores de los vehículos;
descontaminando las aguas de los desperdicios que le derramamos; regenerando la tierra de
las inmundicias que le tiramos, así como transmutando con el fuego, (energía violeta) las
impurezas y los miedos de la masa mental y emocional colectiva que conforma su aura
planetaria.
Gaia por medio de las acciones de sus ángeles transformadores y creadores, nos invita a
observar su ejemplo para que lleguemos a imitarlos. Más esto solamente será posible cuando
el Hombre despierte su aspecto complementario, el femenino, y descubra en él a la misma
Naturaleza.
"La Luz del Nuevo Tiempo habrá apaciguado la furia de los elementos, que
entregados al regaso de paz y armonía Universal, habrán dado la lección de
vida al Hombre actual, quien forjado en la experiencia de miles de años,
habrá aquietado su espíritu, permitiendo que lo que en él yace, exprese su
perfección. Así pues, esta Luz finalmente habrá restablecido el equilibrio."
Principios del Bredam
Según las tradiciones orientales hemos llegado a un
momento muy especial en los ciclos cósmicos: el Kali Yuga.
Las corrientes de irradiación cósmica y planetaria se hallan
concentradas en América, desde la Antártica hasta Alaska,
cual columna vertebral planetaria y eje de los chakras a ser
reactivados en el mundo. América corresponde a las
antípodas magnéticas y no precisamente a las geográficas, lo
que fue en su momento el rayo masculino en el Himalaya. El
rayo femenino de la creación se ha concentrado con gran
fuerza en esta parte del globo terrestre y en esta época de la
humanidad. Es por esto que estamos ante el momento del
despertar de la fuerza femenina intríncica en cada uno de
nosotros para saber sintonizarnos a esta nueva era.
Los Guías nos recomiendan fortalecernos en la labor
individual, aportando en ejemplo y dedicación para irradiar
a nuestros países, al continente y al mundo con la unión de
mentes y corazones movilizando energías positivas, así,
disiparemos poco a poco, la concentración de energías de
violencia, desaliento y frustración, trasmutando lo malo y consolidando la esperanza con
acciones efectivas en el campo de la solidaridad y el genuino amor. Para eso tenemos que
asumir roles que nos comprometan a equilibrar las ruedas o vortices planetarios en
correspondencia con los del ser humano.
El Guía Oxalc:
6. Para entender esto de los roles, imagínense que vuestro mundo va de la
Antártida a el Artico, al revés de cómo se ve en vuestros mapas. La Antártida
correspondería al chakra de la Coronilla, al color violeta de la
trasmutación, el cambio, la alquimia, el misticismo , la magia y la fe; allí se
guarda el secreto y misterio de la Lemuria, que encierra también nuestros
fallos (de los Oriones y Pleyadianos ) como Guardianes de Mundos. Este
centro mantiene la forma de la Flor de Loto, que tiene que ser desenterrada
del fango y del hielo. La trascendencia de la humanidad depende de este
centro que esta dormido y que deberá ser despertado, para restablecer la
conexión definitiva.
El sexto centro es Chile y la Patagonia, que incluye el sur de la Argentina. A
este chakra le corresponde la estrella del equilibrio, la mente y la
espiritualidad.
El quinto centro es el poder de la
palabra mágica y la creatividad, se
encuentra compartido entre la mitad
superior de la Argentina, todo Bolivia y
Paraguay. De allí saldrá mucha
información, acompañado de palabras de
poder.
El cuarto centro esta repartido entre
Uruguay, el sur de Brasil y Perú. Es el
corazón, la cruz del positivismo, es el
amor y la sanación del planeta. Son las
puertas que se abren a otros tiempos y
espacios para que fluya el conocimiento del amor en su expresión suprema.
El tercer centro que corresponde al Plexo Solar, es el de la sabiduría y el
conocimiento; es la mente lúcida y la sintonía, y concierne a la integración en
la unidad del círculo. Este centro está entre el norte de Brasil, Ecuador y
Colombia, con sus correspondientes intraterrenos.
El segundo centro es el de la voluntad, abarca a los países
centroamericanos incluyendo a México y al Caribe, los cuales tendrán que
aportar personalidad y voluntad al momento presente orientándolas hacia lo
espiritual.
El primer centro es del amor y las pasiones, que tienen que ser conocidas,
conquistadas, dominadas y trasmutadas, correspondiendo a Estados Unidos y
Canadá.
Ya ha sido mencionado que para que el Hombre despierte la consciencia de sus siete
cuerpos, deberá primero activar y equilibrar sus chakras para que estos como fuentes
energéticas que son, lancen sus rayos desde el interior del Templo. Así mismo, la Madre a
través de sus glándulas planetarias desprenderá su energía en un fluir constante
determinando así, el nuevo estado de conciencia en que se envolverá su Nuevo Hijo. Como
nos lo reafirma el Maestro Soromez en el libro de Luis Fernando Mostajo, Viaje hacia el
Templo Interior, "cuando físicamente quede anclada esta energía maravillosa, entonces se
logrará una irradiación permanente de ésta hacia toda la humanidad, impulsando al planeta
hacia un gran salto dimensional que traerá consigo en nacimiento de una Nueva
Humanidad".
Sin lugar a dudas, hoy estamos frente a la gestación del Nuevo Hombre que vendrá luego del
parto de la Madre Tierra, Pacha Mama, Macune, Tonanzín Nana Tlalli, Gaia, Saras, Urantia,
María, Guadalupe ...o Merla.