1. Porque creo en la biblia
Existen muchas razones la primera es la que Dios da: profeta les levantaré… y pondré mis palabras
en su boca. Muchas personas han afirmado estar hablando de Dios, pero realmente hablan en
nombre de Dios. O solo son falsos profetas? Dios dice que hay una manera de poder saberlo: si el
profeta hablare en nombre de jehová, y no se cumpliere lo que dijo, y aconteciere, es palabra que
jehová no ha hablado; con presunción la hablo el tal profeta; no tengas temor de él.
La biblia nos dice que examinemos todas las cosas y retengamos lo bueno. Sin embargo,
frecuentemente n o estamos dispuestos a hacer eso, por el simple hecho de que se necesita un
pequeño esfuerzo intelectual de nuestra parte para llegar a ser obreros que no tiene de que
avergonzarse. Cuando nos examinamos las bases o fundamentos de nuestra fe, descubrimos que
satanás usa nuestra ignorancia para atacar nuestra fe, y cuando experimentamos dificultades. Él
siembre dudas en nuestras mentes.
Por otra parte, las profecías de la biblia son increíbles específicas y detalladas. Tiene que cumplirse
exactamente. No puede caber la posibilidad de que las profecías sean solo adivinaciones, porque
se realizaban con cosas de las cuales no había posibilidad de que acontecieran alguna vez.
En todos los escritos de buda, confusión y lao-tse, no hallara usted no solo un ejemplo de profecía
predictiva. En el Corán, no hay un ejemplo de profecía específica, en la cual el mismo Mahoma
profetiza que regresara a la meca. Muy diferente a la profecía de Jesús. Que dice que regresaría
del sepulcro, la primera se cumple fácilmente; la otra es imposible para cualquier ser humana
Hay más d 100 profecías específicas considérese los grandes muros de babilonia. El historiador
Herodoto nos dice que esos muros tenían torres que se elevaban a 92 metros de altura, por
encima de la altura de los muros mismos que era de 61 metros. Los muros tenían 57 metros de
espesor en la base y encerraban una superficie de más de 500 kilómetros cuadrados. La ciudad de
babilonia era inexpugnable. Pero Dios dijo con respeto a esas torres y a esa ciudad: EL MURO
ANCHO DE BABILONIA SERA DERRIBADO ENTERAMENTE…ESTE LUGAR…PARA SIEMPRE HA DE SER
ASOLADO.
Para que nosotros creamos sus promesas. El también prometió que el que cree en el hijo nunca
morirá, sino que tiene vida eterna; y que el que no cree en el hijo no vera la vida eterna, sino que
la ira de Dios está sobre él. La veracidad de estas palabras y la certidumbre de su cumplimiento
están confirmadas por más de 2000 profetas que se han cumplido. Cualquiera que les desprecié,
no tiene que echarle a nadie la culpa de su propia destrucción sino a si mismo