Francisco de Goya comenzó su carrera pintando escenas costumbristas hasta los 40 años, cuando se convirtió en pintor de la corte real española y el retratista más popular de la aristocracia. Sin embargo, su sordera y las guerras en las que España se vio envuelta lo llevaron a adoptar un estilo más crítico y oscuro, creando famosas obras como las Pinturas Negras y Saturno devorando a sus hijos. Algunas de sus obras más importantes también incluyen La maja vestida,