Los estudiantes construyeron "escarpias", un utensilio de cocina tradicional de su pueblo en Cádiz, España, para vender en un mercadillo solidario anual entre escuelas. Usando sus habilidades en carpintería aprendidas en un curso profesional inicial y restos de madera del taller escolar, los estudiantes diseñaron un prototipo y luego construyeron varias escarpias para recaudar fondos para una fundación benéfica.