2. Anatomia
Orden: Rodentia.
Familia: Esciúridos.
Género: Sciurus.
Especie: Sciurus vulgaris (Linnaeus, 1758).
Subespecies presentes: Aunque es una cuestión con cierta polémica, se
admite, sobre la base de criterios morfológicos y de color, que en la Península
Ibérica hay presentes seis subespecies de la ardilla roja
Longitud de la cabeza y cuerpo, sin incluir la cola: entre 19 y 24 cms.
Longitud de la cola: de 15 a 20 cms.
Peso: Depende de la subespecie, y va desde los más de 500 gramos en el
grupo infuscatus-hoffmani, a los 200 gramos en el grupo alpinus.
Status de la especie: No amenazada.
3. Alimentación
La ardilla se alimenta de forma fundamental de frutos secos y semillas,
principalmente del pino (piñones) que pela con gran habilidad de modo que
una ardilla puede emplear unos 3 minutos en dejar completamente limpia una
piña. También puede incluir en su dieta frutos otoñales, setas, brotes de ramas
tiernas, líquenes, huevos o incluso pájaros, los que localiza en los árboles en
los que se mueve con gran agilidad, pudiendo efectuar saltos de hasta cinco
metros; acrobacias que realiza gracias a sus cualidades físicas y a tener muy
desarrollado el sentido de la vista, lo que le permite calcular muy bien las
distancias en sus rápidos movimientos.
4. Reproduccion
Celo: Como en la mayor parte de los roedores, está condicionado por la
disponibilidad de alimento, aunque suele haber dos períodos anuales que
coinciden entre enero-abril y junio-agosto.
Gestación: La gestación dura de 40 a 60 días
Época de parto: Las hembras primerizas solo tiene un parto al año,
mientras que a partir del segundo año son posibles dos partos anuales,
uno en primavera y otro a mediados, o final de verano.
Parto: De 1 a 6 crías, normalmente 3 ó 4, que pesan al nacer 12 gramos y
que nacen con los ojos cerrados y sin capacidad auditiva. A la semana
les sale pelo y a la cuarta o quinta semana abren los ojos y ya pueden oír.
5. Principales problemáticas
La destrucción de hábitats y la lucha contra la procesionaria del pino,
empleando métodos no selectivos, mediante la utilización de insecticidas de
amplio espectro, fundamentalmente fumigaciones áreas en pinares afectados
por plagas, han supuesto gran mortandad en la especie, bien por contacto
directo con el producto (intoxicación) o por disminución de la capacidad de
fecundación y/o esterilización, principalmente por el ilícito empleo de productos
derivados del DDT. La ardilla también ha sido objeto de caza por alimañeros,
que vendían su piel o disecaban el animal, dada la belleza y atractivo que el
animal siempre ha tenido para el hombre. Hasta hace unos años la caza era
otra amenaza, en cuanto que también se cazaba la ardilla, unas veces para
comérsela, otras por simple “placer” de matar a un animal que se movía entre
los árboles o por considerar que se preda sobre los huevos de otras aves y era
un enemigo a eliminar.
6. Excrementos
Su forma y color va a depender mucho del alimento consumido y de la época
del año. Por lo general presentan un color marrón o negro, y un aspecto
semiesférico, parecido al del conejo, aunque de menos tamaño y sin formar
esferas tan perfectas, siendo su forma más irregular y de un tamaño que
puede ir de los 0,5 a los 0,8 cms.
7. Huellas
Huellas: Las extremidades posteriores son más largas que las anteriores,
estando ambas cubiertas de pelo. Las patas delanteras cuentan con cuatro
dedos y con cinco las traseras, en ambos casos provistos de unas uñas
alargadas, fuentes y puntiagudas, que quedan perfectamente marcadas en los
medios óptimos para ellos (barro, limo o arcilla), dado que el poco peso del
animal impide que se marque con nitidez su huella fuera de estos lugares. El
aspecto de la huella es alargado, de unos 4 cms. de largo por 2 cms. de ancho,
en la que destacan las uñas junto a las huellas digitales (muy alargadas). La
huella plantar es muy irregular, al estar constituida por una serie de
callosidades llamadas lóbulos (cinco), de los que tres corresponden a la
almohadilla plantar y los otros dos posteriores al talón o parte superior. Debe
tenerse presente como no suele imprimirse esta huella sobre el suelo y
cuando lo hace lo normal es que aparezcan juntos los lóbulos plantares, con el
aspecto de uno solo de forma irregular, mientras que los dos del talón no
suelen marcarse en el suelo.
8. Curiosidades
Curiosidades ecológicas. La ardilla entierra en el suelo frutos otoñales a
modo de despensa, cuando abundan en la naturaleza, para consumirlos
posteriormente cuando escasean los alimentos. Muchas de estas semillas no
las localiza o quedan olvidadas, posibilitando que de ellas nazca un nuevo
árbol. De aquí que la ardilla ha sido llamada como “el plantador de árboles”.
¿Te gustaría imitarla?. Cuando vayas al bosque entierra tú también semillas y
posibilitaras que algún día nazca un árbol