Este himno cristiano celebra la resurrección de Jesús de la tumba y su victoria sobre la muerte. Describe algunos eventos clave de la resurrección como María llorando ante la tumba vacía y los ángeles anunciando que Jesús había resucitado. También expresa la esperanza cristiana de que, al haber resucitado, Jesús ofrece vida eterna a aquellos que han sido redimidos por su sacrificio.