Este estudio analiza la composición genética de las poblaciones de trucha común en los ríos Aragón y Gallego en Aragón, España utilizando marcadores enzimáticos. Los resultados muestran que el 86.33% de las truchas en el río Aragón son autóctonas, mientras que en el río Gallego es del 58%. La presencia de trucha autóctona se reduce a las cabeceras de las cuencas estudiadas debido a repoblaciones con truchas no nativas.
Habilidades Motrices Básicas de manera didáctica para niños
ESTUDIO DEL IMPACTO GENÉTICO DE LAS REPOBLACIONES CON TRUCHA COMÚN
1. (CoMMedia)
ESTUDIO DEL IMPACTO GENÉTICO DE LAS REPOBLACIONES CON TRUCHA COMÚN EN LAS
CUENCAS DE LOS RÍOS: ARAGÓN Y GALLEGO.
Mitjana, O; Clavero, JL; Josa A; Espinosa E.
Unidad de Reproducción y Obstetricia, Departamento de Patología Animal. Facultad de Veterinaria. c/
Miguel Servet 177, 50013 Zaragoza. España.
Resumen
El objetivo de este trabajo ha sido la localización y cuantificación de las poblaciones de trucha común
autóctona en dos de las cuencas fluviales de la margen izquierda del río Ebro; las de los ríos Aragón y
Gallego. El método para la diferenciación genética entre la trucha común de origen centroeuropeo
utilizada para la repoblación y la trucha común autóctona, fue un análisis enzimático. .El marcador
utilizado fue la lactato deshidrogenada (LDH-5). Los resultados obtenidos son: el río Aragón presenta un
elevado porcentaje (86.33%) de trucha común autóctona, mientras que el Gallego presenta un porcentaje
del 58%. Se concluye que la presencia de trucha común autóctona, esta reducida a los tramos altos de
las cuencas estudiadas.
Justificación
En este trabajo el estudio de la composición genética de diversas poblaciones de trucha común (Salmo
trutta L.) repobladas intencionadamente con líneas cultivadas sirve para conocer las relaciones genéticas
que se establecen entre poblaciones naturales y cultivadas. Para ello se utiliza la variabilidad genética
observada en loci enzimáticos que codifican para alelos exclusivos de las líneas de piscifactorías por una
parte y de las poblaciones naturales por otra.
En la Comunidad Autónoma de Aragón hay una creciente demanda, tanto por parte de las federaciones
de pesca como de grupos ecologistas, así como por parte de las instituciones gubernamentales de un
estudio genético de las poblaciones de truchas que viven en nuestros ríos. Esta preocupación a la cual es
necesario dar una respuesta, busca una mayor integración de las especies autóctonas en sus
ecosistemas naturales así como la conservación de estos ecosistemas.
Por ello creemos que la contribución al estudio de la variabilidad genética de la trucha común (Salmo
trutta) en los ríos de la Comunidad Aragonesa puede ayudar a un mejor conocimiento de su variabilidad
genética asimismo como una mejora en su gestión futura.
Material y Método
Para el presente trabajo se ha realizado un plan de muestreo completo en los tramos altos dos de las
principales cuencas de los afluentes del Ebro; la cuenca del río Aragón y la cuenca del Gallego.
En la medida de los posible se eligieron tramos de ríos, lo mas próximo a las cabeceras con el fin de
encontrar las áreas de un “posible refugio” de las truchas comunes autóctonas (GARCIA-MARÍN &
UTTER, 1999; POTEAUX & BONHOMME, 1998). En dichas zonas hay un menor impacto de la acción del
hombre, especialmente en lo referente a la contaminación del agua y a la acción de las repoblaciones.
En el río Aragón dado su importancia fueron seleccionados 35 puntos de muestreo, en algunos de los
cuales hay mas de una zona de pesca. Se pescaron un total 232 truchas para el estudio electroforético.
En el río Gallego solo se realizaron tres muestreos, con un total de 75 truchas.
Las muestras de los ríos se han capturado mediante dos equipos de pesca eléctrica, uno fijo y otro portátil
de mochila. Se realizaba un recorrido medio de 100 a 400 metros en cada punto de muestreo, en los
cuales se recogían una media de 10 a 20 individuos, este tamaño medio se determino en base a su
adecuada representatividad genética (NEI, 1973). Interrumpiéndose cuando el número de ejemplares
capturados era mayor o bien cuando el trayecto recorrido superaba los 400 metros. Este método de
captura asegura que la muestra sea genéticamente representativa de la población de truchas en el área
seleccionada del río y minimiza la posibilidad que los peces pertenezcan a una o pocas familias
(FLEMING, 1983).
El análisis electroforético de las proteínas codificadas por estos genes, es una forma sencilla y
relativamente barata de estudiar la variabilidad genética en peces, por lo que ha sido la técnica de
elección para la caracterización de las poblaciones de truchas europeas, en Suecia ( ALLENDOF, 1976 y
1977, RYMAN, 1981 y 1983, RYMAN & STAHL, 1981 y JORDE et al. 1991). En Irlanda e Islas Británicas
(FERGUSON & MASON,1981), se realizaron electroforesis en geles de almidón en una adaptación de la
metodología descrita por AEBERSOLD et al., 1978, a la disponibilidad de nuestro laboratorio.
Resultados y Discusión
Según los resultados de nuestro estudio así como los realizados anteriormente en las poblaciones de
truchas españolas por GARCIA-MARÍN (1991, 1996, 1999), MORAN & PENDAS, (1991, 1995),las
poblaciones autóctonas de trucha común presentan en alta frecuencia, o fijado el alelo *105, mientras que
2. en las de repoblación es el alelo *100 el más común. HAMILTON et al., (1989), indican como estos alelos
parecen diferenciar las zonas que estuvieron libres de hielos durante el ultimo periodo glaciar, que
presentarían el alelo *105 como el mas abundante, de las zonas recolonizadas por la trucha común con el
retroceso de los hielos al final de la glaciación y en las que el alelo 100 sería el mas frecuente. Además de
estos dos alelos, en este estudio se ha detectado la existencia de otro alelo de movilidad más rápida y
que denominamos 110.
El marcador genético utilizado para diferenciar el ecotipo mediterráneo del atlántico ha sido la presencia
del alelo LDH-5*100 característico de las poblaciones del centro y norte de Europa y que esta ausente en
las del sur (HAMILTON et al., 1989). Su presencia debe suponerse consecuencia de las repoblaciones
efectuadas, ya que tradicionalmente los stocs utilizados provienen de la zona de dominio de este alelo
(Alemania, Escocia, Francia y Escandinavia). En las poblaciones mediterráneas en Francia, se han
observado resultados similares ya que también se utilizaran stocs de origen Atlánticos para la repoblación
(GUYOMARD & KRIEG, 1986; BARBAT-LETIERRIER et al.,1989).
Los resultados obtenidos en el río Aragón son; en la margen izquierda, compuesta en su mayor parte por
pequeños ríos de poca entidad, en lo que se refiere a su aporte total al caudal del Aragón, de los tres ríos
muestreados, se han encontrado unas poblaciones de trucha común autóctona, prácticamente intacta.
Probablemente debido a la poca incidencia de las repoblaciones en esta zona. Sin embargo, no se puede
decir que se trate de grandes poblaciones ya que son como se ha dicho pequeños barrancos.
En la margen derecha se han muestreado catorce afluentes de la cabecera del río Aragón, encontrándose
siete de ellos constituidos por una población de trucha común autóctona de un 100%, barranco de Izas,
río Veral,, río Esca, barranco de Urdues, barranco de, Aguerri, río Lubierre y el barranco de Acherito. Por
otra parte se han encontrado cuatro afluentes con una población de trucha comun con unos porcentajes
del 90 al 98 % en Canal Roya, Cabecera del Aragón, río Aragón Subordan y barranco de Baraguas. Con
peores resultados se han encontrado el río Estarrum, con una población de un 50% de trucha comun
alóctona y L´Hospital, donde toda la población es de trucha común alóctona.
Los resultados obtenidos en el muestreo de los tres puntos elegidos en la cuenca del río Gallego, han
sido bastante heterogéneos. Así en un pequeño barranco lateral se ha encontrado una población de
trucha común autóctona de un 100%; sin embargo en el río Guarga no se ha encontrado mas que un 33%
de trucha común autóctona. En el afluente, río Aurin, se ha encontrado por otra parte un 60% de
población autóctona.
La presencia de poblaciones estables en los tramos altos de la cuenca del Ebro nos da la posibilidad en
este momento de lograr con una adecuada gestión no solo en el mantenimiento de dichas poblaciones
sino también para una recuperación de la trucha autóctona.
Una adecuada política global de gestión piscícola en la trucha común supondría: Recuperación de las
condiciones óptimas de los ríos como medio indispensable para mantener poblaciones de trucha común.
Identificación de las poblaciones de trucha común existentes en los ríos y su pertenencia a grupos
autóctonos o no. Recuperación de las poblaciones autóctonas a partir, siempre que sea posible, de las
que sustenta el propio río. Repoblación, en otros casos, a partir de material autóctono que, en su caso,
pudiera conservarse en piscifactoría.