1. Ensayo del
Populismo
“Historia, Geografía y ciencias sociales”
Nombre: Shigri Tapia Fredes.
Curso: 3° Medio B.
¿Qué es el populismo? ¿Cuáles son sus aspectos positivos y negativos? ¿De qué manera
afecta el populismo en la democracia?
2. El Populismo (del latín populus “pueblo”) como tal fue usado por primera vez hacia fines
del siglo XlX para describir un tipo de movimientos políticos, aunque este no es un
término que forma parte de la Real Academia Española (RAE) pero que, sin embargo, se
utiliza muy frecuentemente en el ámbito cotidiano y en los discursos de opinión. Apareció
inicialmente en Rusia en 1878 como “Narodnichestvo”, traducido como “populismo” para
nombrar una fase del desarrollo de los movimientos socialistas vernáculos, que estaba a
favor de los obreros pero con la idea de evitar el capitalismo en el país no lográndolo ya
que solo eran ideas que nunca se concretaron. El Populismo en la actualidad se define
como un término que puede representarse de diferentes maneras pero que tiene como
finalidad sostener la reivindicación del rol del Estado, para defender los intereses de la
generalidad de una población con el propósito de lograr justicia social y el estado de
bienestar. La justicia social significa que quieren lograr la igualdad social, la igualdad de
oportunidades, el estado de bienestar (lograr el cumplimiento de los derechos sociales a
la totalidad de los habitantes de un país), lograr la cuestión de la pobreza, la distribución
de la renta, los derechos laborales y sindicales, entre otras. El Especialista en el
departamento de sociología Edward Shils dice que el populismo no se refería a un tipo de
movimiento en particular sino “A una ideología de resentimiento contra el orden social
impuesto por alguna clase de dirigente de antigua data, de la que supone que posee de
monopolio del poder, la propiedad, el abolengo o la cultura”.
El populismo en palabras más simples es un concepto político que permite hacer
referencia a los movimientos que rechazan a los partidos políticos tradicionales y que se
muestran ya sea en la práctica afectiva o en los discursos combativos frente a clases
dominantes. Este apela al pueblo para construir su poder, entendiendo al pueblo como las
clases sociales bajas y sin privilegios económicos o políticos. Se suele basar su estructura
en la denuncia de los privilegios que encarnan las clases altas, por lo tanto, los líderes
populistas se tienden a presentar como redentores de los “humildes” para así crear una
aceptación en el pueblo. Por eso el populismo en si hace referencia a medidas políticas
que no buscan el bienestar o ayudar al proceso de un país, si no que trata de conseguir la
aceptación de los votantes.
En el lado positivo del populismo hace que el pueblo sea escuchado por el Estado
haciendo cumplir sus derechos buscando favorecer a los agricultores, campesinos,
pequeños empresarios, médicos, profesores, ingenieros, entre otros y con esto dar
menos poder para las elites políticas y económicas corporativas y caudillistas. También en
sus aspectos favorables puede causar la perdida de la centralización, generar mayor
participación de los movimientos, surgimiento de nuevos líderes que tienen un espacio
nuevo para desarrollarse y producir mayores organizaciones de la sociedad civil. Cuando la
noción de populismo se utiliza de manera positiva, se califica a estos movimientos como
propuestas que buscan construir el poder a partir de la participación popular y de la
inclusión social. Esteban Hernandez señala que el populismo se definiría como “Una
alternativa a la aristocracia, mucho más probable que el comunismo, y que esa razón fue
denostado por los sectores conservadores”
Pero en el lado negativo del populismo puede generar falsas expectativas para un
favorecimiento individual de la persona que quiere hacerse cargo en el liderazgo, dando
discursos que no cumplirá ya que solo hará creer que saciara las necesidades que desea el
pueblo (manipulación), esto es más conocido como populismo de derecha neopopulismo,
uno de los casos de políticos manipuladores serian Donald Trump en Estados Unidos,
Marine Le Pen en Francia y Mauricio Lacri, entre otros. En algunos casos los movimientos
populistas plantean evitar transformar las relaciones sociales, económicas y políticas
debido a que quieren preservar el poder y la hegemonía política a través de la popularidad
en masas. Otro de los lados negativos de este es que el populismo es que es una
combinación de ofertas desproporcionadas, por parte de los políticos y gobiernos, de
incrementos del gasto público, nacionalizaciones del empresas privadas, proteccionismos,
lucha contra el imperialismo, indigenismo, política de sustitución de importaciones,
impago de una parte de la deuda eterna y control gubernamental de los recursos
naturales del país y su explotación, Los gobiernos populistas suelen romper las reglas
establecidas e imponen una constitución a la medida de sus deseos. El economista
3. R.Dornbusch dijo en 1991, que el populismo es “un modelo centrado en el crecimiento
económico y la redistribución de la renta que presta menos atención a la estabilidad de
precios, el equilibrio de las cuentas públicas y la inversión extranjera”.
Las consecuencias del populismo son devastadoras para la democracia ya que trae consigo
un futuro de fracaso si es consolidado en un país, ya que él los populistas se sienten
autorizados para cumplir sus propósitos por lo cual se consideran legitimados para ignorar
el marco jurídico e institucional, usualmente “hecho contra el pueblo” para así lograr los
superiores propósitos de la nación.
El populismo ataca a las finanzas públicas ya que siempre requiere insuficientes recursos
públicos para atender las necesidades populares, y como su discurso se basa en ayudar a
las personas con menos recursos nadie puede estar contra ello, si no, es muy
probablemente considerado neoliberal de derecha. Esto afecta la transferencia de la
gestión pública, especialmente su manejo financiero ya que cualquier intento de
publicidad será expuesto como un ataque al proyecto social.
Y cuando el populismo da sus frutos lógicos de déficit fiscal, violación recurrente del
Estado de derecho, limitación de derechos, concentración del poder político y económico
en ciertos grupos privilegiados, aparecen la desconfianza, la frustración, el desencanto y la
deslegitimación democrática. Y con eso no sólo la democracia y el estado de derecho se
han visto seriamente afectados, sino además la Economía, generando un clima de
descontento, protesta e incluso violencia social, que parecen a veces muy difíciles de
revertir. Y así, entonces, aparece el espíritu autoritario que se esconde detrás del
populismo, llegando a atacar al pueblo que decía defender y el pueblo defendiéndose de
quien le ofreció protección y prosperidad.
Cuando el pueblo se da cuenta que los beneficios prometidos por el populismo no llegan
en general, o solo llega para algunos cercanos al poder y se aleja de las mayorías, se
genera un creciente descontento popular, que presiona a la política populista. La cual, en
primer lugar, en lugar de corregirse, más bien se radicaliza. Ofrece aún más de lo que sabe
no se puede lograr. Encuentra cada vez más puntuales enemigos externos (tanto fuera de
su grupo de apoyo como a nivel internacional), crea teorías de la conspiración bajo el
argumento de la defensa de la “soberanía nacional”, exige más recursos públicos por
medio de nuevos impuestos porque antes “se los robaron” ya que siempre serán
insuficientes, y violenta cada vez más el Estado de derecho, limitando cada vez más
derechos y libertades (acceso a divisas, a mercados externos, al crédito, y hasta a sus
propios fondos por medio de “corralitos”).
Cuando estas nuevas políticas radicales “de sacrificio popular” para cumplir el propósito
populista de “bienestar general” fracasan como consecuencia lógica, la insatisfacción
general es aún mayor, ya que se evidencia el deterioro de los indicadores económicos y
sociales, así como las consecuencias ya muy directas como el desempleo, inflación,
escasez de bienes y en general, una afectación primero a la actividad económica y luego a
la economía familiar creando así pensamientos como el de el filosofo Fernando Savater
que dice que “El populismo es la democracia de los Ignorantes”
Como conclusión el populismo es de mucha ayuda ya que con ello trae bastantes cosas
favorables para el pueblo como el favorecimiento a los obreros, pero también trae malas
debido a que este populismo puede que sea usado para manipular a las personas y
hacerles creer que se harán todas las cosas que el pueblo pide pero es solo para un
beneficio individual de la persona. También el populismo si fuera de manera sensata no
podría facturar todos los recursos que necesita el pueblo debido a la falta de recursos para
costear tales recursos y además se subirían los costos para poder financiar las necesidades
ya que no todos se verían beneficiados con esto. No podría decir que estoy a favor del
populismo o en contra, ya que el populismo está directamente relacionado con hacer
cumplir derechos del pueblo teniendo una mayor movilidad social pero también por otro
lado puede ser bastante insensato y poco transparente ya que los discursos los populistas
no son totalmente cumplidos creando enojo y frustración social.
Bibliografía: