Análisis de los Factores Externos de la Organización.
10.- T.Moeal.FUNDAMENTAL, LA VIRTUD 2.pptx
1. LAS VIRTUDES
HUMANAS DEL
CRISTIANO
1-3.- La naturaleza y necesidades de la virtud.
4.- la esencia de la virtud: intencionalidad, electiva y
ejecutiva.
5.- La reducción de la virtud y su obrar virtuoso.
6.- El término medio de la virtud moral.
7.- La conexión de las virtudes y sus consecuencias.
8.- Cómo se adquieren, se desarrollan y se pierden?
9.- El contexto educativo para el cultivo de la vida virtuosa.
2. El concepto de virtud
La virtud:
Latín: virtus, Griego:
Areté.
Son cualidades buenas,
firmes y estables.
Que perfeccionan la
inteligencia y la
voluntad. Así se conoce
mejor la verdad, con
más libertad y gozo.
Con esto se alcanza la
plenitud sobrenatural, o
sea, el amor (comunión
con Dios y el prójimo).
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La virtud se alcanza con el
esfuerzo, llamadas virtudes
humanas o adquiridas.
Estos perfeccionan la
inteligencia (el conocimiento de
la verdad) y la voluntad (inclinan
los afectos al bien moral)
Las virtudes infusas o
sobrenaturales (S. Agustín: Dios
obra en nosotros sin nosotros)
Las virtudes teologales: fe
esperanza y caridad.
Las virtudes se reciben con la
gracia del E. Santo que hace
dócil y ayuda a caminar a la luz
del paráclito.
3. Las virtudes
intelectuales
Dios ha puesto en el corazón el deseo de conocer la verdad. Este deseo y
nostalgia de Dios se sacia con la verdad absoluta. Una verdad que es conocida
para vivir de acuerdo a ella.
DIVISIÓN DE LAS
VIRTUDES
INTELECTUALES.
Dos funciones de la
razón:
Una especulativa o
teórica (conocer de
manera teórica la
verdad).
Una práctica (qué
acciones son
buenas o malas
frente a la verdad.
Esta es la
dimensión práctica
de la razón.
Perfeccionan la razón especulativa:
Las primeras verdades (el todo
es mayor que las partes. Se
adquieren de manera natural)
La ciencia: perfecciona la
inteligencia (conocer la razón de
sus causas particulares).
La sabiduría (después de todo el
conocimiento se conoce a Dios y
todo se ve desde Dios)
Perfecciona la razón práctica.
La sindéresis es la virtud
práctica (debe hacer el bien y no
el mal)
La prudencia es la frónesis
(delibera y juzga el bien de una
acción).
La técnica o el arte es la téjne
(aplicar rectamente la verdad).
4. Las características de las
virtudes intelectuales
Proporcionan el
conocimiento del bien
y la verdad.
Son innatos a su
mente que es luz
intelectual.
La sabiduría no es
moral pero dirige hacia
Dios, la verdad
absoluta.
La sabiduría conoce y
ama la verdad.
El conocimiento
científico y técnico
pueden convertirse en
medios para conocer y
amar a Dios.
En el conocimiento
hay una dimensión
moral.
5. Las virtudes morales
Noción:
Son hábitos operativos
buenos que disponen o
inclinan moralmente al
bien.
Los hábitos ayudan a la
perfección y son la fuerza
para obrar moralmente
bien.
Los hábito no son
costumbres o automatismo
adquiridos por repetición,
donde no hay reflexión y
voluntariedad.
Las virtudes son
disposiciones del alma, que
solo se destruye por la
voluntad.
Sujeto y objeto.
las virtud morales radican en la
persona en su voluntad (apetito
intelectual) y en los apetitos o
afectos sensibles (irascible y
concupiscible).
La voluntad perfeccionada por la
virtud obedece mas a su razón y
quiere el bien.
Los apetitos o afectos sensibles
necesitan ser perfeccionados
(necesidad de encausar) por la
fortaleza (irascible) y la templanza
(concupiscible).
El sujeto con el
perfeccionamiento de la voluntad
y los afectos sensibles gustan y
se dirigen con fuerza al bien y la
verdad.
Objetos y fines son las diversas
clases de obras buenas.
6. División
Las virtudes cardinales
La prudencia
(perfecciona a la
inteligencia por es la
madre de las virtudes)
La justicia (dar a Dios y
al prójimo lo que es
debido)
La fortaleza (resistir a
las tentaciones y
superar obstáculos)
La templanza (modera
los placeres y modera el
equilibrio en los bienes
creados)
Las virtudes tienen dos
dimensiones: la general (todas
entran en juego) y la particular
(alguna en particular por un caso
concreto. Ej. Placer = templanza)
Ellas se dividen en:
subjetivas (diversas especies
de esa virtud).
Integrante (necesarias para la
perfección de un caso)
Potenciales (las virtudes
ajenas son parecidas unas con
otras pero no se confunden)
Esto podemos encontrar en
Platón, S. Tomás y en el CEC
1809
7. La necesidad de las virtudes
morales
Tenemos tres razones
para adquirir la virtudes.
A.- La razón y la
voluntad no están
determinadas a obrar
con rectitud. La virtud
ayuda a elegir y
capacitar para obrar
con rectitud.
Examen 25
R
B.- el pecado original dificulta
para conocer la verdad. La
voluntad no se inclina con
facilidad al bien.
Dificulta la sumisión de los
apetitos a la razón.
Las virtudes ayudan a curar
y ordenar al bien.
C.- los momentos
imprevisibles y difíciles piden
estar ejercitados en elegir lo
bueno ayudado por las
virtudes.
La respuesta a Dios supone
una búsqueda de las
virtudes para que estemos
inclinadas siempre al amor.
8. Tres dimensiones esenciales de
la virtud moral
Para obrar bien se
requiere:
1.- recta intensión (la
voluntad quiera un fin
bueno y conforme a
la recta razón.
2.- recta elección (la
razón determine la
acción y la voluntad
la elija)
3.- recta ejecución.
Las virtudes capacitan
para:
A.- Proponer fines
buenos (intensión de
virtud)
B.- elegir medios
buenos para
alcanzar esos fines.
C.- ejecutar las
acciones elegidas.
9. La dimensión intencional.
Lo más importante es la
elección (necesario la
intención buena, unido a la
razón moralmente
buena<<la virtud permite lo
bueno>>para la felicidad y
la perfección.
La intensión con la virtud se
convierte en una creciente
con naturalidad con el bien.
Dimensión electiva.
Para actuar no basta una
buena intención sino
también los medios
elegidos.
El hábito de buena elección
es fruto de la virtud moral.
La virtud moral permite elegir lo
bueno y convertir al hombre en
prudente.
La voluntad virtuosa no duda en
querer el bien moral. Aquí la
razón delibera sin obstáculos.
Para la elección, el hombre
necesita : normas morales
Considere que es buena, que
tenga una con naturalidad que da
las virtudes morales. Estas
virtudes necesitan las virtudes
intelectuales: la syndéresis y la
prudencia.
Las virtudes ponen en orden los
apetitos bajo la recta razón.
La dimensión ejecutiva.
Lo interno se exterioriza de modo
perfecto.
Al exteriorizar se debe mantener
en la intención recta.
10. Características del obrar virtuoso
S. Tomás copió de los
estoicos, las inclinaciones
naturales son como semillas
de las virtudes (semina
vitutum).
La inclinación en el obrar
virtuoso es el obrar natural y
humano.
Las virtudes potencian la
unión, el orden y la armonía,
propio de la naturaleza
humana.
Con las virtudes: la razón
dirige, a la voluntad manda,
la sensibilidad ayuda, las
fuerzas corporales
obedecen.
La virtud se realiza con
gozo, prontitud y firmeza.
El gozo no es
complacencia porque la
virtud lo convierte en algo
natural que causa gozo y
satisfacción.
La prontitud o facilidad no
es un automatismo sino un
mayor conocimiento de la
verdad.
La firmeza es un obrar con
un querer mas intenso de
la voluntad.
Lo virtuoso es amor al
verdadero bien.
11. Las virtudes morales como
término medio
Aristóteles: la virtud como hábito
electivo lo pone en el término
medio.
S. Tomás: Toma casi todo de
Aristóteles y pone: un cierto
medio.
El término medio no se puede
entender como una mediocridad
en una acción.
S. Tomás: Entre varías opciones
el hombre elige la acción óptima
(se logra con la capacitación de
las virtudes para hacer perfectas y
que alcancen su fin. Y con la
gracia alcanzan a lo sobrenatural,
la santidad).
Aristóteles: los apetitos son
controlados por la fortaleza y
la templanza porque no se
dejan llevar por las pasiones
de excesos.
La elección es de la razón
perfeccionada por la
prudencia, como guía y
medida para alejar de las
obras intrínsecamente
malas.
12. La conexión o interdependencia
de las virtudes
Las virtudes dependen
unas de otras y todas de
la virtud de la prudencia
por ser electiva. Ella
evita el conflicto entre
las virtudes.
La dependencia es para
no provocar
incoherencias en lo
moral.
Al adquirir una virtud
provoca el progreso para
las demás virtudes.
La virtud por su
naturaleza necesita de
las virtudes infusas para
ser elevadas a la
perfección. La perfección
de una obra está
sustentada por la
caridad.
13. Adquisición, crecimiento y
pérdida de las virtudes morales
Las virtudes son fruto
de la libertad.
Las virtudes se
adquieren por la libre
y repetida elección
de los actos buenos
(razón: conoce la
verdad y la voluntad:
ama la verdad)
La repetición no es
un automatismo sino
la acción es querida
y amada.
Los actos interiores:
en la elección de actos
buenos, después de
una reflexión (ejercicio
de la razón)
Los actos exteriores: la
prudencia manda la
información de
acuerdo a las
circunstancias.
14. El crecimiento en las virtudes es
crecimiento en libertad
La libertad crece en el
dominio de los actos y
en la capacidad de dirigir
hacia el fin último.
Ella no se reduce a
elegir entre el bien y
mal sino a dirigir.
Ella crece en la medida
en que el conocimiento
de la verdad y el amor
al bien va aumentando
para tener un dominio
sobre la acción.
Las virtudes
perfeccionan las
potencias espirituales
(razón y voluntad) para
hacer la cosas buenas.
Este perfeccionamiento
contribuye al
perfeccionamiento de la
libertad en esa
capacidad de amar,
conocer y hacer el bien
con facilidad, prontitud y
gozo.
Las virtudes son un
progreso constante
porque cada vez se
ama mucho más la
verdad.
15. Las virtudes se pierden
libremente
La virtud disminuye y se
pierde por falta de ejercicio,
aquí surge el vicio,
contrario a ella.
Los vicios se adhieren
libremente como un
modo inadecuado de
ejercer la libertad.
Inadecuado porque
produce ceguera para
ver lo bueno y la verdad,
por estar esclavizada
por las pasiones
desordenadas.
La ceguera corrompe a
la prudencia, corrompe
a la ciencia moral y a la
sabiduría.
Con los vicios se pierde la
capacidad para elegir el
bien porque es menos libre.
Para seguir siendo
virtuosos hay que renovar
día tras día la virtud, con el
fin de no dejar anidar al
vicio.
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16. La educación en las virtudes
La concepción de la vida moral.
La educación moral produce tensión entre
afectividad (ve muchas normas como
obstáculos) y la razón provocando hostilidad al
corazón.
La educación moral debe ser entendida como un
proyecto hacia la perfección moral de la persona.
Un proyecto realizado por medio de las virtudes,
de manera libre.
MacIntyre: sugiere la estructura narrativa de la
vida moral, o sea, es un todo provocando unidad
intelegíble y ordenada a un fin (telos).
17. Los vínculos de la amistad y la
tradición
No se puede ser virtuoso sin
guía, apoyo y fraternidad de
hombres que gustan hacer el
bien.
La virtud se refuerza, se anima
con el consejo, sabiduría, el
ejemplo.
La virtud necesita un lugar para
cultivar y ejercitar las acciones
virtuosas.
MacIntyre: considera que la
búsqueda de lo bueno está
encuadrado en una tradición
(algunas veces se ve los
principios y convicciones como
A esta tradición pertenecen
las familias, la comunidad,
las convicciones que dan
identidad. En medio de una
familia se practica la virtud.
Puede estar equivocada
la comunidad y la
tradición, por eso la
necesidad de formar a
las personas en el amor
a la verdad y a un sano
espíritu crítico para
corregir los errores.
18. La necesidad de maestros de virtud
La prudencia posibilita en
la adquisición de las
virtudes morales.
Los grandes maestros y
modelos son hombres
prudentes y virtuosos.
Los educadores y
modelos son solo
informan sino que
forman.
El educador debe ser
consciente de que él
mismo está en proceso
de adquisición de
virtudes.
En este proceso con
humildad aprenden de
sus propios discípulos.
El educador tiene una
relación de discípulo y
maestro donde hay amistad
y afecto.
El educador no solo debe
promover la imitación
externa sino también la
interna.
El educador enseña la
parte intelectual para que
ellos mismos realicen la
elección de lo bueno y la
virtud.