Este documento describe la vida de los habitantes de la zona fronteriza entre Israel y Gaza, quienes han vivido bajo ataques casi diarios de cohetes durante los últimos 13 años. Los ataques han interrumpido celebraciones y dejado a los niños de la zona con una rutina marcada por las alarmas de cohetes. Cuando suena la alarma, los residentes tienen sólo 15 segundos para buscar refugio, lo que a veces no es suficiente para que los ancianos puedan ponerse a salvo antes del impacto.